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La Espiritualidad MSC viva en África

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Toussaint Iluku msc
(descarga conferencias)

 

Introducción

El equipo de Cor Novum me ha pedido hablarles sobre la manera como se vive la Espiritualidad del Corazón en África: Ante todo quisiera dar gracias a Dios, Señor del tiempo y de las circunstancias; la fuente de toda bendición y de todas las gracias.  En realidad la obra del Padre  Chevalier, cuyo centenario de muerte celebramos este año, es un regalo del amor de Dios.  Toda su obra ha sido inspirada por su gratitud, por el Amor de Dios y su convicción inquebrantable que la renovación de la sociedad va a realizarse y debe realizarse como fruto de la Devoción al Sagrado Corazón, el centro de todo el universo.   

Al celebrar el centenario de la muerte de nuestro Fundador quisiéramos honrar la memoria de este gran hombre, de este santo religioso; quien estaba dispuesto a desafiar la resistencia de sus tiempos para ayudar que el Corazón de Dios sea amado en todas partes.  Y es le resultado de nuestra acogida y respuesta a la invitación de nuestro Padre Fundador, de hacer amar universalmente el Corazón de Dios; herido por la lanza y fuente de todo amor, que nos reúne aquí hoy día; de todos los rincones de la tierra; de todos los Continentes; culturas; pueblos; idiomas y naciones en una familia; la Familia del Padre Chevalier.

Quisiera establecer el contexto de la intervención al señalar los principios que nos van a guiar; el compartir de experiencias de nuestra Espiritualidad testimoniada en la vida diaria en África.  Debemos indicar los límites dentro de los cuales se realiza la misión de los MSC y al mismo tiempo ofrecer la dirección y las tareas que nos presenta la Espiritualidad para poder asumir los retos más grandes que se nos presentan en África.  En nuestra presentación estamos grandemente influenciadas por la reflexión del Profesor Ka Mana; un pastor luterano del Congo.  Él es un teólogo que ha demostrado que está abierto y muy consciente de la Evangelización en África, de las crisis de África y de los asuntos éticos y espirituales de África.  Su influencia sobre esta presentación es tan grande que no parece necesario indicar citas separadas de sus escritos.

 

1.  MSC en AFRICA

Nuestro Continente Africano que es la cuna de la humanidad, esta habitado por miles de millones de personas entre negros; blancos y mestizos, divididos en 12 pueblos grandes, 53 países con grupos étnicos 10 veces más, hablando mas o menos 2000 idiomas y practicando muchas religiones diferentes: 1

Como podemos entender a África con su espacio geográfico inmenso, con tal variedad de situaciones socio- políticos; económicos y culturales, lo cual va a significar siempre un gran reto para la familia Chevalier; dondequiera se encuentre en este Continente.

No importa si alguien viene de Camerún ( los MSC llegaron en 1981) Senegal (los MSC llegaron en 1953); de la Republica Democrática del Congo (los MSC llegaron en 1924) o de África del Sur (los MSC llegaron en 1950) o de Namibia, uno siempre queda impresionado por las diferencias (en el desarrollo económico; estructuras sociales fundamentales; costumbres y mentalidades) como también por las semejanzas (sobrevivencia de creencias tradicionales; valores familiares; costumbres; pobreza económica en la gran mayoría de la población junto a una minoría de la élite rica); como también por muchas situaciones complejas debido a una variedad de factores históricos:

Si alguien comienza a hablar de África se verá confrontado por dos mentalidades: los Afro-pesimistas y los Afro-optimistas:  Nosotros queremos ubicarnos en el campo de los realistas; ya que por medio de esta presentación queremos señalar signos de esperanza frente a un África hundido en un pantano de noticias malas: hambre, guerras civiles, pobreza, corrupción en esferas altas, enfermedades y de manera especial el SIDA, lo cual puede oscurecer el hecho de que existen otras enfermedades que son igualmente peligrosas como la malaria que mata cada día gran cantidad de gente.

El Papa Juan Pablo afirma en su Exhortación Apostólica a la Iglesia de África « En un mundo controlado por naciones poderosas y ricas; África ha llegado a ser un apéndice sin importancia; ya que muchas veces es olvidado y descuidado por todos»

Es importante que construyamos un África digna de Dios, es decir; una sociedad de amor y de solidaridad.  Esto seria la meta de nuestra reflexión acerca de la vivencia de la Espiritualidad del Corazón en África.  El símbolo del corazón es muy importante en África y manifiesta tanto el lugar donde podemos construir constructivamente o negativamente, como también el lugar donde podemos esconder cualquier cosa.  El corazón por eso puede llegar a ser un «gran recipiente que retiene todo».  Hay un proverbio congolés «Botema, Sanduku» el Corazón es un vaso grande que retiene, protege y esconde mucho»  Pero llenado con el amor de Cristo, este corazón llega a ser el lugar de todas las fuerzas positivas que podemos usar y que pueden saturar la sociedad africana: 

El teólogo luterano, congolés; profesor Ka Mana; expresa mejor en que consiste el reto para los africanos cuando dice.

«En el contexto actual; donde el problema de África ha llegado a ser un problema mundial; es tiempo de que los problemas del mundo lleguen a ser los de África; que ellos exijan a nuestra gente, participar en la búsqueda rigurosa y determinante de una solución adecuada:  No podemos seguir viviendo como si el destino del mundo se debería determinar lejos de nosotros y contra nosotros.  No tenemos el derecho de creer que nuestro destino debe encajar en la dirección y las decisiones de afuera sin que nosotros tengamos la oportunidad de utilizar nuestra fuerza de reflexión, de imaginación y de creatividad, para encontrar con toda la humanidad caminos de salida de nuestras crisis;  Tomemos conciencia de estos dramas y confusiones pero también de la esperanza que contienen. 2

Nuestro Fundador desea que el Corazón de Dios sea amado en todas partes y para sus hijos espirituales desea que las Palabras de Juan resuenen en cada momento de su vida «hemos conocido el amor que Dios tiene para con nosotros y hemos creído en este amor»; ¿Cómo podemos ser Misioneros del Corazón de Dios en los países del África?  ¿Cómo testimoniar el amor de Dios en un mundo confrontado con tantos desafíos?  ¿Cómo continuar creyendo contra toda esperanza y ofrecer una respuesta, aunque sea mínima allí donde falta el amor?  ¿Hasta qué medida sigue la intuición original del Padre Chevalier todavía relevante en el África de hoy?  Un lugar en el cual las riquezas profundas del Evangelio deben ser examinadas a la luz de las cuestiones éticas, espirituales, sociales, políticas y económicas que deben confrontan nuestros países hoy en día ?

Nos queda por contestar a dos preguntas fundamentales

= ¿Necesita África una Espiritualidad del Corazón para alcanza una orientación global?

+ ¿Cómo deberíamos nosotros, los Misioneros del Sagrado Corazón realizar nuestra misión de tal manera que quede en armonía con el proyecto del fundador, que consiste en dar a conocer el Sagrado Corazón en todas partes?

No importa si son las luchas por la democracia; las guerras y violencias sociales; la ubicación geográfica estratégica de algunos países o los grandes tumultos económicos y financieros; o si se trata del caos espiritual de individuos; o de la agonía de pueblos enteros; no son todos ellos áreas en los cuales los MSC en África deben sentir los retos del futuro en cuanto a sus convicciones y su fe?

 

2.  La dimensión teórica de la Espiritualidad del Corazón:   

En todos nuestros esfuerzos por proveer una mejor inculturación de nuestra Espiritualidad MSC en África; siempre debemos partir de la inspiración original del Padre Chevalier y su relevancia con la meta de renovar la sociedad de África.

Cuskelly ha definido la espiritualidad como una expresión inmediata y concreta de una visión; de una mirada desde un ángulo particular a Jesús en los Evangelios.  El obispo Cuskelly parece ser para nosotros el co-hermano que ha logrado captar la dimensión más importante de nuestra Espiritualidad:

El elemento mas fundamental de nuestro carisma es el reconocimiento del amor de Dios para con nosotros y la fe que tengamos en este amor:  '( 1 Jn. 4;16)  Creer en este amor es un acto  auténtico de adoración.  Nuestra espiritualidad ha sido engendrada por una caridad y sencillez grandes; inspirado en el amor que el Corazón de Dios tiene para la humanidad:

Hay una apertura maravillosa en cuanto la manera como expresamos nuestra espiritualidad: para unos consiste en la devoción especial a Nuestra Señora del Sagrado Corazón; para otros puede ser la devoción al Santísimo Sacramento, para otros puede implicar un compromiso sincero con acciones sociales.  Muchas veces tengo que sonreír cuando me encuentro con candidatos MSC  en Kinshasa.  La primera pregunta que me dirigen es: "Padre, ¿cuál es su espiritualidad?" La expectativa de estos jóvenes, como he descubierto recién más tarde, consiste fundamentalmente en conocer que es lo que hacemos; cual es nuestro trabajo.  Algunos de ellos se sienten un poco desilusionados al comienzo; porque los Jesuitas se dedican a la enseñanza; los Padres Sceudistas son exclusivamente misioneros; los Misioneros de San Pablo especializados en publicaciones etc. Yo les ayudo a comprender que nuestro carisma y nuestra espiritualidad están abiertos a un mundo más grande; que se fundamenta en el amor y que nosotros estamos disponibles para cualquier apostolado que responda a las necesidades de la Iglesia local y de la misión.  De esta manera son capaces de comprender mejor, que cuando hablamos de nuestra espiritualidad, no estamos hablando en primer lugar de cosas por hacer, sino de un espíritu para vivir: es decir, el amor que Dios tiene para con la humanidad y que gracias a este amor vivimos la opción preferencial por los pobres.

El Padre Chevalier tenía una visión amplia y profunda de su misión: renovar completamente la sociedad por medio de la Devoción al Sagrado Corazón.  Y el Padre Henry Ramier, quien le ayudaba en los comienzos; insistía en el hecho de que las prácticas devocionales solas no eran suficientes.  Es necesario que la devoción al Sagrado Corazón penetre profundamente en la almas de las personas e impulse a la persona a modelar su ser según el divino corazón y de esta manera llegar a ser un instrumento dócil, que permita a Dios realizar sus planes amorosos: 3

Nuestra misión de Misioneros del Sagrado Corazón consiste en desarrollar plenamente la grandeza; la nobleza y la dignidad de la humanidad dondequiera que estemos.  Siempre debe haber la voz de un MSC recordando a la humanidad su dignidad; diciendo a las personas que son seres humanos y deben permanecer humanos durante las generaciones.  Esto es una manera de manifestar el mensaje de Lumen Gentium, que es el mismo mensaje de Cristo, que debemos ser santos como nuestro Padre del cielo es santo y por medio de esta transformación dar fruto: 

" Por medio de las diferentes formas de vida y tareas de la gente; impulsados por el Espíritu de Dios; cultivar la santidad única al obedecer la voz del Padre y adorando a Dios en Espíritu y en Verdad, en seguir adelante en el seguimiento de Cristo pobre y humilde y cargando su cruz para merecer la participación en su gloria.  Cada uno sin embargo de acuerdo a sus propios dones y deberes debe avanzar con firmeza por el camino de una fe viva; que hace brotar la esperanza y obra por medio del amor: 4”

 

3.  Las Tareas esenciales de la Espiritualidad del Corazón en África de habla francesa 

La primera cosa para señalar consiste en tener que conocer a fondo la tradición africana.  Debemos inventarla de nuevo al desprendernos de costumbres arcaicas y de cargas innecesarias para recuperar la riqueza verdadera de nuestra manera de pensar; de nuestra manera de ser y de vivir.  Debemos abandonar el mundo de lo folklórico y del querer imponer una versión idealizada de África para poder captar la única cosa que cuenta: la sustancia ética y espiritual de la humanidad africana. 5

Una de las tareas urgentes es la formación de la persona africana para poder reconstruir este mundo.  De acuerdo a la sabiduría de nuestros antecesores y de su visión de este mundo; la tarea de modelar de nuevo a la persona humana debe hacerse como respuesta a una llamada profunda desde adentro: frente a la voz principal que es la fuente de la existencia; que nos abre al misterio de la vida, a la conexión profunda con lo humano; con lo divino; con lo invisible; con la sociedad; con la naturaleza; con el presente; con el pasado y con el futuro.  Y como el escritor de Guinea, Camara Laye dice:  "El Africano es excepcionalmente abierto a la llamada desde la profundidad. Es muy sensible al contacto con la naturaleza y con las personas; muy sensible frente a las obras de arte; a las mascaras y los disfraces..."

Sin descuidar esta llamada desde adentro o de la conexión profunda entre lo humano y lo divino en África, me parece muy importante en nuestro tiempo actual, que una Espiritualidad del Corazón solamente va a encontrar su sentido más profundo, cuando los misioneros, testigos del Corazón de Dios, tomen conciencia de las preocupaciones fundamentales de aquellos a quienes buscan  evangelizar.

 

Una Espiritualidad debe responder a las necesidades siguientes:   

*  penetrar profundamente en el África de la desesperación con sus crisis, para que pueda surgir un África de esperanza, uno que se va construyendo por medio de la lucha contra las causas del mal y de los mecanismos que lo alimentan; 

* ser agentes de transformación de los comportamientos y de mentalidades.  La tarea que se le pone delante debe ser una reconstrucción, un renacimiento y la creación de un África con un destino totalmente nuevo;6

*  invitar a África a levantarse y asumir la responsabilidad para su futuro

*  ayudar a África a descubrir una visión más clara: la cual debe indicar claramente que el camino desde la desesperanza hacia la esperanza se realizará únicamente por medio de la educación y de actitudes que nos impidan de menos valorarnos, que nos ayuden a vernos a nosotros mismos tales como somos y que nos previenen de cultivar ilusiones falsas;

*  promover un regreso a las fuentes auténticas de nuestra espiritualidad, donde descubriremos el plan original de nuestro Fundador.  Este plan no consiste simplemente en una teoría sino en la invitación de descubrir la persona concreta de Jesucristo con su mensaje y su ejemplo, que ha tocado el corazón del mismo fundador, y el cual debemos realizar nosotros hoy en día en las muchas situaciones diferentes de África.

* fomentar una espiritualidad que penetre todas nuestras acciones y de manera especial nuestra relación interior con Jesucristo, de tal manera que llegue a ser una fuerza integral para la gente que encontramos y para nuestros esfuerzos de amarlos; de ayudarles y de levantarlos.  En realidad, la misión que nuestro Fundador nos ha dejado no es otra cosa que ayudar a la sociedad a comprender que el centro de todo es el Corazón de Cristo quien revitaliza, renueva y unifica todas las cosas.

* ayudar a los testigos del Corazón de Dios a comprender que sin esta visión central es imposible presentar a África y al mundo una Espiritualidad del Corazón.  Lo que es necesario es el re-encender el entusiasmo en la verdad fundamental de Jesucristo. 

* buscar en nuestra contemplación del Corazón de Jesucristo lo que ha sido expresado por San Ignacio de Loyola " un conocimiento interior del Señor; quien para mi se ha hecho hombre; para que yo pueda amarle mas y seguirle " 7

 

Palabra Final

Como conclusión de esta presentación quisiéramos invitar a los participantes del Congreso a entrar mas profundamente en la Espiritualidad MSC por medio de una lectura personal de la misión de Jesucristo, para descubrir la riqueza contenida en el Corazón de Cristo; no podemos hablar de una misión cristiana si no está inspirada en Cristo y en un carisma especial.  Para los Misioneros del Corazón de Dios es una responsabilidad pesada pero noble de dar testimonio de este amor revelado en el Corazón de Cristo.  Nuestras Constituciones nos recuerdan que nuestra Espiritualidad debe hacer crecer nuestro amor por la justicia y la paz; que estemos dispuestos a defender a los oprimidos; los pequeños y los pobres, aunque estos compromisos puedan costarnos la vida.

Nuestra Espiritualidad es muy rica y esta riqueza ha florecido gracias a las investigaciones crecientes por parte de hombres y de mujeres de todas partes del mundo en su esfuerzo de sondear la profundidad del carisma de nuestro Fundador para que pueda manifestarse por medio de la espiritualidad.  Estamos admirados de que en Congo-Kinshasa; en Camerún y en Senegal, laicos; hombres y mujeres, se reúnen tantas veces para reflexionar sobre diferentes aspectos de la vida de nuestro fundador.  También vemos un pedido creciente por conocer esta Espiritualidad en varios diócesis en que trabajamos.  También en el país grande Congo-Kinshasa; solamente la diócesis de Kinshasa tiene mas de 100 miembros de la Fraternidad de Nuestra Señora del Sagrado Corazón; quienes son muy comprometidos y decididos de vivir la Espiritualidad y el carisma de nuestro Fundador.

Un reto permanente para todos nosotros; miembros de la Familia Chevalier, es la necesidad de una profunda Evangelización.  Que la memoria de nuestro Fundador revitalice todas las actividades y que su intuición y obra, inspiradas por Dios, den fruto en la Iglesia de Cristo y en la Sociedad.  Que santa Maria Virgen, Nuestra Señora del Sagrado Corazón y San José; su esposo celestial nos ayuden por su intercesión de ser imitadores dignos de su Hijo Divino.