Tratado XVIII PNEUMATOLOGIA 1. El Esp�ritu Santo en el A. T. 2. Profetizaci�n 3. Promesa 4. Venida 5. Funciones 6. Fines 7. Dones 8. Frutos 9. Efectos 1. El Esp�ritu Santo en el A. T. -Es uno en sustancia y m�ltiple en los medios para sus fines -Fue enviado ya a los hombres en el A. T. -Act�a a trav�s de toda la Historia b�blica -El Esp�ritu de Dios es uno en sustancia y m�ltiple en los medios para alcanzar sus fines. Pues hay en la sabidur�a un esp�ritu inteligente, santo, �nico, m�ltiple, sutil, �gil, perspicaz, inmaculado, claro, impasible, amante del bien, agudo, incoercible, bienhechor, amigo del hombre, firme, seguro, sereno, que todo lo puede, todo lo observa, penetra todos los esp�ritus, los inteligentes, los puros, los m�s sutiles (Sab. 7, 22). -El Esp�ritu Santo fue enviado ya a los hombres en el Antiguo Testamento. Baj� Yahv�h en la nube y le habl� (a Mois�s). Luego tom� el esp�ritu que hab�a en �l y se lo dio a los setenta ancianos. En cuanto repos� sobre ellos el esp�ritu, se pusieron a profetizar, pero ya no volvieron a hacerlo m�s (N�m. 11, 25). Aclaraci�n. Reciben el don prof�tico s�lo temporalmente. ...ven�a frente a Sa�l un grupo de profetas; le invadi� el esp�ritu de Dios y se puso en trance en medio de ellos. Los que le conoc�an de toda la vida le vieron profetizando con los profetas,... (1 Sam. 10, 10-11). Vino sobre los emisarios de Sa�l el esp�ritu de Dios y tambi�n ellos se pusieron en trance (1 Sam. 19, 20). -El Esp�ritu de Yahv�h act�a a trav�s de toda la historia b�blica. a) -sobre los elementos. ...el Esp�ritu de Dios aleteaba sobre la superficie de las aguas (G�n. 1, 2). b) -Sobre la vida. Entonces Yahv�h Dios form� al hombre con polvo del suelo, e insufl� en sus narices aliento de vida, y result� el hombre un ser viviente (G�n. 2, 7). Por la palabra de Yahv�h fueron hechos los cielos, por el soplo de su boca toda su mesnada (Sal. 33, 6). Escondes tu rostro y se anonadan, les retiras su soplo, y expiran y a su polvo retornan. Env�as tu soplo y son creados, y renuevas la faz de la tierra (Sal. 104, 29-30). As� dice el Se�or Yahv�h a estos huesos: He aqu� que yo voy a hacer entrar el esp�ritu en vosotros y vivir�is. Os cubrir� de nervios, har� crecer sobre vosotros la carne, os cubrir� de piel, os dar� un esp�ritu u vivir�is;... (Ez. 37, 5-6). �l me dijo: �Profetiza al esp�ritu, profetiza, hijo de hombre. Dir�s al Esp�ritu: As� dice el Se�or Yahv�h: Ven esp�ritu, de los cuatro vientos, y sopla sobre estos muertos para que vivan.� Yo profetic� como ellos me lo hab�an ordenado, y el esp�ritu entr� en ellos; revivieron y se incorporaron sobre sus pies: era un enorme, inmenso ej�rcito (Ez. 37, 9-10). c) -Suscita a los jueces. El esp�ritu de Yahv�h sobre �l, que fu� juez en Israel... (Juec. 3, 10). El esp�ritu de Yahv�h revisti� a Gede�n (Juec. 6, 34). El esp�ritu de Yahv�h vino sobre Jeft�,... (Juec. 11, 29). d) -Suscita a Sa�l. ...le invadi� el esp�ritu de Dios y se puso en trance en medio de ellos (1 Sam. 10, 10). Invadi� a Sa�l el esp�ritu de Dios en oyendo estas palabras, y se irrit� sobremanera (1 Sam. 11, 6). e) -Da habilidad a los artesanos. Habl� Yahv�h a Mois�s diciendo: Mira que he designado a Besalel...y le he llenado del esp�ritu de Dios concedi�ndole habilidad, pericia y experiencia en toda clase de trabajos (Ex. 31, 3). ...Yahv�h ha designado a Besabel...y le ha llenado del esp�ritu de Dios, confiri�ndole habilidad pericia y experiencia en toda clase de trabajos,... (Ex. 35, 31). f) -Da discernimiento a los jueces. Yahv�h respondi� a Mois�s: �Re�neme setenta ancianos de Israel...ll�valos a la Tienda de Reuni�n y que est�n all� contigo. Yo bajar� a hablar contigo; tomar� parte del esp�ritu que hay en ti y lo pondr� en ellos, para que lleven contigo la carga del pueblo y no la tengas que llevar t� s�lo (N�m. 11, 16-17). g) -Concede sabidur�a a Jos�. ...y dijo Fara�n a sus servidores: ��Acaso se encontrar� otro como �ste que tenga el esp�ritu de Dios? Y dijo Fara�n a Jos�: �Despu�s de haberte dado a conocer Dios todo esto, no hay entendido ni sabio como t� (G�n. 41, 38-39). h) -Inspira a los profetas. -a Mois�s. Yahv�h respondi� a Mois�s: Re�neme setenta ancianos de Israel...Yo bajar� a hablar contigo; tomar� parte del esp�ritu que hay en ti y lo pondr� en ellos, para que lleven contigo la carga del pueblo y no la tengas que llevar t� s�lo (N�m. 11, 16-17). Y al alzar los ojos, vio Balaam a Israel acampado por tribus. Y le invadi� el Esp�ritu de Dios. Enton� su trova y dijo: Or�culo de Balaam, hijo de Beor, or�culo del var�n clarividente... (N�m. 24, 2). -a Sa�l. Te invadir� entonces el esp�ritu de Yahv�h, entrar�s en trance con ellos y quedar�s cambiado en otro hombre (1 Sam. 10, 6). Mand� Sa�l emisarios para prender a David; vieron �stos la agrupaci�n de los profetas en trance de profetizar, con Samuel a la cabeza. Vino sobre los emisarios de Sa�l el esp�ritu de Dios y tambi�n ellos se pusieron en trance (1 Sam. 19, 20). -a David. El esp�ritu de Yahv�h habla por m�, su palabra est� en mi lengua (2 Sam. 23, 2). -a El�as. ...dijo El�as a Eliseo: �P�deme lo que quieras que haga por ti antes de ser arrebatado de tu lado.� Dijo Eliseo: �Que tenga dos partes de tu esp�ritu� (2 Reg. 2, 9). -a Isa�as. �Y ahora el Se�or Yahv�h me env�a con su esp�ritu� (Is. 48, 16). El esp�ritu del Se�or Yahv�h est� sobre m�, por cuanto que me ha ungido Yahv�h (Is. 61, 1). -a Miqueas. Yo, en cambio, estoy lleno de fuerza, por el esp�ritu de Yahv�h, y de juicio y de bravura, para denunciar a Jacob su rebeld�a, y a Israel su pecado (Miq. 3, 8). -a Zacar�as. ...su coraz�n hicieron de diamante para no o�r la Ley y las palabras que Yahv�h Sebaot hab�a dirigido por su esp�ritu, por ministerio de los antiguos profetas (Zac. 7, 12). Entonces el esp�ritu de Dios revisti� a Zacar�as...que...les dijo: �As� dice Dios: �Por qu� traspas�is los mandamientos de Yahv�h?...� (2 Cro. 24, 20). -a Azar�as. Vino entonces el esp�ritu de Dios sobre Azar�as,... y le dijo: ��O�dme vosotros, As� y todo Jud� y Benjam�n!... (2 Cro. 15, 1). -a Yajaziel. Vino el esp�ritu de Yahv�h sobre Yahaziel, hijo de Zacar�as,...y dijo: ��Atended vosotros, Jud� entero y habitantes de Jerusal�n, y t�, oh rey Josafat!� (2 Cro. 20, 14). 2. El Esp�ritu Santo. Profetizaci�n -Su venida -En el momento del bautismo de Jesucristo -Su efusi�n sobre toda la Iglesia -Su don -Jesucristo profetiza su misi�n -Y la venida -La venida del Esp�ritu Santo fue profetizada en el Antiguo Testamento. Infundir� mi esp�ritu en vosotros y har� que os conduzc�is seg�n preceptos y observ�is y practiqu�is mis normas (Ez. 36, 27). Suceder� despu�s de esto que yo derramar� mi Esp�ritu en toda carne (Jl. 3, 1). Hasta en los siervos y las siervas derramar� mi Esp�ritu en aquellos d�as (Jl. 3, 2). -La venida del Esp�ritu Santo en el momento del bautismo de Jesucristo fue profetizada en el Antiguo Testamento. Reposar� sobre �l el esp�ritu de Yahv�h,... (Is. 11, 2). He aqu� mi siervo a quien yo sostengo, mi elegido en quien se complace mi alma. He puesto mi esp�ritu sobre �l... (Is. 42, 1). El esp�ritu del Se�or Yahv�h est� sobre m�,... (Is. 61, 1). -La efusi�n del Esp�ritu Santo sobre toda la Iglesia fue profetizada en el Antiguo Testamento. Suceder� despu�s de esto que yo derramar� mi Esp�ritu en toda carne (Joel 3, 1). -El don del Esp�ritu Santo fue profetizado en el Antiguo Testamento. Infundir� mi esp�ritu en vosotros y har� que os conduzc�is seg�n mis preceptos y practiqu�is mis normas (Ez. 26, 27). -Jesucristo profetiza la misi�n del Esp�ritu Santo. Pero el Par�clito, el Esp�ritu Santo, que el Padre enviar� en mi nombre, os lo ense�ar� todo y os recordar� todo lo que yo he dicho (Jn. 14, 26). Cuando venga el Par�clito, el Esp�ritu de la verdad, que procede del Padre, y que yo os enviar� de junto al Padre, �l dar� testimonio de m� (Jn. 15, 26). Pero yo os digo la verdad: Os conviene que yo me vaya; porque si no me voy, no vendr� a vosotros el Par�clito; pero si me voy, os lo enviar�;... (Jn. 16, 7). -Jesucristo profetiz� la venida del Esp�ritu Santo. �l les contest�: �...recibir�is la fuerza del Esp�ritu Santo, que vendr� sobre vosotros,... (Hch. 1, 8). 3. El Esp�ritu Santo. Promesa -Dios Padre promete que Jesucristo enviar� al E. Santo -Jesucristo promete que el Padre enviar� al E. Santo -Jesucristo promete la asistencia del E. Santo a los Ap�stoles y a su Iglesia -Dios Padre promete que Jesucristo enviar� al Esp�ritu Santo. �Mirad, yo voy a enviar sobre vosotros la Promesa de mi Padre. Por vuestra parte permaneced en la ciudad hasta que se�is revestidos del poder de lo alto� (Lc. 24, 49). Mientras estaba comiendo con ellos, les mand� que no se ausentasen de Jerusal�n, sino que aguardasen la Promesa del Padre, �que o�steis de m�: Que Juan bautiz� con agua, pero vosotros ser�is bautizados en el Esp�ritu Santo dentro de pocos d�as� (Hch. 1, 4-5). -Jesucristo promete a los Ap�stoles que el Padre les enviar� el Esp�ritu Santo. Si me am�is guardar�is mis mandamientos; y yo pedir� al Padre y os dar� otro Par�clito, para que est� con vosotros para siempre (Jn. 14, 15-16). Pero el Par�clito, el Esp�ritu Santo, que el Padre enviar� en mi nombre, os lo ense�ar� todo,... (Jn. 14, 26). -Jesucristo promete a los Ap�stoles enviarles el Esp�ritu Santo. Cuando venga el Par�clito, el Esp�ritu de la verdad, que procede del Padre y que yo os enviar� de junto al Padre, �l dar� testimonio de m� (Jn. 15, 26). Os conviene que yo me vaya; porque si no me voy, no vendr� a vosotros el Par�clito; pero si me voy, os lo enviar� (Jn. 16, 7). -Jesucristo prometi� la asistencia del Esp�ritu Santo a los Ap�stoles y a su Iglesia. Si me am�is, guardar�is mis mandamientos; y yo pedir� al Padre y os dar� otro Par�clito, para que est� con vosotros para siempre (Jn. 14, 15-16). Cuando venga �l, el Esp�ritu de la verdad, os guiar� hasta la verdad completa;... (Jn. 16, 13). ...recibir�is la fuerza del Esp�ritu Santo, que vendr� sobre vosotros, y ser�is mis testigos en Jerusal�n, en toda Judea y Samar�a, y hasta los confines de la tierra (Hch. 1, 8). 4. El Esp�ritu Santo. Venida -Su venida su don, su doctrina y su fuerza hallan su expresi�n en el N. T. -La vida y obrar de Jesucristo se consuman con su venida -La venida, el don, la doctrina y la fuerza del Esp�ritu Santo hallan su expresi�n definitiva en el Nuevo Testamento. a) -La venida. -Sobre Cristo. Y Juan dio testimonio diciendo: �He visto al Esp�ritu que bajaba del cielo como una paloma y se quedaba sobre �l (Jn. 1, 32). Aquel a quien Dios ha enviado habla las palabras de Dios, porque le da el Esp�ritu sin medida (Jn. 3, 34). -Sobre los Ap�stoles. De repente vino del cielo un ruido como el de una r�faga de viento impetuoso, que llen� toda la casa en la que se encontraban. Se les aparecieron unas lenguas como de fuego que dividi�ndose se posaron sobre cada uno de ellos; quedaron todos llenos del Esp�ritu Santo y se pusieron a hablar en otras lenguas... (Hch. 2, 2-4). -Sobre los primeros convertidos. Convert�os y que cada uno de vosotros se haga bautizar en el nombre de Jesucristo, para remisi�n de vuestros pecados; y recibir�is el don del Esp�ritu Santo;... (Hch. 2, 38). b) -El don. ...porque el amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por el Esp�ritu Santo que nos ha sido dado (Rom. 5, 5). c) -La doctrina. Pero el Par�clito, el Esp�ritu Santo, que el Padre enviar� en mi nombre, os lo ense�ar� todo y os recordar� todo lo que yo os he dicho (Jn. 14, 26). Cuando venga �l, el Esp�ritu de la verdad, os guiar� hasta la verdad completa; pues no hablar� por su cuenta, sino que hablar� lo que oiga, y os anunciar� lo que ha de venir (Jn. 16, 13). d) -La fuerza. -Sobre los Ap�stoles. ...sino que recibir�is la fuerza del Esp�ritu Santo, que vendr� sobre vosotros,... (Hch. 1, 8). -Toda la vida y toda la obra de Jesucristo se consuman con la venida del Esp�ritu Santo al mundo. Y exaltado por la diestra de Dios, ha recibido del Padre el Esp�ritu Santo prometido y ha derramado lo que vosotros veis y o�s (Hch. 2, 33). 5. El Esp�ritu Santo. Funciones -La Iglesia vive y se desarrolla gracias al influjo del E. Santo -Con su venida sustituye a Jesucristo -Inspira a la Iglesia -Gu�a a la Iglesia -Es el esp�ritu de la verdad con la misi�n de ense�arla -Distribuye carismas, ilumina a los profetas, revela el futuro y ruega al Padre por todos los hombres -La Iglesia vive y se desarrolla gracias al influjo del Esp�ritu Santo en la cabeza y en los miembros. a) -En la cabeza. Bautizado Jes�s, sali� luego del agua; y en esto se abrieron los cielos y vio al Esp�ritu de Dios que bajaba en forma de paloma y ven�a sobre �l (Mt. 3, 16). Entonces Jes�s fue conducido por el Esp�ritu al desierto para ser tentado por el diablo (Mt. 4, 1). A continuaci�n, el Esp�ritu le impulsa al desierto, y permaneci� en el desierto cuarenta d�as, siendo tentado por Satan�s (Mc. 1, 12). Jes�s, lleno del Esp�ritu Santo, se volvi� al Jord�n y fue llevado por el Esp�ritu al desierto, donde fue tentado por el diablo durante cuarenta d�as (Lc. 4, 1). Y Juan dio testimonio diciendo: �He visto al Esp�ritu que bajaba del cielo como una paloma y se quedaba con �l...� (Lc. 1, 32). b) -En los miembros. Dicho esto sopl� sobre ellos y les dijo: �Recibid el Esp�ritu Santo...� (Jn. 20, 22). ...sino que recibir�is la fuerza del Esp�ritu Santo, que vendr� sobre vosotros, y ser�is mis testigos en Jerusal�n, en toda Judea y Samar�a, y hasta los confines de la tierra (Hch. 1, 8). Entonces Pedro, lleno del Esp�ritu Santo, les dijo: �Jefes del pueblo...� (Hch. 4, 8). Pareci� bien la propuesta a toda la asamblea y escogieron a Esteban, hombre lleno de fe y de Esp�ritu Santo, a Felipe,... (Hch. 6,5). Pero �l, lleno del Esp�ritu Santo, mir� fijamente al cielo y vio la gloria de Dios y a Jes�s que estaba en pie a la diestra de Dios;... (Hch. 7, 55). Fue Anan�a, entr� en la casa, le impuso las manos y le dijo: �Sa�l, hermano, me ha enviado a ti el Se�or Jes�s, el que se te apareci� en el camino por donde ven�as, para que recobres la vista y seas lleno del Esp�ritu Santo� (Hch. 9, 17). Y Dios, conocedor de los corazones, dio testimonio en su favor comunic�ndoles el Esp�ritu Santo como a nosotros;... (Hch. 15, 8). -El Esp�ritu Santo con su venida sustituye a Jesucristo entre los fieles, despu�s de su ascensi�n a los cielos. Si me am�is, guardar�is mis mandamientos; y yo pedir� al Padre y os dar� otro Par�clito, para que est� con vosotros para siempre (Jn. 14, 16). Os conviene que yo me vaya; porque si no me voy, no vendr� a vosotros el Par�clito; pero si me voy os lo enviar� (Jn. 16, 7). -El Esp�ritu Santo inspira a la Iglesia. ...el amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por el Esp�ritu Santo que nos ha sido dado (Rom. 5, 5). En efecto, todos los que son guiados por el Esp�ritu Santo de Dios son hijos de Dios (Rom. 8, 14). La prueba de que sois hijos es que Dios ha enviado a nuestros corazones el Esp�ritu de su Hijo que clama que clama �Abb�, Padre! (G�l. 4, 6). Pero, si sois conducidos por el Esp�ritu, no est�is bajo la Ley (G�l. 5, 18). -El Esp�ritu Santo gu�a a la Iglesia. Cuando venga �l, el Esp�ritu de la Verdad, os guiar� hasta la verdad completa;... (Jn. 16, 13). -El Esp�ritu Santo es el Esp�ritu de la verdad con la misi�n de ense�arla. ...y yo pedir� al Padre y os dar� otro Par�clito, para que est� con vosotros para siempre, el Esp�ritu de la verdad,... (Jn. 14, 16-17). Cuando venga el Par�clito, el Esp�ritu de la verdad, que procede del Padre, �l dar� testimonio de m� (Jn. 15, 26). Cuando venga �l, el Esp�ritu de la verdad, os guiar� hasta la verdad completa; pues no hablar� por su cuenta, sino que hablar� lo que oiga, y os anunciar� lo que ha de venir (Jn. 16, 13). -Las funciones m�s propias del Esp�ritu Santo son: distribuir los carismas, iluminar a los profetas, revelar el futuro y rogar al Padre por todos los hombres. a) -Distribuir los carismas: Se les aparecieron unas lenguas como de fuego que dividi�ndose se posaron sobre cada uno de ellos; quedaron todos llenos del Esp�ritu Santo y se pusieron a hablar en otras lenguas, seg�n el Esp�ritu les conced�a expresarse (Hch. 2, 4). b) -Iluminar a los profetas. Replic�: Pues �c�mo David, movido por el Esp�ritu, le llama Se�or,...? (Mt. 22, 43). c) -Revelar el futuro a los Ap�stoles. Pero el Par�clito, el Esp�ritu Santo, que el Padre enviar� en mi nombre, os lo ense�ar� todo y os recordar� todo lo que yo os he dicho (Jn. 14, 26). Cuando venga �l, el Esp�ritu de la verdad, os guiar� hasta la verdad completa; pues no hablar� por su cuenta, sino que hablar� lo que oiga, y os anunciar� lo que ha de venir (Jn. 16, 13). d) -Rogar al Padre por los hombres. ...mas el Esp�ritu mismo intercede por nosotros con gemidos inefables (Rom. 8, 26). 6. El Esp�ritu Santo. Fines -Suceder a Jesucristo, dar testimonio de �l, corregir los vicios convencerles de ellos y de la victoria de Cristo y asistir a la Iglesia -Permanecer con los disc�pulos de Jes�s y convertirles en morada del Padre y del Hijo -Dar testimonio de Jesucristo a los Ap�stoles para que ellos tambi�n lo den -Los fines por los cuales el Padre y el Hijo env�an al Esp�ritu Santo al mundo son: Suceder a Jesucristo en las funciones de Abogado y de maestro, dar testimonio de Jesucristo a los Ap�stoles, corregir los vicios de los hombres y convencerles de ellos y de la victoria ganada por Cristo contra Satan�s y asistir a la Iglesia hasta el final de los tiempos. a) -Suceder a Jesucristo. -en la funci�n de abogado. ...y yo pedir� al Padre y os dar� otro Par�clito, para que est� con vosotros para siempre,... (Jn. 14, 16). -en la funci�n de maestro. Pero el Par�clito, el Esp�ritu Santo, que el Padre enviar� en mi nombre, os lo ense�ar� todo y os recordar� todo lo que yo os he dicho (Jn. 14, 26). b) -Dar testimonio de Jesucristo a los Ap�stoles. Cuando venga el Par�clito, el Esp�ritu de la verdad, que procede del Padre, y que yo os enviar� de junto al Padre, �l dar� testimonio de m� (Jn. 15, 26). c) -Corregir los vicios de los hombres. ...y cuando el Par�clito venga, convencer� al mundo en lo referente al pecado, en lo referente a la justicia y en lo referente al juicio;... (Jn. 16, 8). -del pecado de la incredulidad. Jes�s a�adi�: �...Ya os he dicho que morir�is en vuestros pecados, porque si no cre�is que Yo Soy, morir�is en vuestros pecados� (Jn. 8, 24). Jes�s respondi�: �...Si digo la verdad, �por qu� no me cre�is? (Jn. 8, 46). Jes�s le respondi�: �...Si yo no hubiera venido y no les hubiera hablado, no tendr�an pecado; pero ahora no tienen excusa de su pecado (Jn. 14, 23 y 15, 22). d) -convencerles de ellos. Jes�s respondi�: �...Si digo la verdad, �por qu� no me cre�is?� (Jn. 8, 46). Jes�s le respondi�: �...Si yo no hubiera venido y no les hubiera hablado, no tendr�an pecado; pero ahora no tienen excusa de su pecado (Jn. 14, 23 y 15, 22). e) -Y de la victoria ganada por Cristo. Jes�s les respondi�: �...Ahora es el juicio de este mundo; ahora el Pr�ncipe de este mundo ser� echado abajo� (Jn. 12, 31). ...en lo referente al juicio, porque el Pr�ncipe de este mundo est� condenado (Jn. 16, 11). Aclaraci�n. El Pr�ncipe de este mundo se refiere a Satan�s. f) -Asistir a su Iglesia hasta el final de los tiempos. ...y yo pedir� al Padre y os dar� otro Par�clito, para que est� con vosotros para siempre (Jn. 14, 16). -Despu�s de la ascensi�n de Jesucristo a los cielos vendr� el Esp�ritu Santo, permanecer� con los disc�pulos de Jes�s y les convertir� en la morada del Padre y del Hijo. a) -Vendr� el Esp�ritu Santo. ...y yo pedir� al Padre y os dar� otro Par�clito, para que est� con vosotros para siempre (Jn. 14, 16). pero el Par�clito, el Esp�ritu Santo, que el Padre enviar� en mi nombre, os lo ense�ar� todo... (Jn. 14, 26). Cuando venga el Par�clito, el Esp�ritu de la verdad, que procede del Padre, y que yo os enviar� de junto al Padre,... (Jn. 15, 26). Os conviene que yo me vaya; porque si no me voy, no vendr� a vosotros el Par�clito; pero si me voy os lo enviar�;... (Jn. 16, 7). b) -Permanecer� en ellos. ...y yo pedir� al Padre y os dar� otro Par�clito, para que est� con vosotros para siempre, el Esp�ritu de la verdad, a quien el mundo no puede recibir, porque no le ve ni le conoce. Pero vosotros le conoc�is, porque mora con vosotros y en vosotros est� (Jn. 14, 16-17). c) -Les convertir� en la morada del Padre y del Hijo. Jes�s le respondi�: �Si alguno me ama, guardar� mi Palabra, y mi Padre le amar�, y vendremos a �l y haremos morada en �l (Jn. 14, 20, 23). -La misi�n del Esp�ritu Santo a los Ap�stoles fue para dar testimonio de Jesucristo y para que ellos tambi�n lo den. a) -Para dar testimonio de Jesucristo. Cuando venga el Par�clito. Cuando venga el Par�clito, el Esp�ritu de la verdad, que procede del Padre, y que yo os enviar� de junto al Padre, �l dar� testimonio de m� (Jn. 15, 16). b) -Para que los Ap�stoles tambi�n lo den. ...sino que recibir�is la fuerza del Esp�ritu Santo, que vendr� sobre vosotros, y ser�is mis testigos en Jerusal�n, en toda Judea y Samaria, y hasta los confines de la tierra (Hch. 1, 8). 7. El Esp�ritu Santo. Dones -Son siete -No son actos transitorios, sino h�bitos sobrenaturales -La sola moci�n de la raz�n del hombre no basta para conseguir su fin �ltimo, sino que necesitamos adem�s los dones del E. Santo -El E. Santo es el que distribuye los dones entre los hombres -La paz y el gozo espiritual, como dones del E. Santo, superan todos los bienes de este mundo -Permanecer para siempre en el alma de los bienaventurados -Los dones del Esp�ritu Santo son siete: Sabidur�a, entendimiento, consejo, fortaleza, ciencia, piedad y temor de Dios. En la justificaci�n, adem�s de la gracia y de las virtudes infusas, son necesarios los dones del Esp�ritu Santo para el progreso espiritual y para perseverar en el bien. Saldr� un v�stago del tronco de Jes�, y un reto�o de sus ra�ces brotar�. Reposar� sobre �l el Esp�ritu de Yahv�h: esp�ritu de sabidur�a e inteligencia, esp�ritu de consejo y fortaleza, esp�ritu de ciencia y temor de Yahv�h (Is. 11, 1-2). Aclaraci�n. En la traducci�n de los LXX las palabras �eusebia� y �fobos�, que significan piedad y temor. Por otra parte, ciertas mociones que nos mueven a venerar a Dios, pertenecen al don de piedad, como consta en: ...recibisteis un esp�ritu de hijos adoptivos que nos hace exclamar: �Abb�, Padre! (Rom. 8, 15). Es clara la existencia del don de piedad en la Sagrada Escritura. -Los Dones del Esp�ritu Santo no son actos transitorios, sino h�bitos sobrenaturales o infusos. Si me am�is, guardar�is mis mandamientos; y yo pedir� al Padre y os dar� otro Par�clito, para que est� con vosotros para siempre, el Esp�ritu de la verdad, a quien el mundo no puede recibir, porque no le ve ni le conoce. Pero vosotros le conoc�is, porque mora en vosotros y en vosotros est� (Jn. 14, 15-17). Aclaraci�n. El Esp�ritu Santo no ser� en los hombres sin sus dones, por tanto, permanecen en los hombres; luego no son actos transitorios, sino verdaderos h�bitos infundidos por Dios. -Hay otros textos del Antiguo y del Nuevo Testamento, que no sirven de fundamento serio para demostrar la doctrina de los Dones del Esp�ritu Santo, pero los Santos Padres y la misma Iglesia los han interpretado como clara alusi�n a los mismos. �Acaso se encontrar� otro como �ste que tenga el esp�ritu de Dios? (G�n. 41, 38). ...y le he llenado del esp�ritu de Dios concedi�ndole habilidad, pericia y experiencia en toda clase de trabajos;... (Ex. 31, 3). Y al alzar los ojos, vio Balaam a Israel acampado por tribus. Y le invadi� el esp�ritu de Dios (N�m. 24, 2). Josu�, hijo de Nun, estaba lleno del esp�ritu de sabidur�a, porque Mois�s le hab�a impuesto las manos (Deut. 34, 9). ...tu esp�ritu bueno me gu�e por una tierra llana (Sal. 142, 10). Por eso ped� y se me concedi� la prudencia; supliqu� y me vino el esp�ritu de Sabidur�a (Sab. 7, 7). Pues hay en ella un esp�ritu inteligente, santo... (Sab. 7, 22). ...porque Dios no ama sino a quien vive por la Sabidur�a (Sab. 7, 28). Y �qui�n hubiera conocido tu voluntad, si t� no le hubieses dado la Sabidur�a y no le hubieses enviado de lo alto tu Esp�ritu Santo? (Sab. 9, 17). ...le concedi� la palma con un duro combate para ense�arle que la piedad contra todo prevalece (Sab. 10, 12). El esp�ritu del Se�or Yahv�h est� sobre m�,... (Is. 61, 1). Yo, en cambio, estoy lleno de fuerza, por el esp�ritu de Yahv�h, y de juicio y bravura,... (Mich. 3, 8). ...porque el Esp�ritu Santo os ense�ar� en aquel mismo momento lo que conviene decir (Lc. 12, 12). ...el Esp�ritu de la verdad, a quien el mundo no puede recibir,... (Jn. 14, 17). Pero el Par�clito, el Esp�ritu Santo, que el Padre enviar� en mi nombre, os lo ense�ar� todo... (Jn. 14, 26). De repente vino del cielo un ruido como el de una r�faga de viento impetuoso... (Hch. 2, 2). ...y recibir�is el don del Esp�ritu Santo (Hch. 2, 38). ...todos los que son guiados por el Esp�ritu de Dios son hijos de Dios (Rom. 8, 14). ...el Esp�ritu viene en ayuda de nuestra flaqueza (Rom. 8, 26). Porque a nosotros nos lo revel� Dios por medio del Esp�ritu... (1 Cor. 2, 10). Porque a uno se le da por el Esp�ritu palabra de sabidur�a; a otro palabra de ciencia seg�n el mismo Esp�ritu; a otro, carisma de curaciones, en el �nico Esp�ritu; a otro, poder de milagros; a otro, profec�a; a otro discernimiento de esp�ritus; a otro, diversidad de lenguas; a otro, don de interpretarlas. Pero todas estas cosas las obra un mismo y �nico Esp�ritu, distribuy�ndolas a cada uno en particular seg�n su voluntad (1 Cor. 12, 8-11). ...de parte de los siete Esp�ritus que est�n ante su trono... (Apoc. 1, 4). Esto dice el que tiene los siete Esp�ritus de Dios y las siete estrellas (Apoc. 3, 1). ...delante del trono arden siete antorchas de fuego, que son los siete Esp�ritu de Dios (Apoc. 4, 5). ...ten�a siete cuernos y siete ojos, que son los siete Esp�ritus de Dios, enviados a toda la tierra (Apoc. 5, 6). -La sola moci�n de la raz�n natural del hombre no basta para conseguir su fin �ltimo sobrenatural, sino que son necesarios adem�s los dones del Esp�ritu Santo. Es una deducci�n muy clara de estos textos: En efecto, todos los que son guiados por el Esp�ritu de Dios son hijos de Dios (Rom. 8, 14). El Esp�ritu mismo se une a nuestro esp�ritu para dar testimonio de que somos hijos de Dios. Y, si hijos, tambi�n herederos; herederos de Dios y coherederos de Cristo,... (Rom. 8, 16). Pero, si sois conducidos por el Esp�ritu, no est�is bajo la ley (G�l. 5, 18). Aclaraci�n. �Bajo la ley�, se entiende �sometidos a las tendencias del pecado�. -El Esp�ritu Santo es el que distribuye los dones entre los hombres. Pero teniendo dones diferentes, seg�n la gracia que nos ha sido dada, si es el don de profec�a ejerz�moslo en la medida de nuestra fe; si es el ministerio, en el ministerio; la ense�anza, ense�ando; la exhortaci�n, exhortando (Rom. 12, 6-7). A cada cual se le otorga la manifestaci�n del Esp�ritu para provecho com�n. Porque a uno se le da por el Esp�ritu palabra de sabidur�a; a otro palabra de ciencia seg�n el mismo Esp�ritu; a otro fe, en el mismo Esp�ritu; a otro carisma de curaciones, en el �nico Esp�ritu; a otro, poder de milagros; a otro, profec�a; a otro discernimiento de Esp�ritus; a otro diversidad de lengua; a otro, don de interpretarlas. Pero todas estas cosas las obra un mismo y �nico Esp�ritu, distribuy�ndolas a cada uno en particular seg�n su voluntad (1 Cor. 12, 7-11). Aclaraci�n. -Don de sabidur�a para exponer las verdades cristianas m�s elevadas. -Don de ciencia para explicar las verdades elementales del cristianismo. -Don de fe para poseerla en grado extraordinario. -Don de discernimiento de esp�ritus para determinar el origen de los fen�menos carism�ticos: Dios, la naturaleza, el demonio. -Don de lenguas �para hablar otras seg�n el Esp�ritu les conceda expresarse� (Act 2, 4). -La paz y el gozo espiritual, como dones del Esp�ritu Santo, superan todos los bienes de este mundo. a) -La paz. Y la paz de Dios, que supera todo conocimiento, custodiar� vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jes�s (Fil. 4, 7). b) -El gozo. Estoy lleno de consuelo y sobreabundo de gozo en todas nuestras tribulaciones (2 Cor. 7, 4). -Los dones del Esp�ritu Santo, en cuanto a su esencia, permanecen para siempre en el alma de los Bienaventurados. No consta claramente en los textos sagrados, pero hay una deducci�n, s�lo poco probable, de los siguientes vers�culos: ...para que Dios sea todo en todo (1 Cor. 15, 28). ...un s�lo Dios y Padre de todos, que est� sobre todos, por todos y en todos (Ef. 4, 5). Aclaraci�n. Toda la plenitud de Dios estar� pose�da por cada uno de los bienaventurados, y por tanto la plenitud de los dones del Esp�ritu Santo, pero en cuanto a la materia, desaparecen en parte, p.e. el don de temor quedar� reducido al temor reverencial ante la inmensidad de Dios. Lo mismo ser� con los otros dones en el aspecto relativo de la vida activa, que cesa para siempre en la bienaventuranza eterna. 8. El Esp�ritu Santo. Frutos -Son doce -La paz no es una virtud -Es un efecto de la Justicia -Los frutos del Esp�ritu Santo son: Amor, alegr�a, paz, paciencia, afabilidad, bondad, fidelidad, mansedumbre, templanza, fe, continencia y castidad. Los frutos del Esp�ritu Santo son ciertas operaciones que proceden de la virtudes y de los dones; son como el �ltimo t�rmino de la vida sobrenatural. ...el fruto del Esp�ritu es amor, alegr�a, paz, paciencia, afabilidad, bondad, fidelidad, mansedumbre, templanza;... (G�l. 5, 22). Aclaraci�n. Los otros tres, fe, continencia y castidad, constan en el texto de la Vulgata (G�l. 5, 23). S. Pablo no tuvo intenci�n de enumerarlos todos; quiso �nicamente mostrar qu� g�nero de frutos producen las obras de la carne y cuales otros producen las del Esp�ritu, y para ello cita unos cuantos por v�a de ejemplo. -La paz espiritual no es propiamente una virtud. Tened sal en vosotros y tened paz unos con otros (Mc. 9, 50). ...procurando el bien ante todos los hombres; en lo posible, y en cuanto de vosotros depende, en paz con todos los hombres (Rom. 12, 18). Procurad la paz con todos y la santidad, sin la cual nadie ver� al Se�or (Hebr. 12, 14). Aclaraci�n. El mismo Cristo impuso el precepto de conservar la paz, a sus ap�stoles y a nosotros a trav�s de ellos. -La paz espiritual en nosotros indirectamente es tambi�n efecto de la justicia. ...el producto de la justicia ser� la paz, el fruto de la equidad, una seguridad perpetua (Is. 32, 17). Aclaraci�n. La paz es tambi�n, indirectamente, obra de la justicia, en cuanto que elimina los obst�culos que se opondr�an a ella. 9. El Esp�ritu Santo. Efectos -Es el Esp�ritu de Cristo -Produce un principio interior de vida nueva -Es fuerza divina que act�a -Hace al cristiano Hijo de Dios -Instruye y dirige a aquellos en quienes habita -Intercede por los hombres -El Esp�ritu Santo es el Esp�ritu de Cristo. Pues yo s� que esto servir� para mi salvaci�n gracias a vuestras oraciones y a la ayuda prestada por el Esp�ritu de Jesucristo,... (Fil. 1, 19). La prueba de que sois hijos es que Dios ha enviado a nuestros corazones el Esp�ritu de su Hijo que clama �Abb�, Padre! (G�l. 4, 6). -El Esp�ritu Santo de la promesa produce un principio interior de vida nueva que Dios concede, env�a, otorga y derrama. a) -Concede. Si pues, vosotros siendo malos, sab�is dar cosas buenas a vuestros hijos, �cu�nto m�s el Padre del cielo dar� el Esp�ritu Santo a los que se lo pidan! (Lc. 11, 13). Aquel a quien Dios ha enviado habla las palabras de Dios, porque le da el Esp�ritu sin medida (Jn. 3, 34). ...y yo pedir� al Padre y os dar� otro Par�clito, para que est� con vosotros para siempre, el Esp�ritu de la verdad,... (Jn. 14, 16). b) -Env�a. La prueba de que sois hijos es que Dios ha enviado a vuestros corazones el Esp�ritu de su Hijo... (G�l. 4, 6). c) -Otorga. El que os otorga, pues, el Esp�ritu y obra milagros entre vosotros �lo hace porque observ�is la ley o porque ten�is fe en la predicaci�n? (G�l. 3, 5). d) -Derrama. ...�l nos salv�...por medio del ba�o de regeneraci�n y de renovaci�n del Esp�ritu Santo, que �l derram� sobre nosotros con largueza... (Tit. 3, 5). -El Esp�ritu Santo significa fuerza divina carism�tica que act�a. El Esp�ritu de Yahv�h vino sobre �l, que fue juez en Israel y sali� a la guerra (Jc. 3, 10). El Esp�ritu de Yahv�h vino sobre Jeft�, que recorri� Gallad y Manas�s, pas� por Misp� de Galaad... (Jc. 11, 29). Vino el Esp�ritu de Yahv�h sobre Yajaciel...y dijo. ��Atended vosotros, Jud� entero y habitantes de Jerusal�n...No tem�is ni os asust�is ante esta gran muchedumbre; porque esta guerra no es vuestra sino de Dios (2 Cro. 20, 14-15). -El Esp�ritu Santo hace al cristiano hijo de Dios, morada de Cristo, principio de resurrecci�n, le marca con un sello, se encuentra con �l a t�tulo e arr�s y de primicias, sustituye el principio malo de la carne, es principio de fe, de conocimiento sobrenatural, de amor, de santificaci�n, de conducta moral, de intrepidez apost�lica, de esperanza, de oraci�n, de uni�n con Cristo y de realizaci�n de la unidad de su Cuerpo M�stico. a) -Hijo de Dios. En efecto, todos los que son guiados por el Esp�ritu de Dios son hijos de Dios (Rom. 8, 14). b) -Morada de Cristo. ...para que os conceda, seg�n la riqueza de su gloria, que se�is vigorosamente fortalecidos por la acci�n de su Esp�ritu en el hombre interior, que Cristo habite por la fe en vuestro corazones,... (Ef. 3, 16-17). c) -Principio de resurrecci�n. ...Aquel que resucit� a Cristo Jes�s de entre los muertos dar� tambi�n la vida a vuestros cuerpos mortales por su Esp�ritu que habita en vosotros (Rom. 8, 11). d) -Le marca con un sello. ...vosotros tras haber o�do la Palabra de la verdad, la Buena Nueva de vuestra salvaci�n, y cre�do tambi�n en �l, fuisteis sellados con el esp�ritu Santo de la Promesa,... (Ef. 1, 13). No entristezc�is al Esp�ritu Santo de Dios, con el que fuisteis sellados par el d�a de la redenci�n (Ef. 4, 30). e) -Se encuentra en �l a t�tulo de arras. Y es Dios el que nos conforma juntamente con vosotros en Cristo...y nos dio en arras el Esp�ritu en nuestros corazones (2 Cor. 1, 22). Y el que nos ha destinado a eso es Dios, el cual nos ha dado en arras del Esp�ritu (2 Cor. 5, 5). ...fuisteis sellados con el Esp�ritu Santo de la Promesa, que es prenda de nuestra herencia,... (Ef. 1, 14). f) -y de primicias. ...nosotros que poseemos las primicias del Esp�ritu,... (Rom. 8, 23). g) -Sustituye el principio malo de la carne. Mas, al presente, hemos quedado emancipados de la ley, muertos a aquello que nos ten�a aprisionados, de modo que sirvamos con un esp�ritu nuevo y no con la letra vieja (Rom. 7, 6). h) -Es principio de fe. ...y nadie puede decir: ��Jes�s es el Se�or!� sino por influjo del Esp�ritu Santo (1 Cor. 12, 3). Pero poseyendo aquel esp�ritu de fe como dice la Escritura: Cre�, por eso habl�,... (2 Cor. 4, 13). i) -De conocimiento sobrenatural. Porque a nosotros nos lo revel� Dios por medio del Esp�ritu;... (1 Cor. 2, 10). A cada cual se le otorga la manifestaci�n del Esp�ritu para provecho com�n. Porque a uno se le da por el Esp�ritu palabra de sabidur�a; a otro, palabra de ciencia, seg�n el mismo Esp�ritu; a otro fe, en el mismo Esp�ritu; ...Pero todas estas cosas las obra un mismo y �nico Esp�ritu, distribuy�ndolas a cada uno en particular seg�n su voluntad (1 Cor. 12, 8-11). En efecto, nadie le entiende: dice en esp�ritu cosas misteriosas (1 Cor. 14, 2). ...para que...el Padre de la gloria, es conceda esp�ritu de sabidur�a y de revelaci�n para concederle perfectamente;... (Ef. 1, 17). ...iluminando los ojos de vuestro coraz�n para que conozc�is cual es la esperanza a que hab�is sido llamados por �l; cual es la riqueza de la gloria otorgada por �l en herencia a los santos, y cuales la soberana grandeza de su poder para nosotros, los creyentes, conforme a la eficacia de su fuerza poderosa,... (Ef. 1, 18-19). ...para que os conceda, seg�n la riqueza de su gloria, que se�is vigorosamente fortalecidos por la acci�n de su Esp�ritu en el hombre interior, que Cristo habite por la fe en vuestros corazones, para que arraigados y cimentados en el amor, pod�is comprender con todos los santos cual es la anchura y la longitud, la altura y la profundidad, y conocer el amor de Cristo, que excede a todo conocimiento,... (Ef. 3, 16-19). j) -de amor. ...porque el amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por el Esp�ritu Santo que nos ha sido dado (Rom. 5, 5). ...fiel ministro de Cristo,...el cual nos inform� tambi�n de vuestro amor en el Esp�ritu (Col. 1, 7-8). k) -de santificaci�n. ...ejerciendo el sagrado oficio del Evangelio de Dios, para que la oblaci�n de los gentiles sea agradable, santificada por el Esp�ritu Santo (Rom. 15, 16). Pero hab�is sido lavados, hab�is sido santificados, hab�is sido santificados, hab�is sido justificados en el nombre del Se�or Jesucristo y en el Esp�ritu de nuestro Dios (1 Cor. 6, 11). ...Dios os ha escogido desde el principio para la salvaci�n mediante la acci�n santificadora del Esp�ritu,... (2 Tess. 2, 13). l) -de conducta moral. ...a fin de que la justicia de la ley se cumpliera en nosotros que seguimos una conducta, no seg�n la carne, sino seg�n el esp�ritu (Rom. 8, 4). Por mi parte os digo: Si viv�s seg�n el Esp�ritu, no dar�is satisfacci�n a las apetencias de la carne. Pues la carne tiene apetencias contrarias al esp�ritu, el esp�ritu contrarias a la carne, como que son entre s� antag�nicos,... (G�l. 5, 16-17). m) -de intrepidez apost�lica. Porque no nos dio el Se�or a nosotros un esp�ritu de timidez, sino de fortaleza, de caridad y de templanza (2 Tim. 1, 7). ...yo s� que esto servir� para mi salvaci�n gracias a vuestras oraciones y al a ayuda prestada por el Esp�ritu de Jesucristo,... (Fil. 1, 19). n) -de esperanza. El Dios de la esperanza os colme de todo gozo y paz en vuestra fe, hasta rebosar de esperanza por la fuerza del Esp�ritu Santo (Rom. 15, 13). Pero a nosotros nos mueve el Esp�ritu a guardar por la fe los bienes esperados por la justicia (G�l. 5, 5). �) -de oraci�n. Y de igual manera, el Esp�ritu viene en ayuda de nuestra flaqueza. Pues nosotros no sabemos pedir como conviene; m�s el Esp�ritu mismo intercede por nosotros con gemidos inefables,... (Rom. 8, 26). o) -une con Cristo. Mas el que se une al Se�or, se hace un s�lo esp�ritu con �l (Rom. 6, 17). p) -realiza la unidad del Cuerpo M�stico. Porque en un s�lo Esp�ritu hemos sido todos bautizados, para no formar m�s que un cuerpo, jud�os y griegos, esclavos y libres. Y todos hemos bebido de un s�lo Esp�ritu (1 Cor. 12, 13). Pues por �l, unos y otros tenemos acceso al Padre en un mismo Esp�ritu (Ef. 2, 18). Un s�lo Cuerpo y un s�lo Esp�ritu, como una es la esperanza a que hab�is sido llamado (Ef. 4, 4). -El Esp�ritu Santo instruye y dirige a aquellos en quienes habita. Pero el Par�clito, el Esp�ritu Santo, que el Padre enviar� en mi nombre, os lo ense�ar� todo y os recordar� todo lo que yo os he dicho (Jn. 14, 26). Cuando venga el Par�clito, el Esp�ritu de la verdad, que procede del Padre, y que yo os enviar� de junto al Padre, �l dar� testimonio de m� (Jn. 15, 26). Cuando venga �l, el Esp�ritu de la verdad, os guiar� hasta la verdad completa; pues no hablar� por su cuenta, sino pie hablar� lo que oiga, y os anunciar� lo que ha de venir (Jn. 16, 13). �l me dar� gloria, porque recibir� de lo m�o y os lo comunicar� a vosotros (Jn. 16, 14). -El Esp�ritu Santo intercede por los hombres. Y de igual manera, el Esp�ritu viene en ayuda de nuestra flaqueza. Pues nosotros no sabemos pedir como conviene; mas el Esp�ritu mismo intercede por nosotros con gemidos inefables, y el que escruta los corazones conoce cual es la aspiraci�n del Esp�ritu, y que su intercesi�n a favor de los santos es seg�n Dios (Rom. 8, 26-27). |
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