LA ESPIRITUALIDAD DEL CORAZÓN SEGÚN EL CARISMA DEL P. JULIO CHEVALIER MSC: Una Misión Universal
SECCIÓN 15
UNA MISIÓN UNIVERSAL
"Una misión universal" es otro elemento esencial del carisma de Chevalier.
"¡Que el Sagrado Corazón de Jesús sea amado en todas partes!" Por este
motivo, cuando en la Familia Chevalier hablamos de una misión universal, no
nos referimos a la presencia de la Familia Chevalier en los cinco
continentes, sino a la tarea de participar en la misión de Jesucristo en
todos sus aspectos. El Padre ha enviado a Jesucristo para que realice su
misión en todo el mundo, en todos los niveles de la sociedad, en todas las
dimensiones de la vida social, y en todos los rincones del corazón humano.
En este sentido, nos referimos a una misión sin límites.
Este concepto amplio de la misión explica el interés de Chevalier en la
disponibilidad de los miembros de su familia espiritual para encargarse de
ministerios y servicios de cualquier índole y desempeñar cualquier misión en
cualquier parte del mundo. Su sueño de una misión sin límites constituye
otro motivo debido al cual deseaba incorporar a tantos laicos como fuera
posible en su proyecto misionero. Como se ha afirmado anteriormente, a
través de su vida familiar y su profesión secular, los laicos darán fe del
amor de Cristo en cualquier parte, incluso en aquellos lugares y situaciones
en que no estén presentes ni sacerdotes ni religiosos.
Chevalier deseaba que la presencia de sus hijos e hijas espirituales en la
Iglesia y la Sociedad marcase realmente una diferencia. Incluso viviendo en
las mismas condiciones que otras personas o prestando los mismos servicios
que otros religiosos y laicos o, en el caso de los sacerdotes, encargándose
de los mismos ministerios, la particularidad de su presencia y su obra
justificarían su nombre de misioneros del Sagrado Corazón. La preocupación
de Jesús y su misericordia hacia la humanidad estarían presentes en su modo
de vida y trabajo. Era consciente que tal transformación mediante esta
misión especial resultaría una ardua tarea y precisaría de una preparación
adecuada, Chevalier deseaba que su familia religiosa, laicos incluidos,
poseyera una formación idónea para vivir y divulgar la Devoción del Sagrado
Corazón en el amplio sentido que él le daba.
Momento de reflexión
"Los laicos han de poner en práctica una forma muy especial de
evangelización. Su propio campo de actividad evangelizadora engloba los
extensos y complicados campos de la política, la sociedad y la economía,
pero también el mundo de la cultura, las ciencias y las artes, la vida
internacional ,así como los medios de comunicación. Incluye además otras
realidades abiertas a la evangelización, como el amor humano, la familia, la
educación de niños y adolescentes, el trabajo profesional, el sufrimiento.
No podemos olvidarnos de la acción evangelizadora de la familia en el
apostolado evangelizador de los laicos."
(Papa Pablo VI, Evangelii Nuntiandi, Proclamar el Evangelio, nº 70-71)