LA ESPIRITUALIDAD DEL CORAZÓN SEGÚN EL CARISMA DEL P. JULIO CHEVALIER MSC: Una Misión con Nuestra Señora del Sagrado Corazón de Jesús
Sección 16
UNA MISIÓN CON NUESTRA SEÑORA DEL SAGRADO CORAZÓN
¿Qué pretendía el P. Chevalier al divulgar la Devoción a Nuestra Señora del
Sagrado Corazón? El P. Chevalier concebía esta devoción principalmente como
un medio muy poderoso para atraer a la gente hacia la Devoción al Sagrado
Corazón. Divulgar la Devoción al Sagrado Corazón constituyó el objetivo
principal de la vida y la obra de Chevalier. Deseaba impulsar la Devoción al
Sagrado Corazón en todas partes sin escatimar medios, ya que la consideraba
el remedio a todos los males de nuestro tiempo. Con esa finalidad en mente,
fundó los Misioneros del Sagrado Corazón, la Asociación de Sacerdotes
diocesanos del Sagrado Corazón, la Tercera Orden de laicos, las Hijas de
Nuestra Señora del Sagrado Corazón y, posteriormente, junto con el P. Hubert
Linckens, las Hermanas Misioneras del Sagrado Corazón. Con la misma
intención, comenzó a divulgar la Devoción a Nuestra Señora del Sagrado
Corazón.
Tan solo una devoción era esencial para el P. Chevalier, la Devoción al
Sagrado Corazón de Jesús. Sin embargo, para él la Virgen María era
inseparable del Sagrado Corazón de su Hijo. Solía decir "Todas las
bendiciones provienen del Sagrado Corazón a través de Nuestra Señora." Según
la visión de Chevalier, también ahora en el cielo Jesucristo Resucitado
actúa bajo la intercesión de María y Ella nos conduce al Corazón de su Hijo.
Para Chevalier, Nuestra Señora fue la primera Misionera del amor del Sagrado
Corazón. Se unió por completo a la misión de su Hijo para lograr la
regeneración o la renovación de la humanidad. De ese modo, la Devoción a
Nuestra Señora del Sagrado Corazón se convirtió en un elemento esencial de
la Devoción al Sagrado Corazón. Se trata de una fuerte característica del
carisma del P. Chevalier.
Las tres estatuas que representan a Nuestra Señora del Sagrado Corazón
expresan claramente la intención del P. Chevalier de incluir a María en el
proyecto de divulgación de la Devoción al Sagrado Corazón: Jesús con doce
años, delante de María, su madre; el Niño Jesús en brazos de María, y Jesús
en la cruz acompañado por su madre. En cada una de las tres estatuas María
atrae nuestra atención hacia su hijo Jesús, señalando su Corazón.
Momento de reflexión
"Por favor, contemplad por un momento las tres diferentes imágenes que
representan hoy a Nuestra Señora del Sagrado Corazón. Cada imagen, a su
modo, muestra la relación íntima entre Nuestra Señora y su hijo Jesús.
Nuestra Señora mira a Jesús y atrae nuestra atención hacia Él a la vez que
Jesús nos enseña su Corazón"
La primera imagen, diseñada por el P. Chevalier, nos muestra a María
contemplando a Jesús, un muchacho de doce años, de pie delante de María,
señalando su corazón y a su madre. En algunos sitios, ciertas imágenes
representaron el diseño inicial del P. Chevalier de forma distorsionada,
mostrando no a un Jesús de doce años, sino a un niño pequeño sentado a los
pies de su madre. Por consiguiente, el Vaticano le pidió al P. Chevalier que
diseñara una segunda imagen. No obstante, la escultura original de Issoudun,
coronada en nombre del Papa, se pudo mantener como era.
La segunda imagen, diseñada igualmente por el P. Chevalier, expresa la
íntima relación entre María y su hijo Jesús, que de nuevo señala su corazón
y a su madre.
La tercera imagen recibe el nombre de "el Calvario de Issoudun", y se diseñó después del Concilio Vaticano II. Nos muestra a Jesús colgado de la cruz, con el corazón traspasado, mientras Nuestra Señora, cerca de la cruz, nos invita a "contemplar al que traspasaron".