El Bebé José muere en su casa, rodeado de su familia
Kathleen Gilbert
6 de octubre 2011 (Notifam) – La dramática historia de José Maraachli,
conocido popularmente como “el Bebé José”, concluyó definitivamente la
semana pasada.
Alex Schadenberg, de la
Coalición
para la Prevención de la Eutanasia, con sede en Canadá, dijo el miércoles 28
de septiembre 2010 en la mañana que el Bebé José, que irrumpió en los titulares
internacionales a principios de este año cuando los médicos canadienses
tomaron la decisión de retirarle el soporte vital en contra de los deseos de
su familia, murió en su casa el martes 27 de septiembre a las 16:40 2011, rodeado
por su familia.
“José Maraachli vivió una vida que cambió a Canadá”, dijo Schadenburg, cuya
intervención fue fundamental para salvar la vida de José. “Mis pensamientos
y oraciones están con la familia Maraachli”.
El padre de José, Moe Maraachli, escribió ayer en la página oficial de la
familia en Facebook que “José falleció muy tranquilo y con plena paz, tal
como yo pedía por él”.
“Me gustaría agradecer a todos los que contribuyeron en apoyar a José”, dijo
Moe. “Yo se los agradezco mucho”.
La historia del Bebé José comenzó en febrero de este año, cuando la Corte
Superior de Ontario rechazó una apelación de sus padres para llevarlo a
casa, donde él podía morir bajo sus cuidados. Él había sido diagnosticado
previamente con graves problemas neurológicos, por lo que los médicos
dijeron que no había para él esperanzas de recuperación.
La familia impugnó la afirmación que su hijo estaba en “estado vegetativo
permanente”, ofreciendo imágenes que lo muestran moviéndose y reaccionando a
las cosquillas. Su petición era que se le aplicará a su hijo una
traqueotomía simple, que le permitiera respirar por sí mismo, y que fuese
enviado a casa, donde podría morir.
Después de la decisión del tribunal de Ontario, los médicos decidieron
inmediatamente retirar el apoyo vital de José, lo que significaba una muerte
casi segura para el pequeño niño.
“El lunes a las 10 de la mañana van a matar a mi bebé”, le dijo Moe
Maraachli a LifeSiteNews/Notifam (LSN) poco después de la sentencia. “No hay
más humanidad. No hay más posibilidades. Lo he intentado todo por él. No hay
otra instancia de apelación, no hay nada”.
Sin embargo, los defensores anti-eutanasia y pro-vida se unieron en torno a
la familia Maraachli, y efectuaron un espectacular rescate de 11 horas.
Schadenberg y su organización pudieron obtener ayuda legal profesional, con
el resultado que el retiro del apoyo vital del bebé José fue pospuesto en el
último minuto.
Después de eso, con el hospital que seguía tratando de asegurarse el permiso
legal para retirarle al Bebé José el apoyo vital, intervinieron el padre
Frank Pavone y Sacerdotes por la Vida. Organizaron que el Bebé José fuese
trasladado al Centro Médico Infantil Cardenal Glennon, en Missouri, por una
traqueotomía, y se ofrecieron a pagar la factura de los considerables costos
sanitarios de José.
El Bebé José desafió a los críticos al respirar por sí mismo después de la
traqueotomía, y vivió varios meses más en su casa.
El padre Frank Pavone, de Sacerdotes por la Vida, escribió en Facebook, en
la mañana del miércoles 28 de septiembre, que su organización está
“agradecida a todos los que ayudaron a darle más tiempo a él y a su familia
y a compartir su alegría”.
“Este joven niño y sus padres cumplieron una misión especial de Dios”, dijo
el padre Pavone en una declaración distribuida por separado. “En medio de
una cultura de la muerte, donde la desesperación nos lleva a disponer de las
personas vulnerables, ellos afirmaron una cultura de la vida donde la
esperanza nos lleva a acoger y cuidar a las personas vulnerables”.
“Desde mi primera conversación con los padres del bebé José, ellos me
expresaron su confianza en Dios. No tenían ninguna demanda contra Dios en
cuanto al tiempo que su hijo iba a vivir. Ellos simplemente querían cumplir
con su llamado a amar incondicionalmente a su hijo y a protegerlo de quienes
consideraban que su vida no valía nada”.
Parte del motivo por el interés general despertado en el caso del Bebé José
quizás se deba al momento en que coincidió con el debate en los Estados
Unidos de América sobre los “paneles de la muerte” en la nueva ley de salud.
Schadenberg ha advertido que el caso de José revela que Ontario está creando
efectivamente un sistema de esos “paneles de la muerte”, donde se autoriza a
los médicos a forzar decisiones de vida y muerte sobre los pacientes.