VIVAMOS EL ADVIENTO DEL SEÑOR QUE LLEGA
INVOCACIÓN.
Adviento o "advenimiento" son palabras que significan tiempo y actitud de
espera ... con llegada. Por su fuerza intensiva, no las aplicamos al
acontecer rutinario en el que los hombres nos hallamos inmersos, acaso sin
emoción y sobresalto... Las reservamos para hablar de acontecimientos
altamente deseados y esperados (si reportan bienes) o pavorosamente temidos,
si traen consigo males ... Advenimiento altamente deseado y esperado es,
para una joven, el día de su desposorio; para una esposa, el de su
maternidad; y para un pueblo en guerra, el de su paz. Y advenimiento
intensamente temido es, para una familia, el zarpazo de la crisis en sus
relaciones hogarenas; y para una economía modesta, la pérdida del puesto de
trabajo que garantizaba el pan. ...Invoquemos muchas veces este tipo de
"advientos" que salpican de gracia o dolor nuestras vidas, y aprenderemos a
valorar otros igualmente fuertes.
EXPECTACIÓN.
Feliz el hombre que sabe vivir en constante "adviento"! .... Si consideramos
atentamente las cosas, los avatares de cada día nos obligan a vivir siempre
expectantes, pues, queramos o no, transitamos, de la manana a la noche, por
caminos siempre inacabados... , siempre abiertos a la sorpresa ... Nos
hacemos y rehacemos a golpe de sorpresas y esperanzas, sobre todo de
sorpresas gratas y de esperanzas fundadas .... zNo es verdad que, si bien
con frecuencia soportamos días grises, y con lágrimas, damos primacía a los
advenimientos alegres que muestran el rostro positivo de las cosas...? Del
"adviento humano", venturoso, podríamos decir que es tiempo de esperanza
firme y de preparación robusta para dar alcance a presas arduas: a un amor
difícil, a una amistad profunda, a una actitud solidaria, a una mesa
compartid ...
EXPECTACIÓN RELIGIOSA.
Feliz el hombre cuyos "advientos humanos" colman sus esperanzas! Pero más
feliz todavía aquel cuyos advientos tienen auras de "religiosidad" .....
Miremos al hombre que es creyente. Su adviento, por ser religioso (pues
habla de advenimiento de Dios, o de los dioses), es el más bello y sublime
que cabe en la escala de las "esperanzas"... Con razón todas las religiones,
primitivas o evolucionadas, celebraron su peculiar adviento una y otra vez.
A todas les gusta revivir con cierta expectación solemne la cercanía de su
Dios (o de sus dioses)... Cómo "suspiramos" todos los mortales por que
"advenga" a nuestra vida un Ser Divino de rostro amigable y protector ... !
ADVIENTO JUDEO-CRISTIANO Y EXPECTACIÓN SUPREMA.
Todas las religiones celebran su Adviento.... Pero, entre todos los
Advientos celebrados, el que proclaman el judaísmo y el cristianismo ofrece
singularidades extraordinarias, al calor de una fe que se alimenta en la
Palabra y el Amor desbordante de un Dios que es padre del pueblo elegido...
En la tradición judía, YAVÉ, Dios único y creador, se convierte en
providencia amorosa y luz que alumbra toda la historia del pueblo elegido a
través de Alianzas de fidelidad, Leyes de vida y culto, y Promesas de gracia
que recorren los libros del Antiguo Testamento.... Entre esas Promesas, el
ventanal del Adviento se abre con un compromiso sagrado y una exigencia:
compromiso divino de que Yavé enviará a Israel un MESÍAS LIBERADOR ..; y
exigencia al pueblo de que viva a la espera del Mesías, en prolongado
Adviento, sin desfallecer .... ¿No es hermosa esta de Israel, pueblo llamado
a vivir en permanente Adviento, porque el MESÍAS prometido llegará...?
Hermosura es la promesa ! ... Pero no lo es el dolor de la esperanza
frustrada... Porque ese Mesías, el prometido, llegó ya; llegó en la plenitud
de los tiempos, en JESÚS DE NAZARET....! Y los suyos no le recibieron....!
... Los judíos recorren todavía hoy el mundo sonando con otros mesías...
En la tradición cristiana, las cosas cambiaron. Nosotros, iluminados por la
gracia del Nuevo Testamento, confesamos en Adviento y Navidad que Jesús de
Nazaret es el MESÍAS ESPERADO DE ISRAEL y lo adoramos como a tal ... Por eso
hacemos un Adviento jubiloso que colma toda expectación..! Nosotros creemos
que Jesús es el Hijo del Padre, y que el Padre, por amor, nos le envió a
compartir con nosotros la tienda de la vida, haciéndose Nino en las entranas
de la virgen María.... En la fe, aceptamos que el Mesías anunciado, Dios
Hijo, ya se vistió de nuestra naturaleza y se hizo apto para sentir,
imaginar, amar, sufrir, reir, llorar... como nosotros ..... Gocémonos en
ello ..
Adviento! Adviento! ... Seas para nosotros esperanza, acogida y escucha del
mensaje del Mesías que viene a transformar el mundo por el Amor ...!
Ven, Senor, no tardes! ...