La Familia Cristiana (documento extenso)
La Familia Cristiana
A la luz de la Revelación,
de la Tradición y del Magisterio
Marío Pezzi - La
Pizarra 2007
(bajar
a su computadora)
INTRODUCCIÓN
Este año, marcado por el acontecimiento del Family Day del pasado 12 de mayo, al que las familias del Camino Neocatecumenal han dado una significativa aportación, retomamos el tema de la Familia Cristiana a la luz de la Revelación y del Magisterio de la Iglesia.
En los años pasados más veces hemos tratado el tema de la Familia. Después de la catequesis sobre la Humanae Vitae en 1984, en 1994 con motivo de la "Carta a las Familias" del Papa Juan Pablo II,también en referencia a la Exhortación Apostólica "Familiaris Consortio" de 1981, después en 1995 sobre la Mujer con motivo de la "Mulieris Dignitatem" siempre de Juan Pablo II. En 1997 hemos tratado de la educación sexual: "Amor y sexualidad" como subsidio sobre todo para los padres en la educación sexual de los hijos, en 2001 la primera catequesis sobre la "Teología del cuerpo", el precioso tesoro que nos ha legado el Papa Juan Pablo II'expuesto durante cinco años en las audiencias de los miércoles, en 2003 hemos hablado de la "Transmisión de la fe a los hijos", y finalmente. En 2005, hemos retomado y desarrollado ulteriormente "La belleza de la Teología del cuerpo" en Juan Pablo II.
Hago presentes estas diversas intervenciones para subrayar la atención y la preocupación de la Iglesia como también de los iniciadores del Camino Neocatecumenal, Kiko y Carmen, hacia la familia que constituye el núcleo central de la Iglesia y al mismo tiempo la realidad más atacada por el mundo contemporáneo.
Las catequesis sobre el Matrimonio y la Familia (la sexualidad, la teología del cuerpo, elmatrimonio, la transmisión de la fe a los hijos) y en este contexto también el amor a la vida desde la concepción hasta la muerte, en la catequesis sobre la Encíclica "Evangelium Vitae" de 1998 y el "Valor salvífico del sufrimiento" "Salvifici Doloris" — enfermedad, vejez y muerte — en 2006, han tocado sólo algunos aspectos de realidades muy complejas, siempre a la luz de la Revelación, de la Tradición y del Magisterio de la Iglesia.
Este años consideraremos otros aspectos que junto a los que ya se han tratado en los años pasadosnos ayuden a progresar en la comprensión del Misterio de la persona, del matrimonio y de lafamilia a la luz de Dios.
Al igual que en años anteriores afirmo el limite de esta investigación y exposición, sobre todo por falta de tiempo y por la complejidad de los argumentos; no pretendo hacer una disertación exhaustiva sino proponer solamente algunas consideraciones para ulteriores profundizaciones. Todo el que quiera una mayor profundización podrá emplear además que el presente escrito también la bibliografía indicada. Confío en que la Sagrada Familia de Nazaret, a la que he pedido ayuda para esta catequesis, y el Espíritu Santo al cual he invocado y en quien me he confiado, me guíe en la formulación y en la exposición y ayude a todos vosotros en la recepción de algunos aspectos a la luz radiante de la Revelación, de la Tradición y del Magisterio.
Al fin de facilitar la exposición en una Primera parte, después de haber retomado brevementealgunos aspectos que ya hemos presentado, expondré sintéticamente la historia de los principaleseventos e ideologías recientes que han concurrido a desestabilizar la familia cristiana en nuestros días.
En una Segunda parte expondré lo que la Iglesia, sobre todo en el ministerio de los sucesores dePedro, ha hecho para contrarrestar esta destrucción de la familia y para afirmar los contenidos imperecederos de la Revelación respecto a la persona, a la sexualidad, al matrimonio, a la familia.
En una Tercera parte expondré algunas de las más recientes profundizaciones sobre laantropología cristiana en referencia al matrimonio y a la familia en las enseñanzas del Papa Juan Pablo II y del Papa Benedicto XVI.
1
Los textos de estas Catequesis están siempre disponibles para
los hermanos que así lo deseen pidiéndolos al Centro
Neocatecumenal de Madrid.
Catequesis sobre la familia 2007
PRIMERA PARTE
Los primeros ataques al matrimonio y a la familia
Antes que nada retomo brevemente algunos eventos, ya expuestos en la Catequesis sobre la"Teología del cuerpo" en el 2005.
Durante siglos la tradición judeo-cristiana ha transmitido la luz de la Revelación sobre el cuerpo:la sexualidad – el matrimonio – la familia. Como veremos el ataque más radical al matrimonio ya la familia deriva del pecado (prostitución – adulterio – impureza según habla S. Pablo apropósito de las obras de la carnet). Pero mientras antes al pecado se le llamaba pecado, desde hace algún siglo lo que era considerado pecado ha adquirido derecho de ciudadanía y entrado en las leyes de muchos Estados (prostitución – adulterio – pornografía – aborto...). Como afirmó con fuerza el Papa Juan Pablo II en 1982 en Fátima:
"En realidad la salvación eterna del hombre está sólo en Dios. El rechazo de Dios por parte delhombre, si llega a ser definitivo, guía lógicamente al rechazo del hombre por parte de Dios (Cf.Mt. 7, 23; 10, 33), la condenación.
El pecado ha ganado un tan fuerte derecho de ciudadanía en el mundo y la negación de Dios seha difundido tan ampliamente en las ideologías, en las concepciones y en los programas humanos...Pero ningún pecado del mundo podrá superar jamás el Amor de Dios".
¿Cómo se ha llegado a conseguir "derecho de ciudadanía" a todo lo que amenaza e intenta destruirla visión judeo-cristiana de la sexualidad – del matrimonio – de la familia?
El Luteranismo, el Iluminismo, la revolución francesa
Entre las causas principales vamos a recordar someramente algunas, según las describe RamónGarcía de Haro en su libro "Matrimonio y familia en los documentos del Magisterio"3:
El primer ataque serio al matrimonio cristiano vino con el Luteranismo, que lo negó comoSacramento, abriendo así la puerta a las sucesivas desviaciones del secularismo.
La llamada "Escuela del Derecho natural" y los filósofos de la Revolución francesa promuevendecididamente el desarrollo del proceso de secularización. El Pensamiento Laicista difundido con la Revolución francesa, no se limita a negar la potestad de la Iglesia sobre el matrimonio, sino quepropone una nueva moral matrimonial, afirmando la existencia de un derecho natural válido etsi Deus non daretur. Derecho que encontraría su fundamento en el hombre, así como la razónpuede conocerlo prescindiendo de Dios y de la Revelación.
La progresiva expansión de tales ideas llevará a la instauración del "matrimonio civil" en muchosestados de mayoría católica. En los dos decenios conclusivos del s. XVIII, comenzando porFrancia, diversos Países Occidentales configuran el matrimonio civil como válido para loscatólicos y también como el único válido; al mismo tiempo, habitualmente, admiten el divorcio.
¿Influencia de la Masonería?
Las razones anticristianas de la revolución francesa y de Napoleón son recogidas, en Italia, por laCarbonería. Los intentos de la Alta Ventas, es decir de la dirección estratégica de la revolución enaquel período, están enunciados claramente en un documento conocido como Instrucciónpermanente, redactado en 1819. La carbonería se prefija una "regeneración universal",inconciliable con la supervivencia del cristianismo:
2 Cf. Gal. 5, 19-21; Rom. I, 20-32.
3 Ramón García de Haro, Matrimonio y famiglia nei documenta del Magisterio, Ed. Ares, Milán 2000, pp 565s. I Papi e la Massonería, Angela Pellicciari, Ed. Ares, Milán 2007.
4 Dentro del carbonarismo no se habla de logia sino de venta.
"Nuestro objetivo final —escribe la Instrucción— es el de Voltaire y de la revolución francesa: es decirla aniquilación completa del catolicismo y hasta de la idea cristiana"6.
"Han sido individuadas en la secta de los Masones unas personas que declaran y proponen usartodo tipo de artimaña y artificio para satisfacer la multitud de desenfrenada licencia; hecho esto,ellas la habrían después subyugada a su propio poder arbitrario, y haberla fácilmente inclinada a la escucha": así escribe León XIII el 20 de Abril de 1884 en "Humanum genus", la encíclica quecon más precisión filosófica analiza los presupuestos, la naturaleza y el obrar de la masonería'.
"En los mismos años los carboneros de la Alta Venta, detrás de contraseñas bastante compartidas, oambiguas, predicaban el "la sepultura de la iglesia" a través de la corrupción de los jóvenes:"Haced unos corazones viciosos y ya no tendréis católicos... Id derechos a la juventud, y, si esposible, también a la infancia"8.
La "revolución industrial"
La gran "revolución industrial", al final del 800 y comienzo del 900, provocada por el progreso de la ciencia y de la técnica, marca el paso, a menudo dramático, de una civilización y economía detipo rural, a una economía industrial y a una civilización de tipo urbano. Consecuentementetambién la familia va pasando progresivamente de la familia de tipo patriarcal a la familiamolecular, constituida a menudo por la sola pareja con pocos hijos, desarraigada del propioambiente rural y proyectada en el anonimato de las ciudades (urbanización).
La primera oleada de industrialización, que se desarrolló primeramente en Inglaterra, estabamarcada por un "liberalismo salvaje", por o que aquellos que poseían los capitales sacaban cadavez más mayor provecho explotando el trabajo de una masa obrera, constreñida a menudo a unritmo de trabajo equiparado a la esclavitud"9.
En este ambiente se difunde la interpretación marxista de la lucha de clase: el proletariadocontra los patrones burgueses. Esta lectura en clave de conflicto entre proletariado y patrones seextenderá poco a la relación entre mujer y varón, entre autoridad e hijos (crisis de autoridaddel padre) y alumnos (maestro y alumno), y ciudadanos.
El Papa León XIII en la Encíclica "Rerum Novarum" muestra la falsedad de esta lecturaconflictiva10 que será causa de graves desastres (revoluciones, guerras) de la que aún hoy vivimoslas consecuencias, y muestra como en el plan de Dios las desigualdades no están puestas en vista de conflictos, sino al contrario en vista de la complementariedad, del amor, por lo que cada unotiene necesidad del otro.
Otras formas de desestructuración de la familia cristiana en los tiempos modernos
6 Cfr. J. Crétineau-Joly, L'Eglise Romaine en Pace de la revolution, París 1861, II, p.73. Los documentos históricos franceses divulgados están publicados y señalados en Civiltá Cattolica a partir de 1874.
Angela Pelliciari, L'attaco masónico alla fa miglia durante l'Ottocento (Timone: junio 2007).
8 Francesco Agnoli, Ji Foglio, 3 mayo 2007.
9 José Miguel Ibáñez Langlois, La Dottrina sociale Della Chiesa, Ed. Ares, 1989, Milán, pag. 249.
10 "Establézcase, por tanto, en primer lugar, este principio...: que no se puede igualar en la sociedad civil lo alto con lo bajo. Los socialistas lo pretenden, es verdad, pero todo es vana tentativa contra la naturaleza de las cosas. Y hay por naturaleza entre los hombres muchas y grandes diferencias; no son iguales los talentos de todos, no la habilidad, ni la salud, ni lo son las fuerzas; y de la inevitable diferencia de estas cosas brota espontáneamente la diferencia de fortuna. Todo esto en correlación perfecta con los usos y necesidades tanto de los particulares cuanto de la comunidad, pues que la vida en común precisa de aptitudes varias, de oficios diversos, al desempeño de los cuales se sienten impelidos los hombres, más que nada, por la diferente posición social de cada uno" (RN n.13)
"Es mal capital, en la cuestión que estamos tratando, suponer que una clase social sea espontáneamente enemiga de la otra, como si la naturaleza hubiera dispuesto a los ricos y a los pobres para combatirse mutuamente en un perpetuo duelo. Es esto tan ajeno a la razón y a la verdad, que, por el contrario, es lo más cierto que como en el cuerpo se ensamblan entre sí miembros diversos, de donde surge aquella proporcionada disposición que justamente podríase llamar armonía, así ha dispuesto la naturaleza que, en la sociedad humana, dichas clases gemelas concuerdenarmónicamente y se ajusten para lograr el equilibrio. Ambas se necesitan en absoluto: ni el capital puede subsistir sin el trabajo, ni el trabajo sin el capital.El acuerdo engendra la belleza y el orden de las cosas; por el contrario, de la persistencia de la lucha tiene que derivarse necesariamente la confusión juntamente con un bárbaro salvajismo. Ahora bien: para acabar con la lucha y cortar hasta sus mismas raíces, es admirable y varia la fuerza de las doctrinas cristianas" (RN nn.14-15).
Además de los ataques al matrimonio y a la familia arriba mencionados, recordemos otras formas de desestructuración de la familia cristiana en los tiempos modernos: el siguiente análisis está sacado de un opúsculo redactado por "Objetivo Chaire", un equipo multidisciplinar formado porprofesionales del campo psicológico, médico, filosófico, pedagógico y sacerdotes. La ópticaadoptada es la del Magisterio de la Iglesia en la unidad que funda cuerpo, psique y espíritu".
El movimiento feminista
Según este pensamiento en las raíces de la subordinación de la mujer no está la explotacióneconómica o la exclusión de los derechos civiles, sino la subordinación sexual y reproductiva, esdecir, la traducción de la diferencia sexual y reproductiva
La propuesta del feminismo radical es romper la servidumbre sexual de las mujeres coninstrumentos diversos que van desde el incremento del uso de los medios de contracepción a lalegalización del aborto asistido, al rechazo de la heterosexualidad como forma única de relaciónsexual normal, no desviadora.
El movimiento Gay
Una diferencia fundamental entre el homosexual y el gay, entre el que es portador de unaincomodidad y quien por el contrario hace de eso una "bandera" que hay que reivindicar,consiste en el llamado outing o coming-out, en el «salir fuera» para ser reconocidos como talesfrente a la sociedad (sábado 28 de Junio de 1969, en Nueva York). El 8 de Febrero de 1994 elParlamento Europeo vota con mayoría una deliberación que invita a cada Estado a cancelar todaforma de discriminación para los gays y las lesbianas. En algunos Países europeos, la uniónhomosexual es equiparada al matrimonio y a la familia, en algunos casos también con elderecho de adoptar a niños.
El control de la natalidad y la cuestión de los "géneros"
Es conocida por todos la campaña Nelson Rockefeller, promovida desde los años 60, de laplanificación familiar ("Family Planning"), sostenida por organismos de la ONU para contener elcrecimiento demográfico sobre todo de los países más pobres o en vías de desarrollo, queamenazaría el bienestar y el progreso de los países más ricos e industrializados. Fruto de estaacción de "esterilización" a veces masiva, y de la campaña para la limitación de los nacimientos(incremento de publicaciones eróticas a través de revistas, TV, Internet, turismo sexual, pedofilia,etc...) ha sido la disputa sobre los "géneros", hasta el momento considerados dos: masculino yfemenino.
En los últimos encuentros Mundiales sobre la Mujer en El Cairo (1994) y en Pekín (1995), se hapuesto en discusión la tradicional distinción del género: hombre o mujer. Se quiere que seanaceptados como jurídicamente reconocidos cinco géneros: hombre, mujer, homosexual, lesbiana,heterosexual. Señalo en la siguiente nota lo que escribe a propósito Mons. Angelo Scola, actualPatriarca de Venecia en un libro suyo12.
Familia y Familias: nuevos tipos de familias
Hoy se habla cada vez más de distintos tipos de familias, es un signo de la modernidad. Latradicional familia monogámica, es cada vez más presentada como si estuviese en vías de
11 Objetivo Chaire, "ABC per capire l'omosessualitá", Et. Sant Paolo 2005 (Pequeño librito de 64 páginas, simple, claro, científico, recomendable para jóvenes y padres para contrarrestar el actual bombardeo mediático contra la sexualidad, el matrimonio y la familia cristiana.
12 "El universalismo científico y el politeísmo neo-pagano explican la extrema facilidad con que una cultura and rógena se va difundiendo cada vez más. Para esta cultura la diferencia sexual no es, como afirma la psicología profunda, insuperable e indeducible. Al contrario, llegará (y no demasiado tarde) el día en que cada hombre podrá elegir a placer el propio sexo o cambiarse en el arco de la misma existencia, de uno a otro sexo. Por otra parte, su cuerpo, se reduce a una pura máquina para tener acceso al fuego del placer. Sobretodo la mujer, en su ser símbolo eminente del Otro, es abolida. La inclinación... se trata como una enfermedad mortal de la que no nos podemos defender. El resultado es una reconstrucción radical de la esferadel amor y una alteración del misterio nupcial" (Angelo Scola, Uomo e donna oggi, en Renzo Bobetti (ed.), La reciprocitá como; donna, vita di spiritualitá coniugale e familiare, Ed. Cittá Nuova, 2001.
extinción y no es favorecida respecto a las otras formas modernas de familia: las convivencias, lasparejas de hecho también homosexuales, el matrimonio homosexual. Para los que sostienen esta visión, los hijos no constituyen un problema: es solamente una cuestión de educarles,con expertos psicólogos o psicoanalistas, de manera que puedan aceptar además de una madre o un padre biológico, también un nuevo padre adoptivo, la amiga del padre o el amigo de la madre etc...
Aparece la familia alargada: marido, ex mujer, amante o viceversa, hijos de primera, segunda o tercera cama, etc...
Eventos e ideologías que han concurrido a desestructurar la familia en nuestros días
Además de los factores que hemos recordado arriba que han puesto las bases de ladesestructuración de la familia, consideramos ahora algunos de los eventos y de las ideologías quedesde el final de la guerra hasta hoy han acelerado el desmoronamiento de la familia y han creado una mentalidad contraria a la familia cristiana.
Es importante para nosotros saber discernir, sobre todo para dar a conocer a nuestros jóvenes los orígenes de los engaños que han creado la mentalidad dominante de la sociedad de hoy y que continúan a engañar y a fascinar. Nosotros sabemos que es el demonio el que siembra falsas ilusiones bajo apariencia de bien, por eso Jesús lo desenmascara llamándole "homicidadesde el principio... mentiroso y padre de la mentira..., cuando dice el falso, habla de lo suyo" (Jn. 8, 44).
Conocer estos engaños en sus raíces históricas es fundamental para desenmascarar a nuestrosjóvenes los engaños que tanto seducen y atraen bajo apariencia de bien, de manera que ellospuedan decidir a quien quieren seguir: si a los falsos profetas que prometen una aparente felicidad pero que sin embargo de hecho después llevan a la muerte del espíritu y a menudo a la autodestrucción en la droga, en el alcohol, en el sexo o al suicidio y asesinato, o si seguir la Palabra de Dios que revela la Verdad y que lleva a la verdadera felicidad y a la alegría de vivir. En el "combate de la fe", al que todos nosotros estamos llamados cada día, es importante conocer las trampas del demonio que han entrado a formar parte de nuestra cultura ("para poder resistir a las acechanzas del diablo", dice S. Pablo en Ef. 6, 17. "Nuestra batalla no es contra la carne y la sangre, sino contra los Principados, contra las Potestades, contra los Dominadores de este mundo tenebroso, contra los Espíritus del Mal que están en las alturas.") para no dejamos seducir y para saber como responder en los distintos ambientes, escuela, universidad, amigos.
Las dos guerras mundiales con los juegos de poder y las innumerables víctimas y destrucciones hanpuesto en discusión un tipo de sociedad que se profesaba basada sobre raíces cristianas. Veamos ahora brevemente como esta crisis de valores haya favorecido la propagación de nuevas teorías e ideologías de las que vivimos las consecuencias en nuestros días.
Para exponer algunas de las ideologías que han llevado a la mentalidad hodierna contra la familia,emplearé un libro: "Historia de la idea de familia en Italia "13. Aunque el autor trate de Italia,muchos aspectos atañen también a países de Europa o de América, de Occidente en general, y por el fenómeno de la globalización, en cierta medida al mundo entero.
La posguerra del 1948. Influencia de las potencias vencedoras: Estados Unidos y Rusia.
"Quien venció la guerra, fueron más que los británicos, los estadounidenses y los soviéticos ya su cultura, radicalmente contrapuesta, mira no solamente Italia, sino gran parte de esa intelectualidad occidental que se siente atraída por las fuerzas vencedoras. Si en Italia los católicos encuentran en la Democracia Cristiana un firme punto de referenciapolítico, los intelectuales de la Izquierda pueden contar con el apoyo del partido comunista más fuerte de Occidente, continuamente atento a no descontentar del todo a Moscú y a tener presentes las instancias occidentales.
13
Hervé A. Cavallera, Storia dell'idea di famiglia in Italia, Ed. La Scuola, Brescia 2006. Esta primera parte de la Catequesis se ha tomado del primer capítulo del libro citado "L'idea di famiglia tra il 1945 e il 1960, pp. 9-72.La concepción marxista de la familia: Karl Marx y Engels.
Por parte comunista, ya sea a través de pensadores, ya sea a través de la sagaz presencia del partido en importantes casas editoriales, se manifiesta una efectiva ocupación cultural, como acontece contemporáneamente en Francia con J. P. Sartre, M. Merleau-Ponty, H. Lefebvre. Bajo este aspecto ha sido muy interesante el papel de la casa editorial Einaudi, sobre la cual actúa fuertemente la intelectualidad comunista, con la traducción, entre otras, de obras de autores como Marx y Lukacs y sobretodo con la publicación de los escritos de Gramsci.
Es suficiente observar el Manifiesto del Partido Comunista. "¿En que se basa la familia actual, laburguesa? Se basa en el capital, en el lucro privado. Solo para la burguesía, se da una familia en sentido pleno, cuya contrapartida está en la forzosa carencia de familia de los proletarios y en laprostitución pública. Este tipo de familia burguesa, desaparecerá, naturalmente, con la desapariciónde su contrapartida y ambas desaparecerán con la desaparición del capital".
El texto prosigue evidenciando como también la educación burguesa queda determinada por lasociedad. "La retórica burguesa acerca de la familia y la educación, acerca de la intimidad familiarentre padres e hijos, resulta tanto o más repugnante cuanto que con la extensión de la gran industria se van desgarrando todos los lazos de las familias proletarias y los niños se van transformando en meros artículos de comercio e instrumentos de trabajo... El burgués ve en la mujer un simple instrumento de producción.
Es el caso de recordar que el libro fue publicado por primera vez
en 1848. Con la segundaposguerra y las precisas referencias que entonces se podían hacer al materialismo y al ateísmosoviético, las palabras de Marx y de Engels, resuenan peligrosamente corno desestabilización dela estructura sustancial de la familia. Es hasta demasiado claro que los fantasmas de Marx yEngels y sobretodo la presencia de la Unión Soviética, significan la posibilidad delderrocamiento de la familia como se concibe a través del desarrollo de la doctrina cristiana. Nohay que subvalorar tampoco la operación querida por Togliatti por la publicación de los escritosde Antonio Gramsci (1891-1937).Antonio Gramsci- A.S. Makarenko: crisis de la familia tradicional
El Partido Comunista italiano
- empieza a avocar, como si siempre hubiera sido así, a la cultura, conuna definitiva profesionalización de la política.Según Gramsci el matrimonio católico tiene precipuamente el fin de legitimar la unión sexual."El matrimonio hace que sea "moral" la cópula a través del mutuo consentimiento de loscónyuges; mutuo consentimiento expresado sin condiciones limitativas." Y más adelante,refiriéndose al paso del Génesis (2, 21-24) en el cual se dice "varón y mujer serán dos en una solacarne", apunta: "habría que ver si estos elementos pueden ser interpretados como justificantes dela indisolubilidad del matrimonio, por lo que han sido dirigidos, como contribución de la religióncristiana a la introducción de la monogamia, o no significaran en origen solamente la uniónsexual, es decir se contrapusieran a las tendencias "pesimistas" de la "pureza" con la abstenciónsexual"15.
El pensador, además, se percata de que la crisis de la familia se debe particularmente a la entrada de las mujeres en la vida social y a la consiguiente asunción por parte del Estado de tareas que una vez eran propias de la familia. La posición de Gramsci, refleja el clima cultural de la Izquierda, esto además está confirmado por la traducción al italiano de la obra más significativa del pedagogista soviético: A.S. Makarenko (1888-1939)16.
En realidad, en la obra de Makarenko se contrapone, al así llamado individualismo burgués, el colectivismo. Lo que cuenta es lo colectivo. Ni solo eso. Que permanezcan las tradiciones delpasado, véase el matrimonio y la condenación de la mujer que ha abortado, pero en una lógicanaturalista. Lo que viene a menos, es toda forma de espiritualidad. Todo se resuelve en unnaturalismo biológico fuertemente jerarquizado. El espacio de lo privado es menos importante, enuna suerte de deificación de lo colectivo. Esto es afirmado muy claramente en el volumen de
14 K. Marx, F. Engels, El Manifiesto Comunista, Ed. Alhambra, Madrid 1987, pp. 77-78.
15 A. Gramsci, Quaderni del carcere, a cura di V. Gerratana, vol, I, Torino, Einaudi, 1975, p. 77.
16 A.S. Makarenko, Poema pedagogico (trad. del ruso), VI ed. Roma, Editori Riuniti, 1966 (1 ed. 1952), p.102.
1959, que expresa el modo de ver oficial del régimen. "La educación burguesa inyecta en loshombres una psicología y una moral individualista de propiedad privada, una concepción delmundo idealístico-religiosa y cultiva los prejuicios raciales y nacionalistas. La educacióncomunista al contrario, está llamada a ayudar la formación de hombres progresistas, libres de la psicología de la propiedad privada, de los prejuicios nacionalistas, religiosos y de otra índole." Eneste sentido el marxismo, a través de sus distintos representantes sean italianos sean soviéticos nossubvierte el orden burgués. En lo específico, familia y matrimonio permanecen, pero en unaperspectiva subordinada al Partido y fuera de todo fundamento sobrenatural.
Hay que subrayar sin embargo, que la difusión o mejor dicho la presencia de un fuerte partidocomunista, influye sobre la difusión de otras doctrinas, no necesariamente marxistas o cercanasal marxismo, sino libertarias y en ese sentido más revolucionarias que el doctrinarismo obrero ycampesino de matriz soviética. Piénsese en primer lugar a la difusión en Italia del existencialismoen la Vulgata francesa, políticamente militante en la izquierda. De manera evidente además alcomunismo ha sido por vario tiempo vinculado Andre Gide (1869-1951), que sostenía undenodado individualismo, con personales concesiones a la homosexualidad.
Jean-Paul Sartre: Relativización del amor; Fin del vínculo contractual del matrimonio
Pero al existencialismo y a la Izquierda pertenece Jean-Paul Sartre (1905-1980), que sostieneun existencialismo ateo en el que el hombre es lo que se hace, autor de novelas que hacenescándalo'', pronto traducidas al italiano, que divulgan las tesis del filósofo a un público noespecialista...
El análisis sartriano del amor, en que están presentes ecos psicoanalistas, llega por tanto a larelativización del amor. Este último es una pasión que no permite estabilidad. Si queremos, esun retorno a las antiguas tesis seiscentescas, pero con el añadido que la relatividad del amor esontológicamente tal. Esto permite poder sostener la razonable fragilidad de toda relación; sepodría añadir también de la relación matrimonial18.
El discurso de Sartre es muy interesante. Importando en su argumentación filosófica seductoras,por lo menos por los tiempos, referencias a la cotidianidad, el filósofo tira por tierra comosuperestructuras las indicaciones morales y reconduce el significado del amor a un deseo, que esencarnación en sentido claramente materialista y de todas formas siempre sujeto, en cuantofacticidad, a la precariedad de lo existente. El mismo acto del amor es a tiempo.
El existir es nada. La conciencia sartriana es la conciencia de una serie de emociones. Lo queviene a menos es la estabilidad... Por lo que concierne al concepto de familia, un preanunciar laconvivencia de hecho que dura cuanto dura y el fin del vínculo contractual del matrimoniocomo vínculo no separable. El filósofo francés expone con claridad que el acto amoroso es detodas formas un acto de posesión, no de entrega.
Bertrand Russell: amor libre, libertad sexual
No es menos interesante la presencia de las obras más divulgativas de Bertrand Russell
19 (18721970)20... El filósofo desarrolla una historia de la civilización bajo el perfil de las relacionesfamiliares, subrayando que esa historia «es sobretodo un testimonio del gradual decaimiento de la autoridad paterna; autoridad que alcanzó su más grande potencia en los países que más habíanprogresado precisamente en el comienzo de la historia escrita». La religión, en particular la éticacristiana, reconociendo la licitud del acto sexual solo en el matrimonio, ha producido una visióndistorsionada del sexo. «Una idea similar, contraria a los hechos biológicos, tiene que serconsiderada por toda persona sana como una morbosa aberración. El cristianismo, por haber
17 La Nausse (1938) y el Mur (1939), del sabio filosófico L'Etre et le Néant (1943), del drama – "Le diable et le bon Dieu" (1951).
18 "Éste es por tanto el final del amante, en cuanto que su amor es muy difícil, es decir, una proyección de sí mismo. Esta proyección debe provocar un conflicto. El amado, de hecho, capta al amante como un objeto más entre los demás objetos, es decir, lo percibe en el marco del mundo, lo trasciende y lo utiliza.
19 Russell, Bertrand (Trelleck, Galles 1872) – Pemhyndeudraeth, Galles 1970), filósofo británico. Microsoft O Encarta 2006. 1993-2005 Microsoft Corporation. Todos los derechos reservados.
20 Sobre el pensamiento de Russell, con bibliografía relativa, cfr. M Di Francesco, Introduzione a Russell, Roma-Bari, Laterza, 1990.
incorporado una semejante idea, ha llegado a ser (como resulta claro estudiando la historia) unafuerza capaz de procurar desórdenes mentales y malsanas visiones de la vida». En particular,mujer ha sido considerada como una tentadora que hay que evitar.
En lo presente, la situación va cambiando a la luz de la emancipación de la mujer y deinvención de los anticonceptivos... La convicción de la igualdad entre los sexos conduce, segúnfilósofo, al reconocimiento que también las mujeres pueden tener libres relacionesprematrimoniales, que se puede recurrir al uso de anticonceptivos, que la autoridad paternadecae y que el Estado asume un papel más importante en la educación de las nuevasgeneraciones. Es el nacimiento de una nueva moral sexual, de la que el filósofo se hanpregonero.
En particular es necesario dejar pleno desahogo al amor y para que éste aporte todo el bien dque es capaz debe ser libre, generoso, sin límites: debe colmar todo el ánimo. Lasconsecuencias son revolucionarias, sobre todo por lo que concierne al vínculo matrimonial. El filósofo favorable a aventuras extramatrimoniales, salvaguardando la dignidad del vínculo común también porque, con el pasar de los años, en la vida en común .acaba la pasión y es necesario reavivarla con nuevas experiencias. Esto implica no solo la razonabilidad de la existencia d divorcio, sino más bien una cierta libertad aun en la vida de pareja. Solo de esta manera matrimonio puede durar21...
Russell es indudablemente un pensador que sin fingimientos conceptuales, da paso a la libertadsexual. Precediendo con mucho el fin de los años 60, el suyo aparece un discurso demasiadovanguardista para ser creíble y aprobable, sin embargo contiene todos los elementos quegerminarán y se actuarán en los años de la contestación. En primer lugar la condena de los tabúsexuales y la petición de la libertad comportamental.
Freud y Wilheim Reich: la liberalización de las relaciones sexuales
El comienzo de un cambio sustancial de las costumbres y se vale directamente o indirectamentede la revolución sexual obrada por Freud y por el psicoanálisis.
En los años 30, Gentile confía a Eduardo Weiss, que es uno de los primeros ilustradores en Italia las voces Freud (vol. XVI, 1932) y Psicoanálisis (vol. XXVIII, 1935) de la Enciclopedia Italiana bastante medidas, pero la hostilidad a la teoría freudiana no falta también en ámbito filosófico22.
Pero está claro que la fortuna de Freud es imparable en Italia y Freud, como es conocido, eliminael tabú de la sexualidad reconociendo su profunda existencia en todas las fases de la vidahumana y se detiene sobre las que la sociedad del tiempo llama perversiones. En los tres ensayosobre la teoría, sexuadas (1905, traducido por primera vez en Italia en 1921) Freud no solo explicacomo las pulsiones sexuales estén presentes en la infancia, sino que se entretiene con 1invertidos y los bisexuales. Y sin embargo la posición de Freud, que tanta sensación causa ha: los años 50, es bastante moderada respecto a
los desarrollos que hubiera dado a éstas WilhelmReich (1897-1957).Éste, que desde Alemania, en 1939, se trasladó a los Estados Unidos, padeciendo después condenasjudiciales y detenciones por la radicalidad de
sus tesis y por las experiencias concretas, desarrolla una especie de freud-marxismo en que lleva a cumplimiento la liberlización de la sexualidad Sus obras son condenadas, per,. su pensamiento tiene una difusión en los ambientes especialistas y juvenilesestadounidenses. Es bueno resumir los puntos salientes, con la referencia a una deobras significativas, escrita en 1942, La función del orgasmo.
En la Nota Introductoria, Reich explica como antisocial toda represión a la vida natural, cuanto que bloquea las energías vitales. En concreto, la primera responsable de esa represión
21 B. Russell, Matrimonio e morale, (traducción del inglés), III ed., Milán, Longanesi, 1961, pp. 32,51,87-88.
22 Es significativo la crítica despiadada de la obra freudiana por parte de De Ruggiero. "En toda la doctrina d sexualidad de Freud, el rasgo que más impresiona por su gran deformación está en la inversión de la relación cualquier persona equilibrada está llevada a establecer entre lo que es normal y lo que es anormal, entre lo sano enfermo. Para él es lo normal, lo enfermo, lo degenerado, no solamente los que explican los valores opuestos, sino los preceden y condicionan como los a priori metafísicos".
la familia, así como es comúnmente concebida
23. De aquí la tesis de una sexo-economía queelimine la familia y la moral coactivas y libere el goce sexual. Según Reich la vida en suplenitud es el placer mismo que se autorregula24.El pensamiento de Reich, bastante difundido entre los lectores juveniles americanos esconsiderado como uno de los principales artífices de la mentalidad revolucionaria estadounidenseen el campo sexual de los años 60, explica muy bien, en su radicalidad, la tendencia que se vaafirmando en la juventud de los años de la Contestación. Familia, matrimonio, indisolubilidadde los vínculos, castidad, aparecen como imperativos puestos por la conveniencia y por lahipocresía de los adultos, en clara contradicción con los apetitos naturales. En crisis no vasolo la indisolubilidad del matrimonio, sino la institución misma, en nombre de la liberación de las relaciones sexuales.
Desde América las Relaciones sobre la sexualidad de Charles Kinsey legitima toda pulsión sexual
Entre el fin de los años 40 y los primeros años 50 en California (USA) se publican unos volúmenesque compendian y comentan el comportamiento sexual sacado de entrevistas a miles depersonas(en el primer capítulo se habla de 12.000 biografías de sujetos masculinos). Los informesson promovidos por Charles Kinsey (1894-1956)
25, director del Instituto para la investigaciónsobre el sexo de la Universidad de Indiana desde 1947 hasta su muerte. El primer informe apareceen 1948 y concierne a los comportamientos sexuales masculinos, el segundo, concerniente a losfemeninos, se publica en 1953. Los Informes Kinsey arrojan nueva luz sobre el argumento y sondestinados a influir, más que todos los estudios anteriores, no siempre traducidos y difundidos,sobre la cultura occidental, incluida la italiana.Kinsey ofrece una enorme, cantidad de datos prescindiendo de una valoración sobre los mismos,sino que él sonsaca la norma humana de la biología y de la estadística. La consecuencia es unaactitud que, deteniéndose en la dimensión biológica, legitima toda pulsión sexual.
Se trata de una impostación difundida entre las ciencias psicológicas y sociológicasestadounidenses, que induce a la aceptación de los datos sin la discusión sobre el significado ysobre las consecuencias de los mismos. El armazón descriptivo excluye el normativo. Esojustifica y confirma una visión naturalista de la vida, que es aceptada prescindiendo de juiciosde valor. Lo que acontece, en cuanto que es compartido por la mayoría, se convierte enverdad, o cuanto menos es legitimado. El esfuerzo del científico es la comprensión de loinmediato.
Si se quiere, es la radicalización del principio democrático del valor de esta última: lo justo es loque quiere la mayoría26.
23 "La causa principal del hecho de que la mayor parte de los hombres están modelados según un molde de lo alto no es el amor natural de los padres por los hijos sino la familia autoritaria. Su principal instrumento es la represión de la sexualidad en el niño y en el adolescente" (W. Reich, La funzione dell'orgasmo, traducido del inglés, Milán, Il Saggiatore 2000, p.21).
24 "La moral actúa como deber. Ésta es incompatible con la satisfacción natural de las pulsiones. La autorregulación sigue las leyes naturales del placer y no sólo es compatible con las pulsiones naturales, sino que es también prácticamente idéntica. La graduación moral crea una contradicción psíquica violenta e indisoluble, entre la naturaleza y la moral". Ibid., p.22.
25 Desde el 1927 titulares de la cátedra de zoología en la Universidad Indiana (Microsoft Encarta O 2006. 1993-2005 Microsoft Corporation. Todos los derechos reservados).
26 En el 1948, el mismo año de la publicación original del informe, una comisión del American Statistical Association, que incluía importantes estadistas como John Tukey, condenaron el procedimiento de la elección del campeón. La crítica se fundaba principalmente en la súper representación de algunos grupos dentro de los cuales: el 25% estaba, o había estado, en prisión, y el 5% estaba formado por hombre que se prostituían. Una crítica unida a la de Tukey fue formulada por algunos de los mayores psicólogos del tiempo, entre los que estaba Abraham Maslow. Estos últimos sostenían que Kinsey no había considerado la distorsión de los resultados derivados del hecho de que los datos de salida representaban solamente aquellos que consentían participar en la investigación. Kinsey fue a pesar de todo el padre de la revolución sexual americana que llevó a la introducción sexual en las escuelas y al nacimiento mismo de la ciencia sexológica (Wikipedia).
Ugo Spirito: el cambio de época, la revolución contra los padres y los maestros
No se trata de una fase transitoria secundaria, sino de una verdadera y propia mutación histórica.Esto lo vislumbra el más importante de los discípulos de Gentile, Ugo Spirito
27, de quien elproblematicismo atrae en esos años la atención del mundo católico. En la mitad de los años 50Spirito vislumbra con extrema claridad el cambio epocal debido a un proceso de aceleración delritmo de la vida que corroe fe e ideologías tradicionales, y que enviste la misma relaciónpadres-hijos28.En 1953 adelantándose a nuestros días él escribe:
La velocidad contradistingue la nueva época con la consecuencia de que todo llega a ser
relativo y el relativismo enviste toda concepción filosófica y el sentido de la vida en general. Seintercambia la evidencia científica con la verdad, apunta el filósofo, se identifica lo particularcon lo universal, en una visión dogmática que implica la incapacidad de comprender y de darsentido a la vida que permanece otro. Ni llega una respuesta adecuada, según el parecer deSpirito, del pensamiento católico, a menudo conciliador... Hacerse tolerar y sobrevivir: estoparece que llega a ser la contraseña del pensamiento católico, que no consigue revelar una eficaz fuerza crítica hacia el pensamiento al que se opone.El análisis del filósofo del problematicismo apunta a que el proceso de secularización es fuerte yhalla sus instrumentos en los medios de comunicación de masa que superan toda resistenciaideológica y geográfica. En un volumen, profético en algunos pasos, el filósofo Spirito vuelve al concepto de relativismo que marca el comienzo de una crisis teorética y práctica, registrando en la familia y en la escuela el surco entre las generaciones. Spirito se da cuenta de que los padresy educadores continúan jugando su propio papel, pero algo se ha quebrantado y ya no se creeen ellos. «La generación de los padres da pruebas manifiestas de esta disgregación interna y la hipocresía obnubila inexorablemente toda buena intención ostentada. No se cree lo suficiente, pero se continúa actuando como si se creyera. Y el drama enviste, junto con lospadres y los maestros, a toda la clase política dirigente, en la que el contraste entre los valores predicados y las acciones cumplidas alcanzan las formas más paradójicas y monstruosas. Ahora, los jóvenes advierten todo esto y juzgan
en consecuencia. Leen en los rostros de los padres que demasiado a menudo la familia esta apagada en sus corazones; sienten que en los ritos y en las ceremonias religiosas la fe es extrínseca y convencional; se ríen del profesor de religión... El resultado está en el juicio de condena de los hombres, que arrastra consigo los valores que ellos ostentan creer. Pero la conciencia de los jóvenes, después, no está entretejida, como la de los ancianos, por los valores tradicionales. [...]Explota entonces la revolución contra los padres y maestros, contra la clase política dirigente ylas leyes que de ella dimanan. Nace entonces la juventud que delinque
29». Son palabras que denuncian con eficacia lo que acontecerá hacia el final de los años 60: precisamente lacontestación juvenil.La valoración de Spirito, que se retrotrae a un discurso tenido en Calabria en 1958, anticipa lostiempos... Nada parece cambiar pero el cuadro está cada vez más movido. Son sobretodo losjóvenes los que sienten una fuerte exigencia de cambio, dentro de la vida política, dentro de laescuela, dentro de la familia. Las ideas no están todavía precisas y claras, pero los viejos modelosya no son tan firmes. Resisten, pero por inercia. Ya no existe ninguna fuerza verdaderamentedifundida a la que hay que creer. Todo parece listo para ser derribado.
27 (Arezzo 1986 – Roma 1979), filósofo italiano Microsoft O Encarta e 2006. © 1993-2005 Microsoft Corporation.
28 "Si los padres continúan reprendiendo a los hijos, no lo hacen ya con la convicción y la intransigencia de entonces, sino sólo con el sentido de necesidad que les puede por los nuevos modos de vida a los cuales no son capaces completamente de adecuarse. Por lo demás, también ellos están convencidos de que los tiempos han cambiado y aceptan el cambio llegando a reprimir en sí mismo toda clase de reacción y de intolerancia. Su fe está derrotada por las preocupaciones de no entender y de sacrificar inútilmente a sus propios hijos. El gusanillo de la duda arrastra a la vieja generación al nivel de la nueva y toda capacidad de resistencia se ve frenada por el ritmo vertiginoso de la transformación". (U. Spirito, Significato del nostro tempo, Florencia, Sansón, 1955, p.7).
29 U. Spirito, Inizio di una nuova epoca, Florencia, Sansón, 1961, pp. 25-27.
Helmut Scheisky
30: el rol de los sexos. El flirteoPor otro lado, el análisis histórico, social, antropológico muestra, según Scheisky, que las funcionesmasculinas y femeninas varían según los contextos culturales. No existe, por tanto, unareglamentación metafísica de los roles de los sexos, sino más bien costumbres que algunascivilizaciones desarrollan y sostienen, utilizando la educación, la religión, la pertenencia social. "El rol de los sexos, como las formas sociales de la "sexualidad" en general, son pues, en el fondo,fenómenos históricos, y están por tanto sujetos a mutaciones históricas y a las decisiones históricasde una sociedad".
Según Scheisky, el matrimonio no es una institución primariamente sexual. El impulso sexual,primariamente, está simplemente
ligado al apareamiento y no a establecer una larga duración devida con el partner. La despersonalización provocada por las formas actuales de trabajo lleva amuchos sujetos a encontrar un momento de desahogo en breves relaciones sexuales, cediendo a la propaganda de la licitud de los flirteos «La consecuencia es una erotización (mejor sería decir unasexualización del hombre moderno desde el exterior), un constante despertar de los impulsossexuales por parte de la sociedad sin una efectiva presión instintiva que parta del individuo, y laposibilidad de un notable emperezamiento de la fantasía y de los sentimientos». Se trata de unaimagen para nada positiva.El
68: La contestación. Las tres M: Marx, Mao y Marcuse. El rechazo de todo vínculoReducir los movimientos que trastornan Occidente, entre el fin de los años 60 y los primeros años 70, a una dramática lucha generacional es en parte simplista.
El génesis de la fractura es mucho más complejo y está ligado a la tensión entre dos ideologíascontrapuestas (capitalismo y comunismo); a un desarrollo económico relevante que acentúa lapetición de hedonismo difundido; a la crítica del principio de autoridad en nombre de un evidenteindividualismo... Y sin embargo nunca como al final de los años 60 los jóvenes son la expresiónmás marcada de la incomodidad y de la necesidad de nuevas perspectivas, así que ellos imprimen como nunca jamás, con una violencia a menudo excesiva, un cambio radical a las costumbres deltiempo.
Las tres M, como entonces se decía, del variado y complejo movimiento estudiantil responden a los nombres de Marx, Mao y Marcuse (1898-1979): En realidad, el proceso in fieri corresponde auna liberalización sexual que no se corresponde a algún proyecto de una vida en común, sino a laaceptación del placer inmediato. En este sentido no se trata simplemente de la liberación deformas autoritarias, sino de un más general rechazo de vínculos que conlleven la coexistencia, la relacionalidad, la responsabilidad. Es el triunfo de lo inmediato, de lo efímero, más o menosgestionado razonablemente. En todo caso, nos encontramos frente a sujetos que no entiendencuidar, asumir su propia responsabilidad, sino gastar su propia vida para sí mismos.
David Cooper: La muerte de la familia. Solución: la Comuna
En 1972 aparece en Italia La muerte de la familia de David Cooper31. Según éste la familia es un medio de condicionamiento ideológico y, más allá de toda retórica, se ha convertido en el s. XX en ellugar máximo de la alienación. "El poder de la familia reside en la función de mediación social. Esto consolida el poder efectivo de la clase dirigente en cualquier tipo de sociedad basada en la explotación, dando a toda institución social una fórmula paradigmática fácilmentemaniobrable"32. Por tanto más que la muerte de Dios, del que en la relectura de Nietzsche discutela intelectualidad del tiempo, de un Nietzsche fuertemente crítico respecto a las hipocresíasdomésticas, sería necesario concebir la muerte de la familia.
Ciertamente no se dice que es necesario odiar a los propios padres, pero, según Cooper, esnecesario liberarse de los condicionamientos impuestos en buena o en mala fe por ellos para que nose caiga en la paranoia33.
30 H. Schelsky, sesso e la societá (trad. del alemán), Milán, Garzanti, 1960, p.27.
31 Cooper, David (Le Cap 1931 — París 1986), psiquiatra británico.
32 D. Cooper, La ,norte Della famiglia, trad. del inglés, Torino, Einaudi, 1972, p.10.
33 "Para éste la familia es solo "un pacto suicida" que anula nuestra individualidad, quitando a "nuestras acciones toda genuina y generosa espontaneidad"; es "una real, objetiva situación persecutoria en la que cada uno de nosotros está introducido incluso antes de existir": "un crónico asesinato del propio yo", porque para realizarse de verdad "debemos aprender a ir a lo nuestro", "pertenecer solamente a nosotros mismos", "encontrarse a sí mismo, cortejarse a sí mismo, y desposarse a sí mismo", sin tener que cuidar de los niños que lloran o del dolor de otros. ¿La solución? La comuna, en la cual "las relaciones amorosas se difunden entre los miembros de la comunidad mucho mejor que en el sistema familiar... esto implica naturalmente que las relaciones sexuales no se restrinjan a la parea hombre-mujer... y sobretodo significa que los niños tengan libre acceso a otros adultos más allá de la pareja que son sus progenitores biológicos". ¿Por qué entre los actuales partidarios de Dico, ninguno tiene el coraje de hablar con tanta franqueza y coherencia?" (De Francesco Agnoli, Foglio, 3 Mayo 2007).
Pierre Simon, "La vida antes que nada" (1979)
Pierre Simon, dos veces gran maestro de la masonería francesa, en efecto, en la obra citada sostiene claramente su visión del mundo, que mira a liberar la familia "de los vínculos desangre" ("al padre le sucederá el amante"), para construir la "sociedad nueva", "sin familia,sin padres, sin madres", poniendo en primer plano el placer y rechazando explícitamente "elcarácter de absoluto" que la vida "tenía en el Génesis". Simon, que se encontró con el apoyo defamosos teólogos dominicos postconciliares, postula solapadamente la eliminación de losdesaventajados y de los enfermos crónicos, introduciendo una expresión, "calidad de vida", quehará fortuna; define la vida "no ya como un don sino como un material que se gestiona";considera que con la "inseminación artificial la procreación se realizará sin el acto sexual"34 yque con las "bancos de semen" será "toda la sociedad la que fecunde a la pareja"; finalmentepropone como modelo un presunto mundo polinesiano, en el que "los niños circulan entre máspadres y nada obliga al padre a criarlos". Todo eso en el ámbito de una "resacralización delcosmos" con un sabor verde-panteísta, donde en efecto se le dará una importancia preeminente "ala relación con el ambiente", a la "ecología" (Di Francesco Agnoli, Il Foglio, 3 de Mayo de 2007).
34 "¿El futuro? Es bisexual. Palabra de Humberto Veronesi. Entrevistado ayer en el Reformista, el oncólogo ex ministro de la Salud inmerso en la tranquilidad estival de Capalbio ha turbado la atmósfera con una tesis que hace ya discutir. La especie humana –dice Veronesi- va evolucionando hacia un"modelo único", las diferencias entre hombre y mujer se atenúan (el hombre, no teniendo que luchar más como antes por la supervivencia, produce menos hormonas andrógenas, la mujer, también ella puesta frente a los nuevos roles, menos estrógenos) y los órganos de reproductores se atrofian. Esto, unido al hecho que, entre fecundación artificial y clonación, el sexo no es ya la única vía para procrear, concluirá por privar totalmente al acto sexual de su fin reproductivo. El sexo quedará –advierte el oncólogo – solamente como un gesto de afecto, por lo que no será algo tan importante si escogemos para practicarlo a un compañero de nuestro mismo sexo". "La humanidad será bisexual". Veronesi divide a los científicos, de Giulia Ziino,Corriere della Sera, domingo 19 agosto 2007.
Catequesis sobre la familia 2007
SEGUNDA PARTE
El Magisterio de los Papas frente a los cambios de la sociedad
Desde la posguerra hasta nuestros días la Iglesia, sobretodo a través del magisterio de los Papas, haestado siempre presente y vigilante para orientar a los fieles a coger los aspectos positivos y estar en guardia contra los aspectos negativos del cambio de la sociedad. A la luz de la Revelación los Romanos Pontífices, han desenmascarando los engaños escondidos bajo aspectos atrayentes, apelando a los valores imperecederos de la Tradición Cristiana sobre la persona, la sexualidad, el matrimonio y la familia.
La Centralidad de Pío XII: defensa de la familia cristiana.35
El Papa Pío XII, que ha sido espectador de los dramas de la segunda guerra mundial, se esfuerza en salvaguardar los valores de la cristiandad, en una sociedad impregnada de valores cristianos.
"El pontificado de Eugenio Pacelli que posee un fuerte carácter personal, se coloca, bajo el perfil social, como alto magisterio de la renovada centralidad de la Iglesia, a través del papel en primer plano de la familia como motor de moralidad:
"Si la familia antecede a la sociedad política, ésta debe asegurar en todas las formas, lasfinalidades y la expansión de ésta. [...] En la familia nace y se desarrolla la vida, se forman los hijospara sus tareas futuras, se regenera y se fortifica la sociedad". En 1947, en la plaza de San Pedro,con ocasión del Congreso de los Hombres de la Acción Católica, Pío XII sostiene el lema Iglesia, familia, trabajo. El pontífice se da cuenta con extrema claridad que el renacimiento cristiano de la sociedad italiana debe apoyarse sobre la unidad familiar y sobre la seguridad.
Ya no es más el Estado ético de un Gentile, sino el Estado cristiano y católico, baluarte contra toda forma de materialismo. Una familia que tiene que ser tutelada, a fin de que pueda constituir una nueva generación cristiana capaz de vivir cristianamente.
Pío XII conoce bien como fuera de la Península pueden haber diversos modos de concebir la vida, baste pensar en el materialismo soviético y en el hedonismo estadounidense. Él considera esencial el empeño de tutelar la sacralidad del vínculo matrimonial, la pureza de los comportamientos.Es un empeño que el pontífice entiende como esencial y perjudicialmente educativo, que debe sostenerse a través de maestros, asociaciones, instituciones, estudiosos católicos. Diría que élpromueve en los años cincuenta la movilización católica del País para alcanzar la cristianización de la sociedad, con un despliegue de fuerzas que probablemente nunca antes había habido en la historia de la Península.
Pío XII se muestra infatigable en este aspecto. Ya en el ocaso de la era católica dibuja conclaridad los caracteres y el papel de la familia así que consiente a los constituyentes fijar los trazos en los términos esenciales. Además toma posición a lo largo de todo su pontificado, contra el peligro de un laicismo materialista que ve difundido en el mundo. Él quiere preservar a la catolicidad de los decaimientos".
Papa Juan XXIII y el Concilio Vaticano II: una nueva aproximación a la Familia.
Mientras el Papa Pío XII representa el tentativo extremo de la Iglesia para salvaguardar los valoresde la cristiandad, con el Papa Juan XXIII y el Concilio Vaticano II, que él mismo convocó(preparado, sin embargo, con previsión por el Papa Pío XII), la Iglesia atenta a los gozos y a lasesperanzas, a las tristezas y a las angustias de los hombres de hoy, de los pobres sobretodo y detodos aquellos que sufren (GS. 1), guiada e inspirada por el Espíritu Santo, hace una reflexiónsobre sí misma y sobre su misión en la sociedad que está cambiando rápidamente, y da comienzoa un nuevo modo de presencia de la Iglesia, no más como alma de la cristiandad, sino comoIglesia sacramento y signo de Cristo: luz, sal y levadura de la nueva sociedad que se estáformando.
35 Cavallera, Op. cit., pp.16-23.
El Concilio Vaticano II marca una renovación dentro de la Iglesia: yendo a las fuentes de la Sagrada escritura (Dei Verbum) y de los Padres, con la reforma Litúrgica (Sacrosantum Concilium) y una nueva autoconsciencia de la Iglesia y de su misión (Lumen Gentium), inaugura unaprofundización de la antropología cristiana que ofrece una visión de la persona, de la familia y de lasociedad que responda mejor a los nuevos tiempos (Gaudium et Spes). Veremos algunoscontenidos y desarrollos sucesivos más adelante.
Papa Pablo VI: La laicización de la sociedad. La "Humanae Vitae'36.
"A Juan Bautista Montini que toma el nombre de Pablo VI, le corresponde la tarea no fácil deseguir y llevar a término el Concilio (1965). De este último, por lo que atañe al problema delmatrimonio, emerge la oportunidad de distinguir el valor y la institución de la familia de lapresencia y de la influencia del Estado.
La familia empieza a ser vista sobretodo como una comunidad espiritual, dentro de una lógica quedistingue los campos de lo espiritual de los de lo temporal. En particular, ya no se habla de contratomatrimonial, sino de foedus, pacto: el foedus que existe entre Cristo y la Iglesia, es un foedus dilectionis. El foedus coniugi es, pues, también un foedus dilectionis, ya que "la imagen" debecorresponder en su realidad íntima a su prototipo. La dilectio coniugal no es más que algosuplementario37, aunque sea muy necesaria en el conjunto del matrimonio cristiano: esprecisamente "la esencia concreta" del matrimonio, manteniendo firme que la finalidad objetiva dela relación conyugal es la procreación y la educación de la prole. En verdad, el concepto dedilectio, por cuanto ha aclarado en su plenitud, abarca la posibilidad del reconocimiento del valorde la sexualidad en la espera conyugal siempre que sea regida por el amor.
Pablo VI en la "Humanae Vitae" subraya como se ha difundido la preocupación de un crecimientoincontrolado de la población mundial, recuerda que el problema del control de los nacimientos, ha sido debatido en una Comisión específica, especifica que las características del amor conyugal son la humanidad, la totalidad, la fidelidad, la fecundidad, pide que haya en los esposos una paternidadresponsable, considera inseparables los dos aspectos de la unión y la procreación, siempre en una óptica medida, pero frente a las vías artificiales para la regulación de la natalidad, la condenaciónes sin apelación.
En el caso además de que el número de los hijos no consienta un ulterior crecimiento de la prole,"la Iglesia enseña entonces que es lícito tener en cuenta los ritmos naturales inmanente a lasfunciones generativas para el uso del matrimonio en los solos periodos infecundos y así regular lanatalidad sin ofender los principios morales [...]. La encíclica provoca un fuerte impacto y nofaltan las críticas también en los ambientes católicos.
Pablo VI se da cuenta de los cambios de valores y de los cambios culturales que se dan en lasociedad contemporánea y considera correcta una educación sexual moralmente dirigida. De aquíla importancia de una seria educación a la conyugalidad... Precisamente la consciencia de lastransformaciones del tiempo induce al Papa a tomar una clara posición, explicando lo importanteque es poner en marcha una sana educación de los hijos.
Las tomas de distancia de la cultura laicista hacia la Humanae Vitae, no impiden al pontífice volvermás veces y sostener el valor divino del matrimonio, su inviolabilidad y su papel educador. En 1973, instituye el Comité para la familia. La Iglesia, por tanto, interviene con decisión y sabetomar posición.
A pesar de la nueva dirección que mira a una más consciente educación sexual y a los valores delmatrimonio cristiano, permanece la apelación al esfuerzo personal. Es significativa estaintervención:
36 Cavallera, Op. cit., pp.16-23.
37 El Concilio Vaticano II ha desplazado el acento sobre la finalidad del matrimonio desde la procreación al amor de los cónyuges:: "La alianza matrimonial, por la que el varón y la mujer constituyen entre sí un consorcio de toda la vida, ordenado por su misma índole natural al bien de los cónyuges y a la generación y educación de la prole, fue elevada por Cristo Nuestro Señor a la dignidad de sacramento entre bautizados"(Catecismo de la Iglesia Católica 1601, CIC canon 1055, § 1).
Después de la Exhortación apostólica Familiaris consortio de 1981, una especie de summa delpensamiento pontificio sobre el argumento, que recoge las proposiciones del Sínodo sobre la Familia, él instituye el Pontificio Consejo para la Familia42 y más tarde el Instituto Juan Pablo II para la familia43 con la finalidad de profundizar las temáticas concernientes a las varias problemáticas de la persona, del matrimonio y de la familia en los varios ámbitos teológicos, moral y jurídico, y responder asía los desafíos de las nuevas ideologías.
En 1983 la asamblea sinodal promulga la Carta de los derechos de la familia. En 1987 el Papa Juan Pablo II proclama el Año mariano y al mismo tiempo promulga la encíclica Redemptoris Mater (25 marzo). El Año mariano se cierra con la Carta Apostólica Mulieris Dignitatem (15 agosto 1988), en la que se afirma la igual dignidad y complementariedad del hombre y de la mujer en el plan de Dios, y vuelve a afirmar la presencia activa de la mujer en la sociedad de la que subraya la mayor fuerza y fidelidad.
Documento fundamental y de algún modo conclusivo del pontificado de Wojtyla es la Carta a las familias(2 de febrero de 1994) cuyo contenido trataremos más adelante.
Papa Benedicto XVI: Deus caritas est.
En uno de los primeros discursos corno pontífice, en el Congreso diocesano sobre la familia,Benedicto XVI, que afirma inspirarse en la Familiaris Consortio, subraya que el empeñomisionero de la Iglesia, se concentra sobretodo en la familia, visto que matrimonio y familia, no son una "construcción sociológica casual fruto de particulares históricas y económicas". Y cuando la Biblia dice que Dios creó al hombre a su imagen y semejanza, significa que Dios es amor. "Por eso lavocación al amor es lo que hace del hombre la auténtica imagen de Dios: él llega a ser similar a Dios en la medida en que se convierte en alguien que ama". Al tema del amor le dedica gran parte de la encíclica Deus caritas est (25 diciembre 2005). Es importante su presencia y sus discursos en el V Encuentro Mundial de las Familias en Valencia (8-9 julio 2006).
Con ese espíritu Benedicto XVI conduce al pueblo de los creyentes, en el nuevo milenio, a repensar la Verdad a la luz de las relaciones interpersonales firmes e iluminadas.
42 El Pontificio Consejo para la Familia fue instituido por Juan Pablo II con el Motu Proprio "Familia a Deo Instituto," en el 1981, sustituyendo el Comité para la Familia que había sido creado por Pablo VI en el 1973.
43 El "Pontificio Instituto para el Estudio del Matrimonio" fue fundado en el 1981 por el S. Padre Juan Pablo II para ofrecer a toda la Iglesia una contribución de reflexión filosófica, teológica y pastoral, sobre la verdad acerca de la persona, el matrimonio y la familia, con la ayuda de las diferentes ciencias humanas.
TERCERA PARTE
DEUS CARITAS EST
Después de haber expuesto las "tinieblas" que rodean a la sexualidad, al matrimonio y a la familia en el mundo actual, consideramos ahora "la luz radiante" que nos viene de la Revelación, a travésde la Tradición y del Magisterio. El Esplendor de la Verdad con sus frutos de comunión y depaz disipa las tinieblas del engaño que demuestra su falsedad en los frutos de muerte que trae.
DIOS SE REVELA A SÍ MISMO COMO EL ESPOSO Deus Caritas est: Benedicto XVI"
En años anteriores hemos expuesto el Magisterio del Papa Pablo VI y sobre todo del Papa JuanPablo II sobre la sexualidad (Teología del cuerpo), el matrimonio, la Familia: este añoexpondremos algunos aspectos de la Encíclica "Deus Caritas est" del Papa Benedicto XVI que encontinuidad con el magisterio de sus predecesores nos ilumina con profundidad el gran Misteriodel Amor de Dios.
LA NOVEDAD DE LA FE BÍBLICA
9. En las culturas que circundan el mundo de la Biblia, la imagen de dios y de los dioses, al fin yal cabo, queda poco clara y es contradictoria en sí misma.
En el camino de la fe bíblica, por el contrario, resulta cada vez más claro y unívoco lo que seresume en las palabras de la oración fundamental de Israel, la Shema: « Escucha, Israel: El Señor,nuestro Dios, es solamente uno » (Dt 6, 4). Existe un solo Dios, que es el Creador del cielo y de la tierra y, por tanto, también es el Dios de todos los hombres.
En esta puntualización hay dos elementos singulares: que realmente todos los otros dioses no son Dios y que toda la realidad en la que vivimos se remite a Dios, es creación suya. Ciertamente, laidea de una creación existe también en otros lugares, pero sólo aquí queda absolutamente claro que no se trata de un dios cualquiera, sino que el único Dios verdadero, Él mismo, es el autor de toda la realidad; ésta proviene del poder de su Palabra creadora. Lo cual significa que estimaa esta criatura, precisamente porque ha sido Él quien la ha querido, quien la ha « hecho ». Y así se pone de manifiesto el segundo elemento importante: este Dios ama al hombre. La potencia divina a la cual Aristóteles, en la cumbre de la filosofía griega, trató de llegar a través de la reflexión, es ciertamente objeto de deseo y amor por parte de todo ser —como realidad amada, esta divinidad mueve el mundo —, pero ella misma no necesita nada y no ama, sólo es amada. El Dios único en el que cree Israel, sin embargo, ama personalmente. Su amor, además, es un amor de predilección: entre todos los pueblos, Él escoge a Israel y lo ama, aunque con el objeto de salvar precisamente de este modo a toda la humanidad. Él ama, y este amor suyo puede ser calificado sin duda como eros que, no obstante, es también totalmente ágape.
Pasión de Dios por su pueblo
Los profetas Oseas y Ezequiel, sobre todo, han descrito esta pasión de Dios por su pueblo conimágenes eróticas audaces. La relación de Dios con Israel es ilustrada con la metáfora delnoviazgo y del matrimonio"; por consiguiente, la idolatría es adulterio y prostitución. Con esose alude concretamente —como hemos visto— a los ritos de la fertilidad con su abuso del eros,pero al mismo tiempo se describe la relación de fidelidad entre Israel y su Dios. La historia deamor de Dios con Israel consiste, en el fondo, en que Él le da la Torah, es decir, abre los ojos deIsrael sobre la verdadera naturaleza del hombre y le indica el camino del verdaderohumanismo46. Esta historia consiste en que el hombre, viviendo en fidelidad al único Dios, seexperimenta a sí mismo como quien es amado por Dios y descubre la alegría en la verdad y en
44 Benedicto XVI, Deus caritas est, Ed. Vaticana, 2006.
45 "Porque como se casa joven con doncella, se casará contigo tu edificador, y con gozo de esposo por su novia se gozará por ti tu Dios" (Is 62,5).
6 Cuando Dios se manifestó en el Monte Sinaí, dice un Midrash, a este pueblo rescatado de la esclavitud: los sordos oyeron la palabra de Dios, los ciegos vieron la gloria de Dios, los cojos comenzaron a caminar. Dios comienza a hacer de este pueblo, la Esposa que reviste de su justicia y santidad (cfr... Moisés contado por los sabios). la justicia; la alegría en Dios que se convierte en su felicidad esencial: « ¿No te tengo a ti en elcielo?; y contigo, ¿qué me importa la tierra?... Para mí lo bueno es estar junto a Dios » (Sal 73[72], 25. 28).
El eros de Dios para con el hombre está unido totalmente al ágape
El eros de Dios para con el hombre, como hemos dicho, es a la vez agapé. No sólo porque se dadel todo gratuitamente, sin ningún mérito anterior, sino también porque es amor que perdona.
Oseas, de modo particular, nos muestra la dimensión del agapé en el amor de Dios por el hombre,que va mucho más allá de la gratuidad. Israel ha cometido « adulterio », ha roto la Alianza;Dios debería juzgarlo y repudiarlo.
Pero precisamente en esto se revela que Dios es Dios y no hombre: « ¿Cómo voy a dejarte,Efraím, cómo entregarte, Israel?... Se me revuelve el corazón, se me conmueven las entrañas. Nocederé al ardor de mi cólera, no volveré a destruir a Efraím; que yo soy Dios y no hombre, santo en medio de ti » (Os 11, 8-9). El amor apasionado de Dios por su pueblo, por el hombre, es a la vez un amor que perdona. Un amor tan grande que pone a Dios contra sí mismo, su amor contra su justicia. El cristiano ve perfilarse ya en esto, veladamente, el misterio de la Cruz: Dios ama tanto al hombre que, haciéndose hombre él mismo, lo acompaña incluso en la muerte y, de este modo, reconcilia la justicia y el amor.
Dios es en absoluto la fuente originaria de cada ser; pero este principio creativo de todas las cosas—el Logos, la razón primordial— es al mismo tiempo un amante con toda la pasión de unverdadero amor. Así, el eros es sumamente ennoblecido, pero también tan purificado que se fundecon el agapé. Por eso podemos comprender que la recepción del Cantar de los Cantares en elcanon de la Sagrada Escritura se haya justificado muy pronto, porque el sentido de sus cantos deamor describen en el fondo la relación de Dios con el hombre y del hombre con Dios. De estemodo, tanto en la literatura cristiana como en la judía, el Cantar de los Cantares se ha convertido en una fuente de conocimiento y de experiencia mística, en la cual se expresa la esencia de la febíblica: se da ciertamente una unificación del hombre con Dios —sueño originario del hombre—,pero esta unificación no es un fundirse juntos, un hundirse en el océano anónimo del Divino47; es una unidad que crea amor, en la que ambos —Dios y el hombre— siguen siendo ellos mismos" y,sin embargo, se convierten en una sola cosa: « El que se une al Señor, es un espíritu con él », dicesan Pablo (1 Co 6, 17).
La boda de Cristo con la humanidad: sobre la Cruz
Este actuar de Dios adquiere ahora su forma dramática, puesto que, en Jesucristo, el propio Dios vatras la « oveja perdida », la humanidad doliente y extraviada. Cuando Jesús habla en sus parábolasdel pastor que va tras la oveja descarriada, de la mujer que busca el dracma, del padre que sale al encuentro del hijo pródigo y lo abraza, no se trata sólo de meras palabras, sino que es la explicación de su propio ser y actuar. En su muerte en la cruz se realiza ese ponerse Dios contra sí mismo, al entregarse para dar nueva vida al hombre y salvarlo: esto es amor en su forma más radical.
En esta unión de la persona con Dios gracias al don del Espíritu Santo, la persona permanece siempre ella misma, pero profundamente unida a Dios. Ésta es una de las características que diferencian el judeo-cristianismo de las religiones orientales, que a pesar de que admiten los ciclos de purificación identifican el "paraíso" o "nirvana" con el perderse y desaparecer de la persona en Dios. También en Occidente el inmanentismo está en la base de muchas ideologías también modernas, como la filosofía de Hegel e incluso en el fondo en el comunismo.
El Espíritu Santo, siendo aquella persona divina que crea la unidad y hace desbordar la vida divina, es para la Iglesia el "principio que une y al mismo tiempo distingue (más exactamente todavía: que distingue para unir y que une para distinguir). Precisamente así el Espíritu es el principio de los diversos dones y de las diversas vocaciones de los distintos miembros del único cuerpo, cuya unión personal directa a Dios él garantiza. Tal acción del Espíritu es indispensable para el ser del cristiano y de la iglesia. El Espíritu Santo es el garante del hecho de que la unidad del pueblo de Dios no realiza de manera uniforme, sino en la multiplicidad de las más variadas formas y dones (carismas), y además el garante del hecho que tal multiplicidad de lo distinto forma una unidad gracias al recíproco intercambio. Pues ésta es justamente, como hemos visto, la unidad trinitaria: no la uniformidad, ni una adición ni una suma de los diferentes, sino la convivencia y la solidaridad de personas distintas. La communio se verifica como "unidad perijorética" (cf pp. 29,32), es decir como una comunión en la cual cada uno participa de la peculiaridad del otro,
La fede nel Dio trinitario,GIsbert Greshake, Ed. Queriniana, Brescia 2000, p.94.
mirada en el costado traspasado de Cristo, del que habla Juan (cf. 19, 37), ayuda a comprender lo que ha sido el punto de partida de esta Carta encíclica: « Dios es amor » (1 Jn 4, 8). Es allí, en la cruz, donde puede contemplarse esta verdad. Y A PARTIR DE ALLÍ SE DEBE DEFINIR AHORA QUÉ ES EL AMOR. Y, desde esa mirada, el cristiano encuentra la orientación de su vivir y de su amar.
La Eucaristía nos adentra en el acto oblativo de Jesús. No recibimos solamente de modo pasivo el Logosencarnado, sino que nos implicamos en la dinámica de su entrega. La imagen de las nupcias entre Dios e Israel se hace realidad de un modo antes inconcebible: lo que antes era estar frente a Dios, se transforma ahora en unión por la participación en la entrega de Jesús, en su cuerpo y su sangre (Deus Caritas est 12-13).
"Eros" y "agape" – diferencia y unidad
Como vemos, el Papa BenedictoXVI arroja claramente luz sobre el amor de Dios manifestado en lahistoria de la salvación del pueblo de Israel, y definitivamente en su Hijo Jesucristo, comofundamento del amor humano. Veamos ahora más específicamente qué dice de los doscomponentes del amor: eros y ágape
El término « amor » se ha convertido hoy en una de las palabras más utilizadas y también de las que más se abusa, a la cual damos acepciones totalmente diferentes... En primer lugar,recordemos el vasto campo semántico de la palabra « amor »: se habla de amor a la patria, de amor por la profesión o el trabajo, de amor entre amigos, entre padres e hijos, entre hermanos yfamiliares, del amor al prójimo y del amor a Dios.
Sin embargo, en toda esta multiplicidad de significados destaca, como arquetipo por excelencia,el amor entre el hombre y la mujer, en el cual intervienen inseparablemente el cuerpo y el alma,y en el que se le abre al ser humano una promesa de felicidad que parece irresistible, encomparación del cual palidecen, a primera vista, todos los demás tipos de amor. Se plantea,entonces, la pregunta: todas estas formas de amor ¿se unifican al final, de algún modo, a pesar de la diversidad de sus manifestaciones, siendo en último término uno solo, o se trata más bien de una misma palabra que utilizamos para indicar realidades totalmente diferentes?
3. Los antiguos griegos dieron el nombre de eros al amor entre hombre y mujer, que no nace delpensamiento o la voluntad, sino que en cierto sentido se impone al ser humano.
Digamos de antemano que el Antiguo Testamento griego usa sólo dos veces la palabra eros,mientras que el Nuevo Testamento nunca la emplea: de los tres términos griegos relativos al amor —eros, philia (amor de amistad) y agapé—, los escritos neotestamentarios prefieren este último(agape), que en el lenguaje griego estaba dejado de lado. El amor de amistad (philia), a su vez, esaceptado y profundizado en el Evangelio de Juan para expresar la relación entre Jesús y susdiscípulos.
Este relegar la palabra eros, junto con la nueva concepción del amor que se expresa con lapalabra agapé, denota sin duda algo esencial en la novedad del cristianismo, precisamente en sumodo de entender el amor.
Los griegos —sin duda análogamente a otras culturas— consideraban el eros ante todo como unarrebato, una « locura divina » que prevalece sobre la razón, que arranca al hombre de lalimitación de su existencia y, en este quedar estremecido por una potencia divina, le haceexperimentar la dicha más alta. De este modo, todas las demás potencias entre cielo y tierraparecen de segunda importancia: « Omnia vincit amor », dice Virgilio en las Bucólicas —el amor todo lo vence—, y añade: « et nos cedamus amori », rindámonos también nosotros al amor. En el campo de las religiones, esta actitud se ha plasmado en los cultos de la fertilidad, entre los que se encuentra laprostitución «sagrada» que se daba en muchos templos. El eros se celebraba, pues, como fuerza divina, como comunión con la divinidad.
A esta forma de religión que, como una fuerte tentación, contrasta con la fe en el único Dios, elAntiguo Testamento se opuso con máxima firmeza, combatiéndola como perversión de lareligiosidad.
No obstante, en modo alguno rechazó con ello el eros como tal, sino que declaró guerra a sudesviación destructora, puesto que la falsa divinización del eros que se produce en esos casos lo privade su dignidad divina y lo deshumaniza... En efecto, las prostitutas que en el templo debían proporcionar el arrobamiento de lo divino, no son tratadas como seres humanos y personas, sino que sirven sólo como instrumentos para suscitar la « locura divina »: en realidad, no son diosas, sino personas humanas de las que se abusa. Por eso, el eros ebrio e indisciplinado no es elevación, « éxtasis » hacia lo divino, sino caída, degradación del hombre. Resulta así evidente que el eros necesitadisciplina y purificación para dar al hombre, no el placer de un instante, sino un modo de hacerle pregustar en cierta manera lo más alto de su existencia, esa felicidad a la que tiende todo nuestro ser.
5. En estas rápidas consideraciones sobre el concepto de eros en la historia y en la actualidadsobresalen claramente dos aspectos. Ante todo, que entre el amor y lo divino existe una ciertarelación: el amor promete infinidad, eternidad, una realidad más grande y completamentedistinta de nuestra existencia cotidiana. Pero, al mismo tiempo, se constata que el camino para lograr esta meta no consiste simplemente en dejarse dominar por el instinto. Hace falta unapurificación y maduración, que incluyen también la renuncia. Esto no es rechazar el eros ni«envenenarlo»49, sino sanearlo para que alcance su verdadera grandeza.
Esto depende ante todo de la constitución del ser humano, que está compuesto de cuerpo y alma. El hombre es realmente él mismo cuando cuerpo y alma forman una unidad íntima; el desafío del erospuede considerarse superado cuando se logra esta unificación.
Si el hombre pretendiera ser sólo espíritu y quisiera rechazar la carne como si fuera unaherencia meramente animal, espíritu y cuerpo perderían su dignidad. Si, por el contrario,repudia el espíritu y por tanto considera la materia, el cuerpo, como una realidad exclusiva,malogra igualmente su grandeza.
Pero ni la carne ni el espíritu aman: es el hombre, la persona, la que ama como criatura unitaria, de la cual forman parte el cuerpo y el alma. Sólo cuando ambos se funden verdaderamente en unaunidad, el hombre es plenamente él mismo. Únicamente de este modo el amor —el eros— puedemadurar hasta su verdadera grandeza.
En realidad, nos encontramos ante una degradación del cuerpo humano, que ya no estáintegrado en el conjunto de la libertad de nuestra existencia, ni es expresión viva de la totalidad de nuestro ser, sino que es relegado a lo puramente biológico.
La aparente exaltación del cuerpo puede convertirse muy pronto en odio a la corporeidad. La fecristiana, por el contrario, ha considerado siempre al hombre como uno en cuerpo y alma, en el cualespíritu y materia se compenetran recíprocamente, adquiriendo ambos, precisamente así, una nuevanobleza. Ciertamente, el eros quiere remontamos « en éxtasis » hacia lo Divino, llevamos más allá de nosotros mismos, pero precisamente por eso necesita seguir un camino de ascesis, renuncia,purificación y recuperación.
El desarrollo del amor hacia sus más altas cotas y su más íntima pureza conlleva el que ahora aspire a lo definitivo, y esto en un doble sentido: en cuanto implica exclusividad —"sólo estapersona"—, y en el sentido del «para siempre». El amor engloba la existencia entera y en todas sus dimensiones, incluido también el tiempo. No podría ser de otra manera, puesto que su promesa apunta a lo definitivo: el amor tiende a la eternidad. Ciertamente, el amor es «éxtasis», pero no en el sentido de arrebato momentáneo, sino como camino permanente, como un salir del yo cerrado ensí mismo hacia su liberación en la entrega de sí y, precisamente de este modo, hacia el reencuentro consigo mismo, más aún, hacia el descubrimiento de Dios: «El que pretenda guardarse su vida, la perderá; y el que la pierda, la recobrará» (Lc 17, 33), dice Jesús en una sentencia suya que, con algunas variantes, se repite en los Evangelios (cf. Mt 10, 39; 16, 25; Mc 8, 35; Lc 9, 24; Jn 12, 25). Con estas palabras, Jesús describe su propio itinerario, que a través de la cruz lo lleva a la resurrección: el camino del grano de trigo que cae en tierra y muere, dando así fruto abundante. Describe también, partiendo de su sacrificio personal y del amor que en éste llega a su plenitud, la esencia del amor y de la existencia humana en general.
En la crítica al cristianismo que se desarrolló con creciente radicalidad a partir del iluminismo, esta novedad fue valorada de modo absolutamente negativo. El cristianismo, según Friedrich Nietzsche, habría dado a beber del veneno del eros, que, aunque no muera, abría marcado la salida para degenerar en vicio. Con esto el filósofo alemán explicaba una percepción muy difusa: la Iglesia con sus mandamientos y prohibiciones, ¿no nos vuelve quizás amarga la cosa más bella de la vida?
Nos hemos encontrado con las dos palabras fundamentales: eros como término para el amor «mundano » y agapé como denominación del amor fundado en la fe y plasmado por ella. Confrecuencia, ambas se contraponen, una como amor « ascendente », y como amor « descendente » la otra. Hay otras clasificaciones afines, como por ejemplo, la distinción entre amor posesivo y amor oblativo (amor concupiscentiae – amor benevolentiae), al que a veces se añade también el amor que tiende al propio provecho.
En realidad, eros y agapé —amor ascendente y amor descendente— nunca llegan a separarsecompletamente. Cuanto más encuentran ambos, aunque en diversa medida, la justa unidad en la única realidad del amor, tanto mejor se realiza la verdadera esencia del amor en general. Porotro lado, el hombre tampoco puede vivir exclusivamente del amor oblativo, descendente. Nopuede dar únicamente y siempre, también debe recibir. Quien quiere dar amor, debe a su vezrecibirlo como don. Es cierto —como nos dice el Señor— que el hombre puede convertirse en fuente de la que manan ríos de agua viva (cf. in 7, 37-38). No obstante, para llegar a ser una fuente así, él mismo ha de beber siempre de nuevo de la primera y originaria fuente que es Jesucristo, de cuyo corazón traspasado brota el amor de Dios (cf. in 19, 34)50
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EL MATRIMONIO CRISTIANO
A la luz de la Revelación de Dios Amor en Jesucristo, amor caracterizado en Dios mismo por el eros y el agape, se ilumina el gran Misterio del que habla S. Pablo, del matrimonio cristiano, imagen del amor de Cristo por su Iglesia.
Desde el Concilio Vaticano II, gracias a la vuelta a las fuentes de la Escritura y de los Padres ytambién al impulso dado por el Papa Juan Pablo II, se ha verificado un redescubrimiento de laantropología cristiana, de la persona creada a imagen de Dios, llamada a la comunión.
Veamos de forma sintética algunas conclusiones del estudio "sobre la persona creada a imagen de Dios" de la Comisión Teológica Internacional'', instituida por el Papa Pablo VI para profundizar en la comprensión de la Revelación52, profundizaciones que subyacen en los últimos documentos del Magisterio.
La persona53 humana creada a imagen de Dios
50 "¿Eros y ágape, un aut-aut? La gran tradición católica no ha contrapuesto nunca la forma del amor que busca la plena afirmación de sí (eros), a la que para afirmar al otro, acepta la plena renuncia de sí (ágape). Por tanto, la contraposición entre eros y ágape no .pertenece a la sensibilidad católica. Esto tiene su origen en la "theologia crucis" luterana. El modelo supremo del amor, el Crucificado, demostraría, según Lutero, que para amar es necesario renegar de sí mismo hasta la alienación total. El peso dado a la cruz termina por poner totalmente en la sombra a la resurrección. Sin embargo, para conocer el rostro auténtico del amor se necesita mirar al resucitado... En esta elección, capaz de sacrificio, el hombre se juega el hacer verdadero el amor de sí mismo en el amor del propio bien" (Angelo Scola, Uomo e donna. .11 caso serio dell'amore,Marietti 2004, V ed., pp.70-71).
51 El Papa Pablo VI, el 11 de abril de 1969, instituyó junto a la Congregación para la Doctrina de la Fe una Comisión Teológica Internacional, y aprobó ad experimentum el Estatuto, y designó sucesivamente a los miembros. La competencia de la Comisión era la de ayudar a la Santa Sede y principalmente a la Congregación para la Doctrina de la Fe para examinar las cuestiones doctrinales de mayor importancia. Los resultados de los estudios son sometidos al Santo Padre y consignados para su oportuna utilización a la Congregación para la Doctrina de la Fe. Con el Motu Proprio "Tredecim anni iam", del 6 agosto 1982, el Papa Juan Pablo II promulgó los estatutos definitivos de la Comisión
52 Comisión Teológica Internacional, "Communione e servizio", Roma 2002. La Comisión Teológica Internacional ofrece la siguiente meditación teológica sobre la doctrina de la imago Dei para orientar la reflexión sobre el significado de la existencia humana frente a tales desafíos. Al mismo tiempo deseamos presentar la visión positiva de la persona humana en el interior del universo que se nos presenta por este tema doctrinal recientemente descubierto.
El término "persona" no es ya considerado en clave filosófica (para los filósofos griegos, el término persona indicaba el papel, la máscara en el teatro), sino en referencia al Misterio de la Trinidad: el Misterio de Dios Uno en tres personas iguales y distintas, en relación entre ellas: el Padre que general Hijo, el Hijo que ama al Padre, el amor entre el Padre y el Hijo es también una persona, el Espíritu Santo (la última Persona que fue reconocida divina en la Iglesia). La dignidad de cada persona que viene al mundo, más allá de toda diferencia cultural, social, económica, de sí mismo, sea normal en el físico sea disminuido en alguna facultad, deriva su dignidad de haber sido pensada, amada y creada por Dios como persona individual, única, irreducible, no instrumentalizable, llamada a una relación de amor (comunión) con Dios, consigo mismo, con el prójimo y con lo creado.
El Dios uno y trino ha revelado su proyecto de coparticipación de la comunión de la vidatrinitaria con personas creadas u su imagen."
Más bien, es por esta comunión trinitaria que las personas humanas son creadas a imagen deDios. Es propiamente sobre esta semejanza radical al Dios Uno y Trino que se funda laposibilidad de una comunión de seres creados con las personas increadas de la SantísimaTrinidad".
Creados a imagen de Dios, los seres humanos son por naturaleza corpóreos y espirituales, hombres y mujeres hechos los unos por los otros, personas orientadas hacia la comunión con Dios y recíproca.
Cuerpo y alma.
El hecho de que la corporeidad sea algo esencial a la identidad de la persona, es un conceptofundamental, aunque no tematizado explícitamente, en el testimonio de la Revelación cristiana. La antropología bíblica excluye el dualismo mente-cuerpo.
Al hombre se le considera en su entereza... La antropología presupone claramente la unidad delhombre y comprende como la corporeidad sea esencial a la identidad personal.
En los dogmas centrales de la fe cristiana56 se sobreentiende que el cuerpo forma parte intrínseca de la persona humana y participa pues en su creación a imagen de Dios. La doctrina cristiana de la creación excluye completamente un dualismo metafísico o cósmico, ya que enseña como en el universo todo, lo espiritual y lo material, haya sido creado por Dios y emane pues del Bien perfecto.
Cristo [...] revela plenamente el hombre al hombre y le da a conocer su altísima vocación (GS, n.22).
A la luz de este texto, se comprende como la Iglesia enseña constantemente, también yendo contracorriente, que las relaciones sexuales, que implican a todas las dimensiones de la persona (alma y cuerpo) tengan su significado solamente en la relación conyugal.
54A partir del comienzo de la edad moderna se cree - ¡en caso de que se crea! – en un Dios imaginado como "unipersonal" en el "Padre celeste", en un "Ser Supremo", en una "Mónada" divina "mitigante y que se mueve por encima de todo" (=es decir, en un Ser supremo "solitario" último, simple, cerrado en sí mismo y autosuficiente). Ni si quiera tantos cristianos comprometidos son una excepción al respecto corno, justo piensa ellos, Karl Rahner dijo: "Se puede sospechar que, por el catecismo de la mente y del corazón (a diferencia del catecismo impreso) la representación de la encarnación por parte del cristiano no debería mudar, en el caso de que no fuera la Trinidad. Dios entonces se habría hecho hombre como (la única) persona". De manera análoga a esta observación del teólogo dogmático Rahner he escuchado año atrás a un teólogo moralista (de quien no recuerdo el nombre) afirmar que en casi todos los libros de teología moral actuales podríamos tranquilamente sustituir el nombre de "Dios" por el nombre "Allah", sin que por esto las normas de comportamiento y las argumentaciones aquí expuestas deban cambiar" (Gisbert Greshake, La fede nel Dio trinitario", Ed. Queriniana, Brescia 2000, pp.6-7.
Es ésta un segundo descubrimiento de la teología conciliar: el hombre creado a imagen de Dios. Mientras que antes del Concilio se identificaba la imagen de Dios, en el elemento espiritual, racional del hombre, con el Concilio se acentúa esta imagen y semejanza con Dios del hombre creado por Dios como varón y mujer, llamado a la comunión. Como respuesta a la soledad del hombre, para que uniéndose a su mujer, el hombre encontrase una ayuda adecuada a sí mismo, y los dos pudieran formar una sola carne, en analogía a las personas divinas. Tal unión que tiene como fruto el hijo aparece hoy como la imagen más visible y significativa de Dios como Trinidad de personas.
56 "En el contexto de la doctrina de la Encarnación, también el cuerpo es visto como parte intrínseca de la persona. El Evangelio de Juan afirma que"el Verbo se hizo carne (sarx), para subrayar, en contraposición al docetismo, que Jesús tenía un cuerpo físico real y no un cuerpo-fantasma. Además Jesús nos redime a través de cada uno de los actos por Él realizados en su cuerpo. Su cuerpo ofrecido por nosotros y su Sangre derramada por nosotros significan el don de su Persona para nuestra salvación. La obra redentora de Cristo se cumple en la Iglesia, su cuerpo místico, y hace visibley tangible mediante los sacramentos. Los efectos de los sacramentos, en cuanto que son principalmente espirituales, se realizan a través de signos materiales perceptibles, que pueden ser recibidos solo en y con el cuerpo. Esto demuestra que no solo la mente del hombre es redimida, sino también su cuerpo. El cuerpo se transforma en templo del Espíritu Santo. En fin, que el cuerpo sea parte esencial de la persona humana está implícito en la doctrina de resurrección del cuerpo al final de los tiempos, que permite comprender que el hombre existe en la eternidad como persona física yespiritual completa (Ibid. 29).
La mentalidad contemporánea, difundida por los medios de comunicación (televisión, prensa,costumbre) que concibe el hacer sexo como si se tratara de un juego, es una mentira ya que en la realidad crea consecuencias desastrosas en la persona: heridas profundas, sentimiento de traición y de frustración, odios, venganzas y hasta homicidios o suicidios.
En este sentido los padres están llamados a inculcar a los hijos, desde pequeños, el respeto por el propio cuerpo y el sentido del pudor. Ya hemos hablado de la importancia de la educaciónsexual progresiva de los propios hijos, hoy tanto más urgente en cuanto quede la escuela, de latelevisión, de Internet, y de los compañeros los propios hijos reciben una verdadera y propiadesinformación y deformación sobre la sexualidad.
Los padres están llamados a poner en guardia, sobretodo a las hijas, sobre la manera de vestirse. Las hijas a menudo no tienen todavía conciencia de los peligros en los que incurren vistiendo de manera provocativa: ¡cuantos estupros, violencias sexuales...! Les toca a los padres que conocen lo actuales que son estos peligros, vigilar e inculcar también en la forma de vestir a su propia dignidad y a la de los demás. Un falso buenísimo o una ligereza, o complicidad en este campo, puede tener consecuencias deletéreas en los hijos.
En la educación sexual también los hijos son educados para conocer y controlar sus propiosinstintos, sabiendo distinguir la natural atracción sexual del verdadero amor.
2. Varón y mujer: la diferencia entre varón y mujer un elemento constitutivo de la identidadpersonal.
"En cuanto espíritu encamado, es decir alma que se expresa en el cuerpo y cuerpo informadopor un espíritu inmortal, el hombre es llamado al amor en su totalidad unificada. El amor abarcatambién al cuerpo humano y el cuerpo es hecho partícipe del amor espiritual" (n. 11).
Creados a imagen de Dios, los seres humanos están llamados al amor y a la comunión.
Ya que esta vocación se realiza de modo peculiar en la unión procreativa entre marido y mujer,la diferencia entre varón y mujer es un elemento esencial en la constitución de los eres humanoshechos a imagen de Dios (32).
"Dios creó al hombre a su imagen; a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó" (Gn. 1,27; cf Gn 5, 1-2). Según la Escritura, pues, la imago Dei se manifiesta, desde el comienzo en ladiferencia entre los sexos. Podríamos decir que el ser humano existe solamente como masculino o femenino.
Lejos de ser un aspecto accidental o secundario de la personalidad, este es un elementoconstitutivo de la identidad personal. Todos nosotros tenemos un modo nuestro de existir en elmundo, de ver, de pensar, de sentir, de establecer relaciones de intercambio mutuo con otras personas, que son también ellas definidas por su identidad sexual.
Según el Catecismo de la Iglesia Católica: "La sexualidad abraza todos los aspectos de lapersona humana, en la unidad de su cuerpo y de su alma. Concierne particularmente a laafectividad, a la capacidad de amar y de procrear y, de manera más general, a la aptitud paraestablecer vínculos de comunión con otro" (n 2332). Los papeles atribuidos al uno o al otro sexopueden variar en el tiempo y en el espacio, pero la identidad sexual de la persona no es una construcción cultural o social pertenece a la manera específica en que existe la imago Dei(33)57.
El matrimonio constituye una forma elevada de comunión entre las personas humanas y una de las mejores analogías de la vida trinitaria. Cuando un hombre y una mujer unen su cuerpo y su espíritu en una actitud de total apertura y donación de sí, forman una nueva imagen de Dios.
La imagen de Dios, que se encuentra en la naturaleza de la persona humana en cuanto tal, puede ser realizada de modo especial en la unión entre los seres humanos. Como tal unión se desarrolla vuelta al amor divino, la tradición cristiana siempre ha afirmado el valor de la virginidad y del celibato, que promueven relaciones de casta amistad entre personas humanas y al mismo tiempo son signo de la relación escatológica de todo el amor creado en el amor increado de la Beata Trinidad. Justo a tal propósito el Concilio Vaticano II ha marcado una analogía entre la comunión de las personas divinas entre ellas, y aquella que los seres humanos están llamados a formar sobre la Tierra (cfr. GS, n.24) (Ibid. 38).
Su unión en una sola carne no responde simplemente a una necesidad biológica, sino a laintención del Creador que los conduce a compartir la felicidad de ser hechos a su imagen. La tradición católica habla del matrimonio como de un eminente camino de santidad. "Dios esamor y vive en sí mismo un misterio de comunión personal de amor. Creándola a su imagen[...]Dios inscribe en la humanidad del hombre y de la mujer la vocación, y consiguientemente lacapacidad y la responsabilidad del amor y de la comunión (CEC, n. 2331)58.
La unidad de los dos: la relación entre los cónyuges en la verdad y en el amor
"Lo que determina la identidad íntima de cada hombre y de cada mujer consiste en la capacidad devivir en la verdad y en el amor; más aún, consiste en la necesidad de verdad y de amor comodimensión constitutiva de la vida de la persona.
Tal necesidad de verdad y de amor abre al hombre tanto a Dios como a las criaturas. Lo abre a lasdemás personas, a la vida «en comunión», particularmente al matrimonio y a la familia. En laspalabras del Concilio, la «comunión» de las personas deriva, en cierto modo, del misterio del«Nosotros» trinitario y, por tanto, la «comunión conyugal» se refiere también a este misterio. Lafamilia, que se inicia con el amor del hombre y la mujer, surge radicalmente del misterio de Dios.Esto corresponde a la esencia más íntima del hombre y de la mujer, y a su natural y auténticadignidad de personas." (Carta a las familias n. 8)
Respeto de la alteridad
Hoy se llega a la crisis en el momento en que se constata la diversidad de temperamentos, ladificultad de soportarse cada día, durante toda la vida. Entonces, al final, se decide: separémonos.
A través de estos testimonios" hemos comprendido que en la crisis, soportando el momento en queparece que ya no se puede más, realmente se abren nuevas puertas y una nueva belleza del amor.Una belleza hecha sólo de armonía no es una verdadera belleza; le falta algo; es deficitaria. Laverdadera belleza necesita también el contraste. Lo oscuro y lo luminoso se completan. La uva paramadurar no sólo necesita el sol, sino también la lluvia; no sólo el día, sino también la noche.
Los sacerdotes, tanto los jóvenes como los mayores, debemos aprender la necesidad delsufrimiento, de la crisis. Debemos aguantar, trascender este sufrimiento. Sólo así la vida resulta rica. Para mí el hecho de que el Señor lleve por toda la eternidad los estigmas tiene un valor simbólico. Esos estigmas, expresión de los atroces sufrimientos y de la muerte, son ahora sellos de la victoria de Cristo, de toda la belleza de su victoria y de su amor por nosotros.
Tanto los sacerdotes como las personas casadas debemos aceptar la necesidad de soportar la crisisde la alteridad, del otro, la crisis en que parece que ya no se puede convivir. Los esposos debenaprender juntos a seguir adelante, también por amor a los hijos, y así conocerse de nuevo, amarse de nuevo, con un amor mucho más profundo, mucho más verdadero. Así, en un camino largo, con sus sufrimientos, realmente madura el amor.ó0
58 "
Comunione e servizio", Comisión Teológica Internacional, Roma 2002. "La Comisión Teológica Internacional ofrece la siguiente meditación teológica sobre la doctrina de la imago Dei para orientar la reflexión sobre el significado de la existencia humana frente a tal desafío. Al mismo tiempo deseamos presentar la visión positiva de la persona dentro del universo que se nos presenta por este tema doctrinal recientemente descubierto.59 El Papa Benedicto XVI haciendo referencia a algunos testimonios de parejas de esposos escuchados en el V Congreso mundial de las Familias en Valencia, así respondía a un párroco de la diócesis de Albano, que le preguntaba: "Santidad, en el Catecismo de la Iglesia católica leemos que "el Orden y el matrimonio, están ordenados a la salvación de los demás. (...) Confieren una misión particular en la Iglesia y sirven a la edificación del pueblo de Dios" (n. 1534). Esto nos parece realmente fundamental no sólo para nuestra acción pastoral, sino también para nuestro modo de ser sacerdotes. ¿Qué podemos hacer los sacerdotes para llevar a la práctica pastoral esta afirmación y, según lo que usted mismo ha reafirmado recientemente, cómo podemos comunicar de forma positiva la belleza del matrimonio, de forma que siga siendo atractivo también para los hombres y las mujeres de nuestro tiempo? La gracia sacramental de los esposos, ¿qué puede dar a nuestra vida sacerdotal?" (Discurso a los sacerdotes de las diócesis de Albano, 31 agosto 2006)
60 "Me parece que nosotros, los sacerdotes, podemos también aprender de los esposos, precisamente de sus sufrimientos y de sus sacrificios. A menudo pensamos que sólo el celibato es un sacrificio. Pero, conociendo los sacrificios de las personas casadas —pensemos en sus hijos, en los problemas que surgen, en los temores, en los sufrimientos, en las enfermedades, en la rebelión, y también en los problemas de los primeros años, cuando se pasan casi todas las noches en vela porque los niños lloran— debemos aprender de ellos, de sus sacrificios, nuestro sacrificio."
Y aprender juntos que es hermoso madurar en los sacrificios y así trabajar por la salvación de losdemás.
Usted con razón ha citado el Catecismo, que afirma que el matrimonio es un sacramento para lasalvación de los demás: ante todo para la salvación del otro, del esposo, de la esposa, pero también de los niños, de los hijos y, por último, de toda la comunidad
Para concluir, a mi parecer sigue siendo muy importante que en la carta de san Pablo a los Efesios las bodas de Dios con la humanidad a través de la encarnación del Señor se realicen en la cruz, en la que nace la nueva humanidad, la Iglesia.
El matrimonio cristiano nace precisamente en estas bodas divinas. Como dice san Pablo, es la concretización sacramental de lo que sucede en este gran misterio.
Así debemos seguir redescubriendo siempre este vínculo entre la cruz y la resurrección, entre la cruz y la belleza de la Redención, e insertarnos en este sacramento. Pidamos al Señor que nos ayude a anunciar bien este misterio, a vivir este misterio, a aprender de los esposos cómo lo viven ellos, a ayudarnos a vivir la cruz, de forma que lleguemos también a los momentos de la alegría y de la resurrección (Encuentro del Papa Benedicto XVI con los sacerdotes de la diócesis de Albano, 31 de agosto 2006).
La comunión entre los esposos, siendo don de Dios a pecadores, pasa inevitablemente pormomento de crisis y de aparente fracaso. Éstos son los momentos en el que el amor conyugal,pasado por el crisol de la prueba, de la cruz, puede consolidarse mayormente, si con paciencia y con humildad se respeta la crisis del otro confiando en la fidelidad de Dios que los ha unido".
Traigo aquí una reflexión encontrada en un libro que puede ayudar:
La crisis en la pareja trae a la persona a su soledad ontológica62 , en el sentido de su ser nocomplementario, no dependiente del otro, sino autónomamente fundado en Dios. Hay eventos yresponsabilidades que cada uno debe afrontar él solo, sin poderse apoyar en otros ["cuando semuere, se muere solos"]. Esta soledad ontológica garantiza a la pareja la fecundidad de unarelación que no es fusión en la confusión, apoyo mutuo para la incapacidad de estar de pie a solas, sino continua aportación de nuevas energías que cada uno personalmente introduce en lacomunicación.
Para la pareja creyente, el conflicto puede ser considerado como una llamada al diálogoprofundo con Dios, ese Dios celoso que de vez en cuando reafirma la primacía del diálogo del alma con Su Creador, para asirla a sí y hacerla nuevamente fecunda. Es propiamente el período de falta de comunicación, entendida como un desierto, que hace brotar nuevas fuentes interiores de espiritualidad. En el desierto Oseas ve el lugar por excelencia del susurro de Dios al alma-esposa: "La llevaré al desierto y hablaré a su corazón" (Os 2, 16)".63
61 La Sagrada Familia de Nazaret es el punto de referencia de cada una de las familias. Cada uno de los tres componentes (Jesús, María y José) de la Sagrada Familia está anclado en Dios: Jesús, el Hijo de Dios que ha tomado carne de la Virgen por obra del Espíritu Santo, manifestará a sus padres, a la edad de 12 años, con ocasión de su introducción en el pueblo de Israel, la "bar Mitzvá", después de ser encontrado en el templo discutiendo con los doctores: a la madre que le dice: "Hijo, ¿por qué nos has tratado así? Tu padre y yo te buscábamos angustiados" responde: "¿Por qué me buscabais? ¿No sabíais que debo ocuparme de las cosas de mi Padre?". Y más veces manifestará que su misión es la de cumplir a voluntad del Padre.: nuestra salvación. María desde la Anunciación se encuentra envuelta en un misterio que la supera, y la aceptación del designio de Dios sobre ella y en ella la expondrá a la difamación y a laprueba de las aguas amargas. En toda su vida terrena, será envuelta en el drama de nuestra redención cooperando libremente con el Hijo en nuestra redención: una espada te traspasará el alma. También José, "hombre justo" conforma siempre su obrar a la voluntad divina. Sagrada Familia de Nazaret, "experta en el sufrir": un modelo de familia muy realista, donde el sufrimiento refuerza siempre más la comunión con Dios y el amor de María, José y Jesús.
62 Cfr. Papa Juan Pablo II, Audiencia del 24 de octubre de 1979, § 3
63 Giulia Paola di Nicola e Attilio Danese, Femminile e maschile. Conflicto e reciprocitá", in Renzo Bonetti, La reciprocitá uomo-donna, di, Ed. Cittá Nuova, Roma 2001, pp.226-227 (óptimo libro).
La familia recibe su propia naturaleza comunitaria —más aún, sus características de«comunión»— de aquella comunión fundamental de los esposos que se prolonga en los hijos.«¿Estáis dispuestos a recibir de Dios responsable y amorosamente los hijos, y a educarlos...?»,64les pregunta el celebrante durante el rito del matrimoniol4. La respuesta de los novioscorresponde a la íntima verdad del amor que los une.
Sin embargo, su unidad, en vez de encerrarlos en sí mismos, los abre a una nueva vida, a una nueva persona. Como padres, serán capaces de dar la vida a un ser semejante a ellos, no solamente «hueso de sus huesos y carne de su carne» (cf. Gn 2, 23), sino imagen y semejanza de Dios, esto es, persona.
Al preguntar: «¿Estáis dispuestos?», la Iglesia recuerda a los novios que se hallan ante la potencia creadora de Dios. Están llamados a ser padres, o sea, a cooperar con el Creador dando la vida.Cooperar con Dios llamando a la vida a nuevos seres humanos significa contribuir a latransmisión de aquella imagen y semejanza divina de la que es portador todo «nacido demujer».(Carta a las Familias, 8)
En los años anteriores hemos hablado más veces de la importancia de la relación sexual en el matrimonio, a través de la cual los cónyuges se manifiestan la total entrega del uno al otro, sefortifica su unión por el don del Espíritu Santo que actúa en el matrimonio, y se permaneceabiertos al don de una nueva vida que Dios quiera donar.6' Retomo brevemente una parte de lacatequesis de Kiko en el Shemá:
Muchas parejas no
funcionan porque no hacen bien el acto sexual.Una cosa que hemos visto es que muchas parejas no funcionan bien porque no hacen el acto sexual en conformidad con la voluntad de Dios. Esto es fuente de muchísimos sufrimientos e insatisfacciones de todo tipo: sexuales, afectivas, etc.
Hay un misterio en la naturaleza. Como veis en la Escritura, todo lo que concierne la vida, ha de serrodeado de santidad, porque Dios es la vida. En ese sentido, el acto sexual conyugal es algo santo,sagrado. Por eso dice la Iglesia que, de por sí, en el pecado de lujuria no hay materia leve. Con la sexualidad, en efecto, no se puede jugar ni bromear, porque a través del acto sexual se dona la vida, se genera una persona humana. Mediante el acto sexual, vosotros los cónyuges sois colaboradores de la santidad de Dios en el transmitir, en el dar la vida.66
Hoy esto está amenazado gravemente. Destruido el fundamento sacramental del matrimonio, se destruye la familia. Si se destruye el fundamento del sacramento, inmediatamente, la pareja pierde la fuerza, se debilita, ya no está sostenida por la gracia de Jesucristo para superar las dificultades. El otro en efecto siempre es uno que de algún modo te destruye porque es distinto de ti.
Cuidado pues a no caer en ciertos errores graves. Algunas mujeres hacen un chantaje sexual a sus maridos. Le dicen: "Yo me entrego sexualmente a ti si demuestras que me amas siendo como yo quiero. Hoy no has estado particularmente amable conmigo; me has hecho esto y aquello, que sabes que yo no soporto. Hoy, pues, nada. No quiero. Así aprendes". Por otro lado, algunos maridos no tienen ningún respeto a la mujer. Piensan solamente en sí mismos, exigen egoístamente que la mujer esté siempre a su disposición, sin mirar a como se encuentra ella.
64 Para que el matrimonio pueda vivir en la comunión que viene de Dios, es esencial que, según la enseñanza de la iglesia, los esposos en cada acto conyugal estén abiertos al don de la vida, para acoger los hijos que Dios querrá donar a su familia. La iglesia enseña que sólo por motivos graves (salud de la madre, necesidad de distanciar el nacimiento) se pueden tener relaciones que fortifiquen su unión en los periodos infecundos. Está excluido el recurso a losanticonceptivos.
65 La Iglesia admite que por motivos graves se pueden distanciar los nacimientos recurriendo a los periodos no fértiles de la mujer, pero sin recorrer a anticonceptivos (Humanae Vitae, n.16).
66CCC 2335: "Cada uno de los dos sexos es, con una dignidad igual, aunque de manera distinta, imagen del poder y de la ternura de Dios. La unión del hombre y de la mujer en el matrimonio es una manera de imitar en la carne la generosidad y la fecundidad del Creador: "El hombre deja a su padre y a su madre y se une a su mujer, y se hacen una sola carne" (Gn 2,24). De esta unión proceden todas las generaciones humanas (cf. Gn 4,1-2.25-26; 5,1)."
El acto sexual conyugal es un don que Dios os ha dado precisamente para ayudaros en vuestro matrimonio, en vuestra unión espiritual y afectiva, por eso debéis hacerlo. Aquellos de vosotros que, por distintos motivos, pasáis mucho tiempo sin hacer el acto sexual conyugal, ponéis en riesgo vuestro matrimonio, porque no vivís el sacramento como Dios lo ha pensado y querido.
El sacramento del Matrimonio se funda en el bautismo
La sacramentalidad de la familia, en sentido amplio, radica en los sacramentos de la iniciación cristiana. Al ser miembros de Su Cuerpo en virtud del misterio pascual, los bautizados ya no se pertenecen a sí mismos, pertenecen a Cristo...
Por eso el amor de los bautizados casados no solamente es bendecido por Cristo. Es asumido dentro del amor de Cristo por la Iglesia, ya que le pertenece en virtud del bautismo y de la confirmación.
El sacramento del matrimonio añade una participación de dos, los dos, como pareja, a la vida divina que es entregada en cada sacramento "hasta tal punto que el efecto primario e inmediato del matrimonio (res et sacramentum) no es la gracia sobrenatural misma, sino el vínculo conyugal cristiano, una comunión en dos típicamente cristiana, porque representa el misterio de la Encarnación de Cristo y su misterio de Alianza. (Cf. Familiaris Consortio 13)
La Eucaristía, sacramento esponsal67
"La Eucaristía, sacramento de la caridad, muestra una relación particular con el amor entre el hombre y la mujer unidos en matrimonio. Profundizar en esta relación es una necesidad propia de nuestro tiempo. El Papa Juan Pablo II afirmó en numerosas ocasiones el carácter esponsal de la Eucaristía y su relación peculiar con el sacramento del Matrimonio: « La Eucaristía es el sacramento del Esposo, de la Esposa »... La Eucaristía corrobora de manera inagotable la unidad y el amor indisolubles de cada Matrimonio cristiano. En él, por medio del sacramento, el vínculo conyugal se encuentra intrínsecamente ligado a la unidad eucarística entre Cristo esposo y la Iglesia esposa (cf. Ef 5,31-32). En efecto, en la teología paulina, el amor esponsal es signo sacramental del amor de Cristo a su Iglesia, un amor que alcanza su punto culminante en la Cruz, expresión de sus « nupcias » con la humanidad y, al mismo tiempo, origen y centro de la Eucaristía.
El Sacramento de la Reconciliación. El perdón en el matrimonio y en la familia
"El arrepentimiento y perdón mutuo dentro de la familia cristiana que tanta parte tienen en la vida cotidiana, hallan su momento sacramental específico en la Penitencia cristiana68.
La celebración de este sacramento adquiere un significado particular para la vida familiar. En efecto, mientras mediante la fe descubren cómo el pecado contradice no sólo la alianza con Dios, sino también la alianza de los cónyuges y la comunión de la familia, los esposos y todos los miembros de la familia son alentados al encuentro con Dios «rico en misericordia», el cual,infundiendo su amor más fuerte que el pecado, reconstruye y perfecciona la alianza conyugal y la comunión familiar.
LA FAMILIA CRISTIANA La Familia en la Tradición hebrea:
"El Señor pasó salvando nuestras familias"69 se proclama cada año en la Celebración de la Pascua hebrea.
67Benedicto XVI, Exhortación Apostólica Sacramentum Caritatis, Librería Editrice Vaticana, Roma 22 febrero 2007.
68 Respecto a los cónyuges así escribía Pablo VI en la encíclica "Humanae Vitae": "Y si el pecado les sorprendiese todavía, no se desanimen, sino que recurran con humilde perseverancia a la misericordia de Dios, que se concede en el sacramento de la penitencia" (25).
69 "También guardaréis este rito cuando entréis en la tierra que os dará Yahveh, según su promesa. Y cuando os pregunten vuestros hijos: ¿Qué significa para vosotros este rito? Responderéis: Éste es el sacrificio de la Pascua de Yahveh, que pasó de largo por las casas de los israelitas en Egipto cuando hirió a los egipcios y salvó nuestras casas" (Ex 12,25-27).
La Torah impone el rezo del Shemá tres veces al día:
"Escucha , Israel. Yahveh nuestro Dios es el único Yahveh. Amarás a Yahveh tu Dios con todo tucorazón, con toda tu alma y con toda tu fuerza. Queden en tu corazón estas palabras que yo de dictohoy. Se las repetirás a tus hijos, les hablarás de ellas tanto si estás en casa como si vas de viaje, así acostado como levantado; las atarás a tu mano como una señal, y serán como una insignia entre tus ojos; las escribirás en las jambas de tu casa y en tus puertas."(Dt. 6, 4ss)
"La transmisión de los conocimientos de los padres a la prole es el fundamento mismo de lafamilia hebrea y garantía para la continuidad de la identidad hebrea y de la comunidad entera.
La palabra "hijos" en hebreo se traduce con "banim" de cuya misma raíz deriva el sustantivo"bonim" (constructores). Los hijos permiten la construcción de la comunidad y de ellos depende su futuro y es también por este motivo que los hijos son considerados, por el hebraísmo, unprecioso tesoro donado por Dios. La finalidad principal de la educación consiste en transmitir los valores fundamentales universales sobre la base de una sana relación entre padres e hijos.
La Biblia enseña que los padres y los maestros tienen la obligación de guiar a sus propios hijos en ladistinción entre el Bien y el Mal en las diversas esferas de la vida. En ella está escrito que para la educación sana, madre y padre deberían estar de acuerdo sobre conceptos educativos básicos,unidos y coherentes en sus propias acciones.
El Talmud sugiere que, en la educación de los propios hijos, un padre tiene que permitir que "lamano izquierda rechace mientras que la derecha acoja", es decir, el amor (simbolizado por la mano derecha, más fuerte) deba de todas formas siempre seguir a la punición y deba ser empleado mayormente respecto a la severidad.
No es menos relevante de la liturgia sinagogal, para el hebraísmo, la liturgia cotidiana que sedesarrolla entre las paredes domésticas. En Louis Isaac Rabinowitz, es posible leer: "Laconstante insistencia sobre el valor de la familia como unidad social para la propagación de lasvirtudes domesticas y religiosas, además del hecho significativo que la palabra hebrea para elmatrimonio es "qiddushin", es decir santificación; tuvieron el resultado de hacer de la casahebrea el factor más vital en la supervivencia del judaísmo y en la preservación del modo hebreo de vida, mucho más que la sinagoga y la escuela".
Si la relación maestro-discípulo queda absolutamente fundamental en el desarrollo del judaísmo, esnecesario notar cómo las primeras enseñanzas religiosas del vástago sean impartidas en lafamilia por la madre y por el padre, según una larga serie de prescripciones bíblicas"".
Es deber de los padres trasmitir la fe del pueblo elegido sobre todo a través de las liturgiasdomésticas, el Viernes por la tarde en casa celebrando el Quiddush para acoger el Shabbat, elreposo y la liturgia sinagogal en el Shabbat, los alimentos kosher, el estudio de la Torah desdepequeños, la introducción en el pueblo elegido el día de la Bar Mitzvá, el modo de vestir según la Torah, el noviazgo y el matrimonio entre hebreos, la celebración anual de las principales fiestas: delRosh hashanná (Año nuevo), del Yom Kippur durante 8 días, la celebración de la Pascua (ocho días)71, la fiesta de las Tiendas (Sukkot)... A través de los ritos familiares y la participación en las fiestas se transmiten a las nuevas generaciones los contenidos principales de la Revelación de Dios al pueblo elegido'72
70 Rivka Barissever, L'educazione nella famiglia hebraica moderna (tesis de laurea), www.morasha.it/tesi/brsv.
71 "Antes de nada es necesario comprender como la Pascua hebrea es la fiesta con mayor énfasis y significado pedagógico entre los numerosos ritos hebreos. Un particular significado característico de esta celebración es el hecho de evidenciar que ninguna educación impartida por terceros como un maestro puede tomar el lugar de una educación transmitida, a través de un compromiso personal, por el mismo padre. El saber hebreo no es una cuestiónsimplemente teórica o mecánica sino más bien una cuestión práctica que confiere el estilo de vida de un hombre y es por este motivo por lo que no puede ser transmitida únicamente al nivel teórico de escuela. Éste es un mensaje importante que proviene de la celebración de la Pascua que pone en el centro el ambiente familiar y enfatiza el papal educativo parental. Así como cada padre tiene el deber de cumplir su función educativa del mismo modo que la ley hebrea se asegura de que todos los caracteres del hijos se puedan beneficiar de la instrucción parental" (Rivka Barissever, Op. cit., 4.3).
72
Cfr. Rivka Barissever, Op. cit.
También Jesús fue iniciado por José y María, aprendiendo de sus labios la Torah, y participandoen la Sinagoga de Nazaret a las fiestas anuales que celebraban el amor y la fidelidad de Dios por su pueblo.
La Familia Cristiana: Iglesia doméstica
En continuidad con la tradición de la familia hebraica, la familia cristiana ya desde los inicios delcristianismo está llamada a transmitir la fe a las siguientes generaciones. Por eso la familiacristiana, ha sido llamada Iglesia Doméstica:
«Desde que el Concilio Vaticano II le ha dado derecho de ciudadanía, ha sido cada vez másfrecuente hablar de la familia como Iglesia Domestica.
Esta expresión proviene de la tradición de s. Juan Crisóstomo, pero sus raíces son profundamente bíblicas. En efecto, la idea de "casa" (oikos), que es su fuente lejana, ocupa un lugar importante enel Antiguo y Nuevo Testamento. En el Antiguo designa la casa de Dios, su santuario terrestre(Gen. 28, 17-19; Jc. 17, 5), mientras "en el Nuevo Testamento la comunidad cristiana es llamadanaos tou Theou e iokos tou Theou, el santuario terrestre de Israel: Heb. 3, 6; la Pe. 4, 17; la Tim. 3, 15». La idea la retorna también Michel, que escribe: «Las comunidades del cristianismoprimitivo estaban organizadas en familias, en grupos de familias en "casas"»73, se reunían enlas casas para celebrar sus asambleas, que incluían a la familia alargada con los esclavos y losvecinos.
El cabeza de familia tenía un papel específico durante estas asambleas (la Cor. 4, 15; Gal. 4, 9; la Tim. 3, 3), así como las parejas, según la mención de Priscila y Águila en Romanos 16, 3-5. Sin embargo es necesario evitar identificar a la Ecclesia domestica descrita en el Nuevo Testamento, en Pablo y en los Hechos sobretodo, con la familia nuclear, a la que hoy hace referencia el Magisterio, utilizando tal expresión.
Con la expresión kat'oikon ekklesia, s. Pablo probablemente no pretende significar «la casa como Iglesia, sino mas bien la Iglesia local que se reúne en la casa de un cristiano». Ese sentido másamplio queda de todas formas a la base de la tradición sucesiva, que evolucionará hacia un sentidofamiliar más reservado.
S. Juan Crisóstomo es el gran catequeta de la Iglesia doméstica74. Sus homilías prolongan laenseñanza de Clemente de Alejandría, un pionero de la teología patrística de la pareja. Elexhorta a los padres de familia a hacer de su casa una pequeña iglesia, en la cual la Palabra de Diossea meditada y transmitida:
"Volviendo (de la iglesia) a casa, preparamos una doble mesa: una para los alimentos, otrapara la lectura de la Palabra de Dios y que el hombre repita las cosas que han sido dichas en laIglesia; que la mujer aprenda, que los niños escuchen, que a los siervos no se les prive de esta
73 O. Michel, "Oikos, oikia", in GLNT, vol. III, 366.
74 San Juan Crisóstomo se preocupa de acompañar con sus escritos el desarrollo integral de la persona, en sus dimensiones física, intelectual y religiosa. Compara las diversas etapas del crecimiento a otros tantos mares de un inmenso océano: "El primero de estos mares es la infancia" (Homilía 81, 5 sobre el evangelio de san Mateo). En efecto "precisamente en esta primera edad se manifiestan las inclinaciones al vicio y a la virtud". Por eso, la ley de Dios debe imprimirse desde el principio en el alma "como en una tablilla de cera" (Homilía 3, 1 sobre el evangelio de san Juan): de hecho esta es laedad más importante. Debemos tener presente cuán fundamental es que en esta primera etapa de la vida entren realmente en el hombre las grandes orientaciones que dan la perspectiva correcta a la existencia. Por ello, san Juan Crisóstomo recomienda: "Desde la más tierna edad proporcionad a los niños armas espirituales y enseñadles a persignarse la frente con la mano" (Homilía 12, 7 sobre la primera carta a los Corintios). Vienen luego la adolescencia y la juventud: "A la infancia le sigue el mar de la adolescencia, donde los vientos soplan con fuerza..., porque en nosotros crece... la concupiscencia" (Homilía 81, 5 sobre el evangelio de san Mateo). Por último, llegan el noviazgo y el matrimonio: "A la juventud le sucede la edad de la persona madura, en la que sobrevienen los compromisos de familia: es el tiempo de buscar esposa" (ib.). Recuerda los fines del matrimonio, enriqueciéndolos —mediante la alusión a la virtud de la templanza— con una rica trama de relaciones personalizadas. Los esposos bien preparados cortan así el camino al divorcio: todo se desarrolla con alegría y se puede educar a los hijos en la virtud. Cuando nace el primer hijo, este es "como un puente; los tres se convierten en una sola carne, dado que el hijo une las dos partes" (Homilía 12, 5 sobre la carta a los Colosenses) y los tres constituyen "una familia, pequeña Iglesia" (Homilía 20, 6 sobre la carta a los Efesios). (Benedicto XVI, Audiencia general, 19 de septiembre de 2007)
lectura. Haz de tu casa una Iglesia ya que debes dar cuenta de la salvación de tus niños y de tus servidores"75.
A esta responsabilidad del padre corresponde el empeño de todos a vivir según el Espíritu de la Iglesia:
"Todos, también los más pequeños deben sentirse activamente empeñados en buscar el mensaje de la Palabra de Dios y en vivirlo juntos. [...] Haz de tu pequeña casa una iglesia. En efecto, allí donde se encuentra la salmodia, la oración, los cánticos de los profetas, no nos equivocamos si se quiere llamar tal reunión con el nombre de iglesia"76.
S. Juan Crisóstomo añade también algunas virtudes esenciales, que expresan la eclesialidadde la familia: la concordia, la apertura al extranjero y al pobre, la acogida y la hospitalidad. Élpermanece, entre los numerosos Padres de la Iglesia que han hablado de la Iglesia en casa, como una fuente inagotable de espiritualidad familiar.
Pablo VI hizo popular la expresión "familia, Iglesia doméstica". Es su intervención más importante el discurso a los Equipos Notre Dame del 4 de Mayo de 1970, en el cual habló de lamisión de la familia cristiana, verdadera "célula de Iglesia", en donde se viven la ternura, lahospitalidad y la irradiación del Evangelio.
Más adelante, en su Exhortación Apostólica Evangelii Nuntiandi, retorna el tema de la acciónevangelizadora de la familia mencionando un criterio básico, que funda la eclesialidad de lafamilia: «bien ha merecido, en los varios momentos de la historia de la Iglesia, la hermosadefinición de "Iglesia doméstica", ratificada por el Concilio Vaticano II. Esto significa que en cada familia cristiana, se deberían hallar los varios aspectos de la Iglesia entera»77.
La transmisión de la fe a los hijos. La celebración doméstica de las Laudes el Domingo por la mañana
Los hijos son más sensibles a las actitudes de los padres que a sus palabras. Perciben si lospadres viven la fe en el abandono a Dios en los hechos de la vida, ven su actitud frente al dinero, a las enfermedades, a los ancianos, a la muerte, y siendo idealistas vislumbran prontamente si sus palabras expresan la verdad de su vida o si suenan como falsas, en tal caso propenden a rechazar una actitud que consideran farisea.
Para la transmisión de la fe a los hijos es fundamental la celebración doméstica de las Laudes elDomingo por la mañana. Aunque algunos hijos se muestren reacios o no siempre sea posible hacerlas ordenadamente, es fundamental que los padres se muestren firmes e inamovibles siquieren ver después los frutos en la vida de sus propios hijos.
"El Camino Neocatecumenal, en cuanto iniciación cristiana en las diócesis y en las parroquias,enseña hoy a las parejas también a transmitir la fe a los hijos, sobre todo en una celebraciónfamiliar, en una liturgia doméstica.
La familia cristiana, les decimos, tiene tres altares: el primero, la mesa de la santa Eucaristía,donde Cristo ofrece el sacrificio de su vida por nuestra salvación; el segundo, el tálamo nupcial, donde se actúa el sacramento del matrimonio y se da la vida a los nuevos hijos de Dios, tálamo nupcial que hay que tener en gran honor y gloria; el tercer altar es la mesa de la familia, donde ella come unida, bendiciendo al Señor por todos sus dones. Alrededor de esta misma mesa se hace la celebración doméstica, en la cual se pasa la fe a los hijos.
Después de más de treinta años de Camino, uno de los frutos que más consuelan es el ver a lasfamilias reconstruidas convertirse en verdadera "Iglesia doméstica". Estas familias, abiertas a lavida, y por eso normalmente numerosas, cumplen con solvencia la tarea primaria de la familiacristiana de transmitir la fe a sus propios hijos.
Además de la oración de la mañana y de la tarde, de la oración antes de las comidas y además de la participación, junto con los padres en la Eucaristía en la propia comunidad, la transmisión de la fe a
5 San Juan Crisóstomo, Omelie sulla Genesi, 6,2; PG 54,607.
76 ID., Exp. in Ps, 41,2; PG 55,158.
77 Divina somiglianza, Cardenal Marc Ouelet, (Trinitá e famiglia), P.U.Lateranense 2004, pp.59-61.
los hijos se da fundamentalmente, como hemos dicho anteriormente, en una celebración doméstica,que habitualmente se hace en el Día del Señor.
En esta celebración los padres rezan los salmos de las laudes con los hijos, leen las SagradasEscrituras y les preguntan: "¿Qué te dice a ti, para tu vida, esta palabra?" Es impresionante vercómo los hijos aplican la Palabra de Dios a su propia historia concreta. Al final el padre y la madre dicen una palabra como comentario partiendo de su propia experiencia, e invitan a los hijos a rezar por el Papa, por la Iglesia, por aquellos que sufren, etc. Después se reza el Padrenuestro y se dan lapaz; y la celebración se concluye con la bendición de los padres sobre cada uno de los hijos (KikoArgüello, Jubileo de las familias, Roma 2000).
A la celebración doméstica de las laudes dominicales son invitados todos aquellos que viven en la casa: la abuela, los tíos, la mujer del servicio, etc. Los signos son importantísimos para los niños. Se pone un mantel blanco encima de la mesa, una vela gruesa y flores alrededor de la misma.
En la casa se tiene que ver que es Domingo. El Domingo los cristianos no trabajamos: es el "Díadel Señor", un día dedicado al Señor, el día que Jesucristo ha inaugurado con su resurrección, el día memorial del día escatológico del Reino de los Cielos. La comida debe ser especial, no como los demás días. Nos vestimos bien, de fiesta, no como los demás días.
Para los cristianos la mesa es como un altar. Por eso siempre comenzamos las comidasbendiciendo a Dios, haciendo presente el amor que Dios nos tiene a través de los alimentos quenos da. Debéis hacer entender a vuestros hijos que tienen una misión sacerdotal, que son hijos desacerdotes, que pertenecen a un reino de sacerdotes (cf. Ap. 1, 6; 5, 12; 20, 6; 1 Pe. 2, 5) que tienela misión de bendecir al Señor. Debéis enseñar a vuestros hijos por qué hacéis las Laudes:vuestra familia ha sido visitada por el Señor que os está salvando del pecado y de la muerte; nomorimos, porque el Señor ha puesto en nosotros una semilla de resurrección (cf. 1 Pe. 1, 3-5).(Catequesis de Kiko y Carmen en el Shemá sobre el paso de la fe a los hijos)
Cuando los pequeños tengan una edad en que estén quietos los padres empiezan a llevarlos a lacelebración de la Eucaristía en la propia Comunidad, y establemente desde la primera comunión. A la edad de doce o trece años, hechas las catequesis, entran a formar parte de la propiaComunidad. Es fundamental la participación en las fiestas y solemnidades desde pequeños: laSanta Navidad y sobre todo la Vigilia Pascual.
El Padre y la paternidad
Los padres: padre y madre, están llamados a asumir sus papeles. La presencia de los padres enla casa tiene la precedencia también sobre el aspecto económico. A veces la madre quizá tambiénpara huir de su misión trabaja fuera de casa privando a los hijos de su fundamental presencia.Hoy día además se ha creado una confusión de los roles. El padre declina fácilmente suresponsabilidad de educador de los hijos hacia la madre, sobre la cual recae todo el peso de laeducación de los hijos, con repercusiones muy negativas. Los hijos tienen necesidad de las dosfiguras del padre y de la madre.
"Como la experiencia enseña, la ausencia del padre provoca desequilibrios psicológicos ymorales, además de dificultades notables en las relaciones familiares, como también, encircunstancias opuestas, la presencia opresiva del padre, especialmente donde todavía tienevigencia el fenómeno del «machismo», o sea, la superioridad abusiva de las prerrogativasmasculinas que humillan a la mujer e inhiben el desarrollo de sanas relaciones familiares.
Revelando y reviviendo en la tierra la misma paternidad de Dios,(Cf. Ef. 3,15)) el hombre estállamado a garantizar el desarrollo unitario de todos los miembros de la familia. Realizará esta tareamediante una generosa responsabilidad por la vida concebida junto al corazón de la madre, uncompromiso educativo más solícito y compartido con la propia esposa,(cf. GS 52) un trabajoque no disgregue nunca la familia, sino que la promueva en su cohesión y estabilidad, untestimonio de vida cristiana adulta, que introduzca más eficazmente a los hijos en la experienciaviva de Cristo y de la Iglesia" (Familiaris Consortio, 25).
Relación con el padre y renuncia a la omnipotencia"
El niño que entra en la relación con el padre, con el hombre adulto, portador de la norma,experimenta que no es omnipotente, que está vinculado a reglas, a veces penosas, que tiene que respetar. Sin embargo ésta aceptación dolorosa, libera del ansia. Todo psicólogo, y todo educador, conoce bien la característica ansia del niño mimado, al que se le intenta evitar lo más posible la experiencia del límite, de la prohibición, de la regla.
El niño llega a ser cada vez más revoltoso, hasta desafiar incesantemente el mundo de los adultos y de la autoridad. Aparentemente lo hace por descaro y prepotencia. En un nivel más profundo, en realidad, intenta desesperadamente recibir una contención, un arresto, una norma. Tiene necesidad de que le digan: "Esto no lo debes hacer", e intenta por todas las maneras satisfacer la necesidad de una Le?.
La sociedad que continuó después del 68 es la misma que la había precedido, a cuya hipocresíaaquél movimiento, confusamente, intentaba reaccionar", es la sociedad de la ausencia delpadre
81, que no es otra cosa que la de la ausencia de la norma moral, progresivamente sustituida por la multiplicación de los dispositivos judiciales, y de los reglamentos burocráticos. En esta sociedad, la prohibición que el niño espera jamás es clara y francamente impartida: porque no hay ningún padre que la ponga. El ansia del niño crece así hasta alcanzar niveles muy peligrosos82.La educación
Los padres son los primeros y principales educadores de sus hijos y tienen también en este campo una competencia fundamental: son educadores porque son padres.
Ellos comparten su misión educativa con otras personas e instituciones, como la Iglesia y el Estado; eso sin embargo se tiene que dar siempre en la correcta aplicación del principio desubsidiariedad. Esto implica la legitimidad y, más bien, la necesariedad de una ayuda ofrecida alos padres, pero encuentra en su derecho prevalente y en sus efectivas posibilidades su intrínsecoe insormontable límite. El principio de subsidiariedad se pone, por tanto, al servicio del amorde los padres, yendo en ayuda del bien del núcleo familiar.
Las familias, y más concretamente los padres, tienen libre facultad de elegir para sus hijos undeterminado modo de educación religiosa y moral correspondiente a sus propiasconvicciones83. Pero también cuando ellos confían tales tareas a instituciones eclesiásticas o a
78
78 Claudio Risé, Op. cit., p.25.
79 Una experiencia de esta instintiva búsqueda de la norma por parte del niño fue realizada, a menudo con sorpresa de los acompañantes, en muchos de los "asilos antiautoritarios" que florecieron, sobretodo en las metrópolis, entorno al '68, como parte de la investigación política y social de la época. Partiendo de la hipótesis de que toda represión era "castrante", inútil y dañina, se trató de poner a los niños en condiciones de absoluta libertad. Los comportamientos que se manifestaron entre los pequeños fueron esencialmente dos. En el mejor caso se obtenía un tipo de difusa depresión: sin normas, el niño no sabía que hacer, incluso jugar se volvía difícil. Los niños pedían consignas, pistas, órdenes, prohibiciones. A menudo sin embargo, donde el principio del "autoritarismo" era aplicado en modo más radical, y en su modo coherente, se constataba en los niños (que normalmente eran acogidos después de un año y medio) una regresión hacia un tipo de marasmo psicótico, un deslizamiento a niveles de total desorganización psicofísica, que convence a los operadores más radicales a abandonar el método, o a cerrar el asilo. Aquella experiencia tuvo al menos elmérito de una experimentación radical, que demostró claramente la impracticabilidad pedagógica del método antiautoritario. El principio de autoridad se constituye por la personalidad, y condiciona su desarrollo (Claudio Risé, Op. cit., pp.25-26).
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Es la tesis que sostengo en II narcisismo di massa, in Liberal. 81 Paul Josef Cordes,L'eclisse del Padre, Ed. Marietti, 2002.
82
El presidente francés Nicolas Sarkozy que desde la propaganda electoral había declarado la nefastas consecuencias sociales del 68, recientemente ha afirmado su querer restaurar en la sociedad francesa los principios de autoridad y de responsabilidad, cfr. Alberto Toscazo, Sarkozv escribe a los maestros: "Av del que no se haca respetar", in II Giornale, jueves 6 septiembre 2007.
83 Este derecho está reconocido en el Código de Derecho Canónico (buscar...), por lo que también donde por diversos motivos el obispo o el párroco hayan prohibido dar nuevas catequesis, los padres tienen el derecho de hacer dar las catequesis a los propios hijos incluso en una casa.
escuelas gestionadas por personal religioso, es necesario que su presencia educativa continúesiendo constante y activa. (Carta a las Familias, 16)
La relación educativa apela a la libertad
La relación educativa es por su misma naturaleza algo delicado: Apela en efecto a la libertad del otro que, aunque sea dulcemente, está siempre siendo provocada a tomar una decisión. Ni lospadres, ni los sacerdotes o los catequistas, ni los demás educadores pueden sustituir la libertad delniño, del muchacho o del joven al que se dirigen.
Y especialmente la propuesta cristiana interpela a fondo la libertad, llamándola a la fe y a laconversión.
Hoy día un obstáculo particularmente insidioso para la obra educativa lo constituye la masivapresencia, en nuestra sociedad y cultura de ése relativismo que, no reconociendo nada comodefinitivo, deja como última medida solamente el propio yo con sus apetencias, y so aparienciade libertad se convierte para cada uno en una prisión, porque separa al uno del otro, haciendo quecada cual se encuentre encerrado dentro del propio "yo".
Dentro de un tal horizonte relativista no es posible, pues, una verdadera educación: sin la luz de laverdad; antes o después toda persona está en efecto condenada a dudar de la bondad de su misma vida y de las relaciones que la constituyen, de la validez de su empeño por construir con los demás algo en común. (Benedicto XVI, A la Diócesis de Roma, op. cit.).
Tal vez es inevitable que un hijo sea rebelde" o pase una crisis en rebeldía contra los padres (ynormalmente contra Dios y la Comunidad): es importante que los padres sepan leer también estosacontecimientos como una Palabra de Dios para ellos y para su familia. Mirar a la Familia deNazaret, "experta en el sufrir", les ayudará a crecer en la humildad y a tener una relación más profunda con Dios mediante la oración. Según se dijo en años anteriores es importante que lospadres se muestren firmes en exigir de los hijos un comportamiento conforme a una familiacristiana; tal vez poner en la calle a un hijo que vive de modo disoluto, le puede ayudar aentrar en sí mismo y a salvarse.
Ya hemos hablado de la importancia de la educación sexual progresiva de los propios hijos, hoytanto más urgente en cuanto que de la escuela, de la televisión, de Internet y de los compañeros los hijos reciben una verdadera y propia deformación sobre la sexualidad.
Aunque los hijos después de la catequesis han entrado a formar parte de su propia Comunidad,permanece siempre un deber de los padres el vigilar sobre ellos por lo menos hasta cuando hayanalcanzado la mayoría de edad. Asegurarse de que efectivamente vayan a la comunidad, y sobretodo tener cuidado con evitar ocasiones que podrían ser peligrosas (viajes escolares en los que se vive en promiscuidad, vacaciones con la novia, etc.).
Corregir a los hijos
Es fundamental desde pequeños la corrección. La Escritura habla de ella en abundancia. Es laexpresión de un amor sincero y verdadero, que quiere el bien del hijo y de la hija, y por esolos sabe educar para que crezcan de forma cada vez más madura como hijos de Dios y como ciudadanos adultos.
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Son interesantes los cuatro tipos de hijos de los que habla La Hagadá (el libro que es leído durante la Pascua hebrea). El "hijo que no sabe preguntar": un niño cuyo deseo de conocer está adormecido, lo que ocurra entorno a él le deja indiferente e no le estimula la curiosidad hasta tal punto de no sentir la necesidad de preguntar. Es el papel del padre tomar la iniciativa y entablar una conversación antes de nada para ofrecerle estímulos. El hijo "simple" cuyo deseo de conocer está vivo expresándose a través de la pregunta. El hijo "sabio" como aquel que no solo posee yaun cierto bagaje de conocimiento sino que muestra también signos de su propia responsable actitud frente a la religión. Lo que los padres enseñan a este "tipo" de hijo a través de la Pascua se refiere sobretodo a la transmisión del concepto de la fe hebrea que se basa sobre la experiencia vivida por los propios antepasados con la salida de Egipto y el fin de la esclavitud, y no sus principios filosóficos referentes a la naturaleza divina. El "hijo malvado". Tiende a excluirse d la familia e de la colectividad hebrea; de hecho, en la hagadá, pregunta simbólicamente "¿cuál es el valor de esto paravosotros?" y no "¿para nosotros?". Su comportamiento y su elección están determinadas por una única consideración: si eso le procurará un placer personal. Es necesario dar una respuesta a tal hijo con toda serenidad y solemnidad de modo que se le haga partícipe de la atmósfera festiva y conocedor de la felicidad y del beneficio espiritual y no solo físico que conlleva al menos para obtener el respeto.
La palabra "disciplina" deriva del sustantivo "discípulo", de ahí es posible derivar unimportante concepto pedagógico. No es posible forzar la enseñanza de una materia a un discípulo en cuanto que eso debe resultar del deseo de aprender.
De la misma manera la verdadera disciplina debe brotar del deseo de dejarse guiar. El terrenosobre el que instaurar una apropiada disciplina y una sana relación es aquel en que se haconseguido que el propio hijo se convierta en un "discípulo".
Todo esto pide paciencia y perseverancia, pero es necesario sobre todo que antes el padre hayaconstruido una relación de amor consolidada con el propio hijo. Esta enseñanza puede serdeducida del comentario pedagógico al Mishlei del Gaon de Vilna que explica cómo a veces seanecesario no crearse falsas expectativas sobre resultados inmediatos, sino tener la agudeza y lapaciencia de retroceder, cuando sea necesario, antes de proyectarse hacia adelanté'.
La Carta a los Hebreos exhorta a las comunidades cristianas que viven en un contexto depersecución, a acoger la corrección de Dios, como signo de su amor de Padre.
Hijo mío, no menosprecies la corrección del Señor; ni te desanimes al ser reprendido por Él. Pues aquien ama el Señor le corrige; y azota a todos los hijos que acoge. (Hb. 12, 5b-6)
Date cuenta, pues, de que Yahveh tu Dios te corregía como un hombre corrige a su hijo. (Dt. 8, 5)
FAMILIA Y COMUNIDAD
Inspiración de la Virgen María: "Hay que hacer comunidades como la Familia de Nazaret"
Para el Camino Neocatecumenal comprendemos siempre mejor la inspiración de la Virgen María: "Hay que hacer comunidades como la Familia de Nazaret, que vivan en sencillez, humildad y alabanza, y donde el otro es Cristo".
De todas esta consideraciones sobre la alta llamada a la vida matrimonial y familiar según el plan de Dios, y concerniente también a la importante misión de salvar la familia tan atacada yamenazada en nuestra generación, se ve siempre mejor como esto no se puede realiza sin unadimensión de fe adulta. Vivir la relación matrimonial en el amor y en la verdad, en el respeto de ladiversidad del marido y de la mujer, en la entrega amorosa y paciente a la educación de los hijos,exige una conversión constante, cotidiana, de cada día. La llamada a la santidad aparece cada vez más real también en el estado de la vida matrimonial y familiar, hoy quizá más que en el estado de vida consagrada.
Por eso aparece evidente que esto es muy difícil, sino del todo imposible, sin el soporte de una Comunidad. La experiencia de más de treinta años del Camino Neocatecumenal lo demuestra,aunque esto no quita nunca la libertad de dejar el Camino y de destruir la propia familia.
Aquí se ve también cuánto sea providencial que la Iglesia haya aprobado en los Estatutos delCamino Neocatecumenal, que una vez acabado el itinerario del Neocatecumenado, la Comunidad pueda continuar en la formación permanente, en la celebración semanal de la Palabra de Dios, en la celebración de la Eucaristía, y en la Convivencia mensual. La Comunidad sostiene en el combate de la conversión personal y sobre todo ayuda a las familias a ser signo del Amor de Dios en el mundo de hoy. El Papa Benedicto XVI a este propósito, ha afirmado:
"La edificación de cada familia cristiana se coloca en el contexto de la más grande familia de la Iglesia, que la sostiene y la lleva consigo y garantiza que existe el sentido y que estará también en el futuro sobre ella el "sí" del Creador. Y recíprocamente la Iglesia es edificada por las familias, "pequeñas Iglesias domésticas", según las ha llamado el Concilio Vaticano II (LG 11; AA 11). En el mismo sentido laFamiliaris consortio afirma que "el matrimonio cristiano... es el lugar natural en que donde se realiza la inserción de la persona humana en la gran familia de la Iglesia"86.
85 Rivka Barissever, Op. cit., 1.3.4.
86 Papa Benedicto XVI en el Congreso eclesial de la Diócesis de Roma, 6 junio 2006.
Que vivan en humildad, sencillez y alabanza: conversión cotidiana
Familias que vivan en humildad, sencillez y alabanza: gracias al camino en comunidad, la convivencia con hermanos tan distintos, no elegidos por nosotros, con los cuales Dios nos hapuesto en camino, hemos comenzado a verificar nuestra imposibilidad de amar al otro, que connuestras fuerzas no podemos amar. Pero este descubrimiento gradual y progresivo al mismotiempo nos ha hecho cada vez más sensibles y abiertos a la escucha y a la adhesión al kerigma de laIglesia que en él nos ofrece el perdón de nuestros pecados, asume nuestra impotencia, y con el don del Espíritu Santo nos dona la posibilidad de pasar al otro, de amarle también cuando es distinto o contrario a nosotros, también cuando nos es enemigo.
Ciertamente éste proceso de descendimiento y al mismo tiempo de apertura al Espíritu Santo, para que realice en nosotros y con nosotros lo que para nosotros solos es imposible, es un proceso, un camino que no acaba nunca: Ay de aquél, que acabado el recorrido del Neocatecumenado, piense que este proceso haya acabado: se engañaría a sí mismo y se encaminaría hacia graves consecuencias.
La conversión es de todos los días, de cada día: éste es el secreto de la indisolubilidad delmatrimonio: solamente un esposo o una esposa que vive en esta actitud de humildad, deiluminación de su propia impotencia y recurre con confianza al Señor para obtener de Él el EspírituSanto, puede estar cierto de que su matrimonio no se romperá jamás; y aunque el otro cónyuge, por el misterio de su libertad, se saliese del camino de Dios y lo dejara, separándose o divorciándose, su amor sostenido y alimentado por el mismo amor de Cristo no se acabaría jamás.
El conocimiento de sí mismo, la conciencia de los enemigos que nos atacan y nos rondan paradestruirnos, nos hace vivir en constante oración, en íntima unión con Dios, permiten que no dejemos jamás la Palabra que ilumina cada paso de nuestra vida, el recurso al sacramento de la Reconciliación para obtener el perdón de los pecados y ser constantemente regenerados por el Espíritu Santo, y la comunión al Cuerpo y a la Sangre de Cristo que afianza la comunión con Dios, con los hermanos de la Iglesia y sobre todo de la propia Comunidad, y finalmente la vida de comunión con los hermanos. De esta simplificación interior nace la alabanza, la gratitud a Dios por la misericordia que constatamos en nuestra vida personal o familiar o consagrada.
Sostener el combate cotidiano contra la carne, el mundo; el demonio
Estamos llamados a sostener un combate para defender el matrimonio y la familia. Dice S. Pabloque nuestra lucha no es contra la carne ni la sangre, sino contra las potencias del mal y las potencias del aire que dominan el mundo; sabemos que nuestro combate es contra los tresenemigos del alma: el mundo, la carne, el demonio. El mundo con su mentalidad pagana queintenta insinuarse en nuestros corazones, en nuestros jóvenes, en nuestras familias. A través de la escuela, la televisión (no hay una película que presente una situación normal de familia,más bien se habla de separados, ex-maridos o ex-mujeres, amantes, como situación normal no traumatizante; así como también homosexuales y lesbianas). Debemos estar muy vigilantes, atentos, saber discernir. La carne, con sus concupiscencias, siempre nos tienta para ser infieles a Dios. Sabemos cuántas solicitaciones nos envía constantemente el mundo para responder a los impulsos de la carne, como dice el Papa Juan Pablo II: la pornografía que se encuentra en la televisión o en Internet hace palanca sobre las debilidades del hombre, amplifica la atracción sexual e induce a los pecados contra la castidad (aunque no parezcan pecados graves, en lo que concierne a la materia sexual todo pecado es considerado objetivamente grave), lleva poco a poco a una debilitación de la presencia de la gracia de Dios en nosotros, y así se contrista al Espíritu Santo, se debilitan las defensas espirituales y nos exponemos después a ataques más profundos y mortales del demonio. No hay que maravillarse que se llegue a lafornicación y hasta al adulterio. En este campo es importante ser muy decididos y muy serios frente a las ocasiones de pecado desde el comienzo, antes de que se llegue a consecuencias muy graves para nosotros, para nuestra familia, consecuencias que después ya no conseguimos frenar y dominar. Es cierto que también en caso de caídas siempre queda la posibilidad del retorno a Dios, de la conversión, después de haber comido los frutos amargos de estas falsas ilusiones, pero el temor de Dios debe estar siempre presente en nosotros y siempre debemos pedir al Señor no sólo que perdone nuestros pecados, sin también que no nos haga caeren la hora de la tentación.
Y finalmente el demonio con sus dudas, con sus acusaciones, con sus trampas y con sus engaños.Para ser familia cristiana debemos ser sostenidos por la Comunidad: por la celebración de laPalabra, por la Eucaristía, por el sacramento de la Penitencia, saber luchar con las armas delespíritu y de la luz.
LA PREPARACIÓN AL MATRIMONIO: EL NOVIAZGO87
Respondiendo a la pregunta de un párroco de la diócesis de Albano, el Papa Benedicto XVIprecisa:
"¿Cómo comunicar a la gente de hoy la belleza del matrimonio? Vemos cómo muchos jóvenestardan en casarse en la iglesia, porque tienen miedo de hacer una opción definitiva. Más aún,también tardan en casarse por lo civil. A muchos jóvenes, y también a muchos no tan jóvenes, unaopción definitiva les parece un vínculo contra la libertad. Y su primer deseo es la libertad.Tienen miedo de fallar al final. Ven muchos matrimonios fracasados. Tienen miedo de que estaforma jurídica, como ellos la perciben, sea una carga exterior que apague el amor.
Es preciso ayudarles a comprender que no se trata de un vínculo jurídico, de una carga que se asume con el matrimonio. Al contrario, la profundidad y la belleza radican precisamente en elhecho de que es una opción definitiva. Sólo así el matrimonio puede hacer madurar el amor entoda su belleza. Pero, ¿cómo comunicarlo? Creo que es un problema que afrontamos todosnosotros. (El Papa a los sacerdotes de Albano)
En el pueblo hebreo son las familias las que se preocupan del noviazgo: promueven encuentros enalgunos hoteles para que los chicos y las chicas se conozcan, para favorecer el conocimiento y losmatrimonios. También en el Camino Neocatecumenal las peregrinaciones, las Jornadas Mundialesde la Juventud con el Papa y los encuentros vocacionales, la Scrutatio para los jóvenes en lasParroquias.
Es necesario prepararse al matrimonio
Es necesario prepararse al matrimonio. Es necesario porque el matrimonio es algo muy serio,del cual depende en larga medida la felicidad o la infelicidad de la propia existencia.
El amor conyugal es una experiencia en la cual la persona misma del hombre y de la mujer estáplenamente involucrada: generar y educar una persona humana es la obra más grande que se pueda realizar. Es mucho más grande que construir la cúpula de S. Pedro. Ésta se acabará, como todas las cosas de este mundo. La persona humana no se acabará jamás, porque ella no pertenece a este mundo. Pertenece a la eternidad de Dios.
La realidad del matrimonio es una realidad santa, es un sacramento. Sólo el Señor puedeintroducirnos en su comprensión. La primera preparación al matrimonio consiste en la oración, la oración al Espíritu para que haga penetrar en el corazón de los novios la Verdad. Y solamente Élpuede instruirlos y hacerles gustar la santidad de la vocación matrimonial.
Ya que se preparan entre dos al matrimonio, es necesario que este descubrimiento de la vocaciónmatrimonial se haga juntos. Los dos novios deben confrontar su idea de matrimonio. Sobre lascuestiones esenciales tiene que haber un acuerdo si no es mejor dejarlo. Las cuestionesfundamentales son la indisolubilidad del vínculo conyugal, y por ende la exclusión en todo caso del divorcio; los hijos y su educación, sobre todo por lo que atañe a su educación religiosa; la manera de realizar la procreación responsable, excluir la contracepción. Como veis, es necesaria una profunda confianza entre los dos novios, fundada en un gran respeto recíproco.
Es necesario adquirir las cualidades (las virtudes) espirituales necesarias para vivir la vidaconyugal. No es suficiente saber qué es el matrimonio; es necesario disponerse profundamente avivirlo. Existen unas virtudes que son absolutamente necesarias para la vida de los esposos: el amorconyugal, la castidad, la humildad, por ejemplo. Durante el noviazgo se debe dar una educaciónpara estas virtudes fundamentales.
Pero quien dice amor entre novios piensa también en el problema de las relaciones sexualesdurante el noviazgo. Se trata de un punto realmente importante. La relación sexual entre un
87 Carlo Caffarra (Cardenal), Creati per amare, Ed. Cantagalli, Siena 2006, pp.80-86. 36
hombre y una mujer es un acto muy serio y muy grande: no se trata de un juego. Ésta llevainscrita en sí misma un significado muy profundo. Este dice donación completa de sí mismo: es ellenguaje del don de la propia persona y de la acogida del don que hace el otro. La donacióncompleta también es siempre definitiva. El gesto sexual implica y confirma un vínculo indisoluble entre las dos personas, es decir, el matrimonio. He aquí por qué sólo en el matrimonio ese gesto esverdaderamente humano; hecho entre novios es como una especie de mentira que se cuentanmutuamente.
Pero hay una razón aún más profunda que sólo la fe puede percibir. Dice S. Pablo: "Vosotros no os pertenecéis, habéis sido comprados..., glorificad a Dios en vuestro cuerpo" (1 Cor. 6, 20).
¿Qué significa? Nosotros no nos pertenecemos a nosotros mismos: la novia no se pertenece a símisma; el novio no se pertenece a sí mismo: son del Señor. ¿Se puede donar lo que no se posee? El Señor hace don de la novia al novio precisamente en el matrimonio. El matrimonio es éste don hecho por Dios mismo. Antes es algo ilegítimo. Es como querer unir lo que Dios todavía tiene dividido, así como, después del matrimonio, querer separar lo que Dios ha unido. ¡Éste misterio –exclama aún S. Pablo- es grande!
Durante el noviazgo es necesario educarse a este autodominio que está hecho de respeto delotro.
Pero lo más importante es la educación al verdadero amor mutuo. Es el punto central de todo verdadero noviazgo. Aprender a amarse es la más sublime de las ciencias. Es la ciencia de lossantos, se dice. Y es cierto: en efecto la santidad no es otra cosa sino la perfección del amor. Pero¿cómo se aprende a amar? Dios se hizo hombre para decirnos que Él es Amor y para enseñarnos qué significa amar.
También en nuestras Comunidades a veces constatamos la dificultad de nuestros jóvenes para elmatrimonio. Además de los factores ya apuntados por el Santo Padre, muchos otros influyen en esa actitud:
Por un lado, el haber encontrado en la familia un refugio seguro que puede favorecer una ciertapereza a la hora de lanzarse a la aventura del matrimonio abandonados en el Señor.
Por otro lado, pueden influir los modelos de hombre o mujer propagados por los medios decomunicación por lo que se espera encontrar un novio guapo, rico, inteligente, con éxito o unanovia deslumbrante, fascinadora como las divas propuestas por la televisión, rica, inteligente, etc. Con esto se ignoran los principales criterios para un matrimonio cristiano en el cual una persona de fe, con temor de Dios, modesta, fiel, capaz de sufrir vale mucho más que los efímeros valores propuestos por la sociedad. A lo mejor se busca fuera de las Comunidades vecinas,cuando seria más simple encontrar un marido o una mujer entre los jóvenes que se conocen y de quien se conocen las familias88.
Otro factor que retrasa el matrimonio es el económico: terminar los estudios (que tal vez lleva apasar de los treinta años), tener un trabajo, tener una casa: ciertamente se trata de factores a teneren cuenta prudentemente, pero estos factores no deben frenar, una vez convencidos de la voluntaddel Señor, el casarse aún arriesgando juntos, confiando en la providencia de Dios Padre, quesiempre provee a quien confía en Él. No por casualidad la Escritura exalta a "los hijos de lajuventud": en efecto Dios mismo ha dispuesto en la naturaleza del hombre y de la mujer lacapacidad de generar hijos "en la edad de la juventud".
Es importante tanto para los padres como para los hijos tener siempre presente que también lallamada al matrimonio es una vocación, y como enseña el libro de Tobías, es el Señor el que
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En la elección del marido y de la mujer es importante mirar a la familia a la que pertenecen y en la cual han crecido y se han formado: el hecho de que en la familia haya habido un ambiente de fe auténtica, es siempre una garantía. Pensar en casarse con una persona atea o alejada de la fe pensando cambiarla en seguida es un engaño: muchos jóvenes han terminado por dejar el Camino, aunque si el novio o la novia han participado de las catequesis aunque más por casarse que por una verdadera conversión a Jesucristo. San Juan Crisóstomo da muy buenas indicaciones para orientarse en el matrimonio y también algunos criterios para la elección del marido o de la mujer, que son todavía hoy actuales. Dado que el matrimonio cristiano es un hecho que envuelve toda la vida como también a los hijos que nacerán, es necesario afrontarlo con discernimiento e pidiendo la ayuda del Espíritu Santo.conduce a los jóvenes a encontrar la persona que Dios ha elegido como futura esposa o esposo,madre o padre de los hijos que Él querrá donar. Ésta certidumbre, sin embargo, no debe llevar a losjóvenes a una espera pasiva, sino que tienen que ser animados a no tener miedo de arriesgar.
"No hay que olvidar que la preparación a la futura vida de pareja es tarea sobre todo de la familia"(Carta a las Familias, 16)
LAS OFENSAS A LA DIGNIDAD DEL MATRIMONIO
Hoy día, debilitada la fe: la consecuencia son los matrimonios destruidos
En la actualidad ya no se habla ni de espíritu ni de alma, sino que se habla de psique; ya no se hablade Director Espiritual, sino del psicólogo, del psicoanalista. El hombre es depauperado de la partemás profunda de su ser. También en la Iglesia de hoy los dos misterios principales de nuestra fe: elmisterio de la Santísima Trinidad y el misterio de la Encarnación están como mermados, comodebilitados en la conciencia cristiana. El Dios en que se cree, los que aún creen, es un Diosvagamente personal, que podría ser fácilmente identificado con un cualquier Ser supremo, porejemplo Alá (cf. Nota 19). Por lo que concierne a la Encarnación, ya no se cree en el dogma de laRedención, es decir, en el poder de Jesucristo de redimirnos y salvarnos; todo está nivelado en unplano puramente horizontal, se habla de creación, de ecología, de solidaridad, de paz y justicia,pero ya no se habla de pecado, de redención, de salvación..., el infierno casi ha desaparecido. Todoesto tiene unas consecuencias graves en la vida moral: sea porque quita todo significadotrascendente de la vida, sea porque todo está dejado al esfuerzo del hombre. Desaparece la accióndel Espíritu Santo en el corazón de los fieles cristianos muchos de los cuales ya no se confiesan(han perdido el sentido del pecado que lamentablemente los mismos pastores no iluminan).
Esto explica por qué en la actualidad tantos matrimonios se destruyen, también de católicos deraigambre: maridos y mujeres ya no se soportan, se enamoran de otro partner más joven, dejan a los hijos traumatizados: ¿cuál es la causa? Nosotros la conocemos: Se ha venido abajo su fe. O,mejor dicho, se ha venido abajo ese ambiente de cristiandad de hace treinta o cuarenta años, en que, aunque se vivía la fe en forma de religiosidad natural, el ambiente de la aldea, de la familia patriarcal ayudaba y sostenía a la familia. Las predicaciones (misiones populares, cuaresmales), la misa, las confesiones, el director espiritual, los retiros o jornadas de espiritualidad: se trataba de unos medios que daban un alimento a la vida cristiana que ayudaba a la reconciliación, al perdón, a la fidelidad en el matrimonio. Pero, habiéndose venido abajo este ambiente, en un ambiente secularizado, con la urbanización y la constitución de núcleos familiares aislados, la casi total ausencia del sacramento de la Confesión, se abandona la misa dominical, etc... son todos factores que han debilitado a los cristianos: las actitudes cristianas se han convertido en pesos y prohibiciones imposibles de soportar con las solas propias fuerzas, la influencia de una mentalidad pagana que favorece el amor libre89, que exalta la separación, pone en entredicho la familia y el matrimonio, ha introducido el divorcio y el aborto, ha publicitado la pornografía, facilitado las drogas, Internet, etc, son todos elementos que han contribuido a abatir toda resistencia de los católicos ya de por sí debilitados.
Pero los más expuestos a la condenación eterna (infierno) somos nosotros: los que en unitinerario de iniciación cristiana hemos experimentado la potencia del Espíritu Santo, el amor de
89 Ciertamente contrario a la civilización del amor es el llamado «amor libre», tanto o más peligroso porque es presentado frecuentemente como fruto de un sentimiento «verdadero», mientras de hecho destruye el amor. ¡Cuántas familias se han disgregado precisamente por el «amor libre»! En cualquier caso, seguir el «verdadero» impulso afectivo, en nombre de un amor «libre» de condicionamientos, en realidad significa hacer al hombre esclavo de aquellos instintos humanos, que santo Tomás llama «pasiones del alma»37. El «amor libre» explota las debilidades humanas dándoles un cierto «marco» de nobleza con la ayuda de la seducción y con el apoyo de la opinión pública. Se trata así de «tranquilizan> las conciencias, creando una «coartada moral». Sin embargo, no se toman en consideración todas sus consecuencias, especialmente cuando, además del cónyuge, sufren los hijos, privados del padre o de la madre y condenados a ser de hecho huérfanos de padres vivos.
Estamos llamados a sostener un combate contra los príncipes del aire, contra la mentalidadque puede insidiar nuestros matrimonios y nuestras familias: a quien más se le dio, más se lepedirá, nuestra responsabilidad es grande, vista la misión que Dios nos ha confiado. Lasconsecuencias de una infidelidad nuestra además que en el matrimonio y en los hijos recaensobre los pequeños, los paganos que acercándose a la Iglesia empiezan a creer en el amor eterno y fiel de Dios. Bien sabemos cuán duras son las palabras del Señor para quien es causa de escándalo (de tropiezo) para los pequeños.
El adulterio
En el Sermón de la Montaña, refiriéndose al sexto mandamiento, Cristo proclama: "Habéis oído que se dijo: No cometerás adulterio; pues yo os digo: todo el que mira a una mujer deseándola ya cometió adulterio con ella en su corazón" (Mt. 5, 27-28).
En relación con el Decálogo, cuyo objetivo era defender la tradicional compactabilidad delmatrimonio y de la familia, estas palabras marcan un gran salto hacia delante. Jesús va a la fuente del pecado de adulterio: ella reside en lo íntimo del hombre y se manifiesta en un modo de mirar y de pensar que está dominado por la concupiscencia. '
Mediante la concupiscencia el hombre tiende a apropiarse de otro ser humano, que no es suyo, sino que pertenece a Dios. Mientras se dirige a sus contemporáneos, Cristo habla a los hombres de todoslos tiempos y de todas las generaciones; habla, en especial, a nuestra generación, que vive, bajo el signo de una civilización consumista y hedonista.
¿Por qué Cristo, en el Sermón de la montaña, habla de manera tan fuerte y exigente? La respuesta es muy clara: Cristo quiere garantizar la santidad del matrimonio y de la familia, quiere defender la plena verdad sobre la persona humana y su dignidad. (Carta a las Familias, 20)
El adulterio es una injusticia. El que lo comete falta a sus compromisos. Lesiona el signo de laAlianza que es el vínculo matrimonial. Quebranta el derecho del otro cónyuge y atenta contra lainstitución del matrimonio, violando el contrato que le da origen. Compromete el bien de lageneración humana y de los hijos, que necesitan la unión estable de los padres. (CEC, 2381)90
"En la indisolubilidad el amor de Cristo por su Iglesia llega a ser también el criterio con que juzgar cualquier fatiga y contradicción, también la más dramática o repugnante, de una historiaconyugal. En el plano existencial ella se convierte en condición de verdad y dinamismo desantidad. Es decir, garantía de la capacidad de amar al otro por lo que es, por su propio destino,fuente de un amor que libera y no de un amor que ata. No se da la indisolubilidad sin elperdón, un don gratuito –según dice la etimología de la palabra- en que ha sido insertado unmultiplicador a la enésima potencia.
Éste es el punto de vista necesario para comprender cuanto la Iglesia afirma sobre la separación yel divorcio.
La separación de los esposos
La separación matrimonial constituye el extremo recurso del perdón: ella reconoce al vínculomatrimonial todo su peso y lo respeta hasta el fondo, aceptando con dolor la imposibilidad de laconvivencia entre los cónyuges que se ha venido creando en el tiempo91.
90
Desgraciadamente hoy también en la Iglesia no se siente casi hablar de adulterio y de su gravedad. El adulterio que en los primeros siglos de la Iglesia era considerado uno de los tres pecados graves (junto al homicidio y a la apostasía) por el que se excomulgaba para que tras un largo periodo de penitencia ser readmitido a la comunión de la Iglesia, hoy no aparece ya su gravedad. La particular cura pastoral de la Iglesia hacia los divorciados vueltos a casar se da por un parte buscando mantener vivo un ligamen de estos con la Iglesia, y por otra se corre el riesgo de mantener que el divorcio nosea ya una cosa grave. En la mentalidad común de los fieles poco catequizados se facilita la mentalidad de que una vez divorciados y vueltos a casar se continúa formando parte de la Iglesia aunque no se pueda comulgar, lo que no es retenido como un gran mal...91
La separación de los esposos con permanencia del vínculo matrimonial puede ser legítima en ciertos casos previstos por el Derecho Canónico Si el divorcio civil representa la única manera posible de asegurar ciertos derechos legítimos, el cuidado de los hijos o la defensa del patrimonio, puede ser tolerado sin constituir una falta moral (CCC. 2383)
Los hijos, en este caso, son ayudados a comprender que la fatiga y la debilidad de sus padres noson más fuertes del poder de la Gracia de Cristo que, a pesar de todas las dificultades, los mantiene unidos.
El divorcio
Bien distintas son las cosas en el caso del divorcio92. En efecto, el divorcio implica de hecho unjuicio sobre la capacidad de Jesucristo de unir a los esposos para siempre. En este sentido essiempre una elección desproporcionada: ¿quién de nosotros puede decir que la dificultad vividaes más potente que la Gracia de Cristo? El divorcio introduce un juicio de este tipo en la vida delos cónyuges y de los hijos. No estamos simplemente enfrente de una fragilidad moral.
De hecho la Iglesia no admite a la comunión eucarística a los fieles divorciados que se hanvuelto a casar civilmente. A menudo se oye que tal posicionamiento es de una dureza insostenible.
Para entenderla es necesario tener presentes algunos datos. No poder recibir la comunión nosignifica vivir al margen de la comunidad cristiana.
Significa, en cambio, darse cuenta de la seriedad del vínculo que nos une a ella, un vínculo tanobjetivo que no puede ser afirmado superficialmente93. El sufrimiento de no poder comulgar esel aguijón que abre de par en par la libertad del fiel a pedir diariamente la gracia de reconducir su propia vida al camino que es Cristo mismo. Es el camino de la expiación(¡otra palabra decididamente inusual hoy día!) que respeta hasta el fondo la verdad concreta, histórica, dramática de cada hombre94.
Eucaristía e indisolubilidad del matrimonio
"Puesto que la Eucaristía expresa el amor irreversible de Dios en Cristo por su Iglesia, seentiende por qué ella requiere, en relación con el sacramento del Matrimonio, esa indisolubilidad a la que aspira todo verdadero amor.
El Sínodo de los Obispos ha confirmado la praxis de la Iglesia, fundada en la Sagrada Escritura (cf. Mc 10,2-12), de no admitir a los sacramentos a los divorciados casados de nuevo, porque su estado y su condición de vida contradicen objetivamente esa unión de amor entre Cristo y la Iglesia que sesignifica y se actualiza en la Eucaristía.
Sin embargo, los divorciados vueltos a casar, a pesar de su situación, siguen perteneciendo a laIglesia, que los sigue con especial atención, con el deseo de que, dentro de lo posible, cultiven unestilo de vida cristiano mediante la participación en la santa Misa, aunque sin comulgar, laescucha de la Palabra de Dios, la Adoración eucarística, la oración, la participación en la vida
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El divorcio es una ofensa grave a la ley natural. Pretende romper el contrato, aceptado libremente por los esposos, de vivir juntos hasta la muerte. El divorcio atenta contra la Alianza de salvación de la cual el matrimonio sacramental es un signo. El hecho de contraer una nueva unión, aunque reconocida por la ley civil, aumenta la gravedad de la ruptura: el cónyuge casado de nuevo se halla entonces en situación de adulterio público y permanente: Si el marido, tras haberse separado de su mujer, se une a otra mujer, es adúltero, porque hace cometer un adulterio a esta mujer; y la mujer que habita con él es adúltera, porque ha atraído a sí al marido de otra (S. Basilio, moral. regla 73) (CCC 2384).
El divorcio adquiere también su carácter inmoral a causa del desorden que introduce en la célula familiar y en la sociedad. Este desorden entraña daños graves: para el cónyuge, que se ve abandonado; para los hijos, traumatizados por la separación de los padres, y a menudo viviendo en tensión a causa de sus padres; por su efecto contagioso, que hace de él una verdadera plaga social (CCC 2385).
Puede ocurrir que uno de los cónyuges sea la víctima inocente del divorcio dictado en conformidad con la ley civil; entonces no contradice el precepto moral. Existe una diferencia considerable entre el cónyuge que se ha esforzado con sinceridad por ser fiel al sacramento del Matrimonio y se ve injustamente abandonado y el que, por una falta grave de su
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parte, destruye un matrimonio canónicamente válido (cf. FC 84) (CCC 2386). Cfr. Congregación para la Doctrina de 1 Fe, Carta a los Obispos de la Iglesia Católica acerca de la recepción de la comunión eucarística por parte de los fieles divorciados y vueltos a casar, 14 septiembre 1994, n.4: "Si los divorciados se han vuelto a casar civilmente, se encuentran en una situación que contradice objetivamente a la ley de Dios y por consiguiente no pueden acceder a la Comunión eucarística mientras persista esa situación. Esta norma de ninguna manera tiene un carácter punitivo o en cualquier modo discriminatorio hacia los divorciados vueltos a casar, sino que expresa más bien una situación objetiva que de por sí hace imposible el acceso a la Comunión eucarística: «Son ellos los que no pueden ser admitidos, dado que su estado y situación de vida contradicen objetivamente la unión deamor entre Cristo y la Iglesia, significada y actualizada en la Eucaristía".
94 Angelo Scola, Op. cit., pp. 87-89.
comunitaria, el diálogo con un sacerdote de confianza o un director espiritual, la entrega a obras decaridad, de penitencia, y la tarea de educar a los hijos.
Donde existan dudas legítimas sobre la validez del Matrimonio sacramental contraído, se debe hacer todo lo necesario para averiguar su fundamento.
Por esto, cuando no se reconoce la nulidad del vínculo matrimonial y se dan las condicionesobjetivas que hacen la convivencia irreversible de hecho, la Iglesia anima a estos fieles aesforzarse por vivir su relación según las exigencias de la ley de Dios, como amigos, comohermano y hermana; así podrán acercarse a la mesa eucarística, según las disposicionesprevistas por la praxis eclesial. Para que semejante camino sea posible y produzca frutos, debecontar con la ayuda de los pastores y con iniciativas eclesiales apropiadas, evitando en todo caso la bendición de estas relaciones, para que no surjan confusiones entre los fieles sobre del valordel matrimonio".
La declaración de nulidad del matrimonio
Otro fenómeno reciente cada vez más frecuente es el recurso a la "declaración de nulidad" delmatrimonio. Cada vez más parejas con problemas y en crisis, a veces aconsejadas por sacerdotes a los que exponen su situación de sufrimiento y dificultad de relación, someten al juicio de la Iglesia su propio matrimonio para saber si no tenga los elementos necesarios para ser declarado nulo. Lamentablemente también en las Comunidades Neocatecumenales más jóvenes se empieza a dar algún caso similar.
Otras veces se trata de parejas que ya han roto la convivencia matrimonial, han establecido unanueva relación y piden a la Iglesia poder anular el precedente matrimonio a fin de regularizar elnuevo.
Ante este nuevo fenómeno, el Papa Juan Pablo II en los discursos anuales a la "Rota Romana"(el Tribunal competente para estas causas, además de los Diocesanos o Regionales
96), ratifica yconfirma la Doctrina de la Iglesia frente a una mentalidad permisivista y divorcista que sedifunde cada vez más y ha penetrado en muchos cristianos. El Papa Benedicto XVI ha vuelto aconfirmar la enseñanza de su predecesor en los dos discursos a la Sagrada Rota (Enero 2006 y2007).
Posibilidad de convalidación de un matrimonio inválido
...El asesor de las parejas en dificultad conyugal no tiene frente a sí la sola alternativa de laproponibilidad o menos de una causa canónica de nulidad. También en el caso que esa seateóricamente posible, él no deberá dejar de lado las otras posibilidades subsistentes, entre lascuales está la convalidación del matrimonio, allá donde éstas aparecen más convenientes a lasituación efectiva de los interesados... El principio de fondo que subyace a la institución de laconvalidación del matrimonio es el fundamental de toda la disciplina matrimonial canónica: o sea,el que individúa el consentimiento de las partes como la causa genética, la "causa eficiente" –según se expresa el lenguaje clásico- del matrimonio97 ...La primera forma de convalidación deun matrimonio inválido, llamada convalidación simple, tiene como elemento suyo característico yesencial el hecho de que se realiza a través de la renovación del consentimiento... Lasmodalidades de expresión de este nuevo acto de la voluntad pueden variar según la causa deinvalidez del matrimonio y de su grado de publicidad...98.
95 Exhortación Apostólica Sacrametum Caritatis, n.29, Papa Benedicto XVI, 22 febrero 2007.
96Para las causas de nulidad de matrimonio no reservadas a la Sede Apostólica, son competentes: 1) el tribunal del lugar en que se celebró el matrimonio; 2) el tribunal del lugar en que el demandado tiene su domicilio o cuasidomicilio; 3) el tribunal del lugar en que tiene su domicilio la parte actora, con tal de que ambas partes residan en el territorio de una misma Conferencia Episcopal y dé su consentimiento el Vicario judicial del domicilio de la parte demandada, habiendo oído a ésta; 4) el tribunal del lugar en que de hecho se han de recoger la mayor parte de las pruebas, con tal de que lo consienta el Vicario judicial del domicilio de la parte demandada, previa consulta a ésta por si tiene alguna objeción.
97,,Quando il matrimonio é nulo?", Paolo Bianchi, Ed. Ancora 1988, p.277.
98 Ibid. pp.281-282.
MISIÓN DE LA FAMILIA Y FAMILIA EN MISIÓN99 Cada familia cristiana se encuentra en misión
Tenemos que decir que hoy contemplamos la Familia en misión, porque la Sagrada Familia no es otra cosa sino ésta: la humana familia en misión divina. Y aquí, esta familia humana como una comunidad más pequeña, se muestra, al mismo tiempo, como una gran comunidad humana que se encuentra en misión divina: ésta es la Iglesia. La Iglesia, sobre todo en el Vaticano II, ha reconocido su carácter de familia y su carácter misionero. Es una gran familia en misión. Dentro de esta gran Familia-Iglesia se encuentra cada familia humana, cada comunidad familiar como familia en misión. Ustedes han hablado mucho de la familia como sociedad más pequeña, más básica y todo esto es cierto. Pero cuando vemos el misterio principal constituido por la Trinidad en misión, no podemos ver a la familia fuera de esta realidad: también ella en misión. Y su misión es verdaderamente fundamental, fundamental por la misión divina del Verbo, por la misión divina del Espíritu Santo: es fundamental. La misión divina del Verbo es hablar, dar testimonio del Padre. Es importante la familia que habla por que revela como primicia este misterio, que da testimonio de Dios Padre Amor delante de las nuevas generaciones. Su palabra es más eficaz.
Así cada familia humana, cada familia cristiana, se encuentra en misión. Ésta es la misión de la Verdad. La familia no puede vivir sin Verdad, más bien ella es el lugar en el que existe la sensibilidad extrema por la Verdad. Si falta la Verdad en la relación en la comunión de las personas entre marido, mujer, padres, madre, hijos si se la echa de menos se rompe la comunión, se destruye la Misión. Todos vosotros sabéis bien corno esta comunión de la familia sea realmente sutil,delicada, fácilmente vulnerable. Y así se refleja en la familia, junto con la misión del Verbo, delHijo, también la misión del Espíritu Santo que es Amor. La familia está en misión, y esta misión esfundamental para cada pueblo, para la humanidad entera; es la misión del Amor y de la Vida, es eltestimonio del Amor y de la Vida.
Iglesia Santa de Dios, tú no puedes hacer tu misión, no puedes cumplir tu misión en el mundo, si nopor la familia.
Queridos, yo he venido aquí con mucho gusto. He acogido gratamente vuestra invitación en lafiesta de la Sagrada Familia para rezar junto con vosotros por lo más fundamental y más importante en la misión de la Iglesia: por la renovación espiritual de la familia, de las familias humanas ycristianas de cada pueblo, en cada nación, especialmente quizás en nuestro mundo occidental, más avanzado, más marcado con las señales y los beneficios del progreso pero también de las faltas deeste progreso unilateral.
Si se tiene que hablar de una renovación, de una regeneración de la sociedad humana, más bien de la Iglesia como sociedad de los hombres, se tiene que empezar de este punto, de esta misión.
IGLESIA SANTA DE DIOS, TÚ NO PUEDES HACER TU MISIÓN, NO PUEDES CUMPLIR TU MISIÓN EN EL MUNDO, SI NO POR LA FAMILIA Y SU MISIÓN.
Ésta es la finalidad principal por lo que he acogido vuestra invitación a estar juntos y rezar juntos sobre todo en este entorno compuesto por las familias, por los novios, por los niños, sobre todo de familias itinerantes. Es una cosa bonita. Vemos que también la Familia de Nazaret es una familia itinerante.
No hay, en este mundo, otra imagen más perfecta, más completa que aquél que es Dios: Unidad, Comunión. No hay otra realidad humana más parecida, más humanamente parecida a aquel misterio divino. Y así, llevando como itinerantes el testimonio que es propio de la familia, de la familia en misión, vosotros lleváis a cualquier parte el testimonio de la Trinidad Santa en misión. Y asíhacéis crecer la Iglesia porque la Iglesia crece de estos dos misterios. Como nos
99 Juan Pablo II, Envío de las familias (Porto San Giorgio, Diciembre 1998).
enseña el Concilio Vaticano II, toda la vitalidad de la Iglesia viene principalmente, de estemisterio, de este misterio de la Trinidad en misión. Por otra parte llega el testimonio de la familia en misión que trata de caminar sobre los huellas de la Trinidad en misión Y tan también se ofrece un mensaje, el mensaje de Belén, el mensaje navideño, alegre. Sabemos que este mensaje, según las tradiciones y las costumbres, siempre está unido a las familias humanas, es la fiesta de la familia. Se tiene que dar a esta fiesta un sentido profundo, una dimensión llena, humanamente llena, porque este misterio humano, esta realidad humana de la familia ha arraigado en el misterio divino, en el misterio de Dios comunión.
Vosotros sois comunión, comunión de las personas como el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo.
Sois comunión de las personas, sois unidad. Sois unidad y no podéis no ser unidad. Si no soisunidad no sois comunión; si sois en cambio comunión, sois unidad. Hay muchas familias en este mundo avanzado, rico, opulento que han perdido la unidad, han perdido la comunión, han perdido las raíces. He aquí que vosotros sois itinerantes para llevar el testimonio de estas raíces; ésta es vuestra catequesis, éste es vuestro testimonio neocatecumenal: así se habla de la fructificación del Sagrado Bautismo.
El Sacramento del Matrimonio, la familia crece en el Sacramento del Bautismo, de suriqueza.
Sabemos bien que el Sacramento del Matrimonio, la familia, todo esto crece en el Sacramento delBautismo, de su riqueza. Crecimiento del Bautismo quiere decir crecer del misterio pascual de Cristo. Por el Sacramento del agua y del Espíritu Santo, somos sumergidos en este misterio pascual de Cristo que es su muerte y su Resurrección. Somos sumergidos para hallar la plenitud de la vida y la plenitud de la persona, pero al mismo tiempo, la dimensión de la familia - comunión de personas - para llevar, para inspirar con esta novedad de vida los entornos diferentes, las sociedades, los pueblos, los culturas, la vida social, la vida económica... Todo esto es por la familia. Vosotros tenéis que ir por todo el mundo a repetir que todo es por la familia, no a costa de la familia. Sí, vuestro programa tiene que ser plenamente evangélico, atrevido, valiente en testimoniar y valiente en preguntar, en preguntar delante de todos, sobre todo delante de nuestros hermanos, delante de las personas humanas, delante de las nuestros hermanos, a todas estas familias, a todas estas parejas, a todas estas generaciones. Pero también delante de los otros. Con este gran testimonio, la familia en misión como imagen de la Trinidad en misión, se tiene que llevar también antes que un programa diría sociopolítico, socioeconómico. La familia es implicada en todo esto y puede ser ayudada, llevada adelante, privilegiada o puede ser destruida.
Debéis ayudar a la familia, debéis protegerla contra toda destrucción
Hoy se hacen muchas y cosas para normalizar estas destrucciones, para legalizar estasdestrucciones; destrucciones profundas, heridas profundas de la humanidad. Se hace mucho paraarreglar, para legalizar. En este sentido se dice proteger. Pero no se puede proteger realmente a lafamilia sin entrar en las raíces, en las realidades profundas, en su íntima naturaleza; y su naturalezaíntima es la comunión de las personas a imagen y semejanza de la comunión divina. Familia enmisión, Trinidad en misión.