Los anticonceptivos, causa de alcoholismo, drogadicción y frigidez
Javier Marcó, profesor de Fisiología Animal de la Universidad de Santiago, ha entregado a sus alumnos, en forma de apuntes, sus teorías sobre la anticoncepción
SANTIAGO. Los apuntes de la asignatura «Fisiología Animal», de tercero de Biología de la Universidad de Santiago, relatan efectos secundarios por el uso de anticonceptivos, entre los que mencionan frigidez y depresión; dificultades en la relación de pareja; falta de respeto a la vida, e incluso disminución de la libertad y aumento del número de divorcios. Varios estudiantes comentaron a ABC la necesidad de una intervención del decano de Biología, o del rector Senén Barro, para evitar los «efectos secundarios» de los mensajes del profesor.
El texto repartido por el profesor Javier Marcó Bach entre los alumnos de tercero de la facultad establece que el uso de anticonceptivos «puede propiciar irresponsabilidad ante la vida en adolescentes: pueden quebrar el equilibrio de la personalidad en maduración, con tendencia a la evasión con drogas, alcoholismo y conductas que pueden producir traumas físicos y psíquicos a veces irreparables».
El docente explica que «el uso continuado de los anticonceptivos rompe un conjunto de componentes psicofisiológicos de una vida sexual normal y puede producir alteraciones en la conducta». Y añade: «Pueden hacer más ardua la armonía, felicidad y estabilidad, ya que si falta rectitud fomentan el egoísmo y la búsqueda principalmente de la satisfacción del propio deseo, con lo que se puede acabar usando al otro, siendo incapaz de dominar el instinto», para advertir que con su uso «se duplican los divorcios».
El profesor Javier Marcó defiende en el documento el uso de métodos de reconocimiento de la fertilidad naturales -«basados en la detección de los periodos fértiles mediante signos externos que ocurren de manera natural durante el ciclo femenino», que considera que permiten una mayor «racionalidad y libertad»; son de «eficacia comparable a los mejores anticonceptivos y permiten una «mayor probabilidad en la posibilidad de elección del sexo del hijo».
El docente atribuye también a los anticonceptivos el efecto de provocar «una mentalidad cerrada a la vida». En este sentido, argumenta que «la ruptura sistemática de unión que existe en la biología entre sexualidad y vida, y de modo inconsciente en el psiquismo humano, produce una falta de respeto a la vida, que favorece el aborto cuando falla el anticonceptivo».
Por último, asegura a sus alumnos que «está demostrado que la depresión y frigidez son efectos secundarios demostrados por la utilización de anticonceptivos hormonales», pero puntualiza que «en los demás se llega a lo mismo por cambios en la motivación y significado de la sexualidad. Si se busca predominantemente la satisfacción sensorial a toda costa, como con el tiempo disminuye el placer, se llega al hastío y a sentirse objeto, con la consiguiente depresión y frigidez».