LORETO: SANTUARIO DE LA CASA DEL ENFERMO
La iconografía tradicional representa frecuentemente a San José sufriendo y muriendo en la Santa Casa. Las veneradas paredes han conocido también el dolor, la enfermedad y la muerte.
Aquí acuden peregrinos enfermos de todas partes, especialmente aquellos conducidos por el UNITALSI y por otras asociaciones similares. Vienen a pedir consuelo y alivio a la Virgen en el sufrimiento.
Algunas veces la sonrisa de la Madre obra prodigiosas curaciones. Más frecuentemente su caricia desciende a los corazones infundiendo fe y coraje en el duro camino del sufrimiento.
Oración del Enfermo
Señor Jesús,
la enfermedad ha golpeado a la puerta de mi vida;
una experiencia dura,
una realidad difícil de aceptar. Sin embargo te agradezco verdaderamente esta enfermedad:
Me ha hecho tocar con la mano la fragilidad y la precariedad de la existencia humana. Ahora miro todo con otros ojos: lo que soy y lo que tengo, no me pertenece,
es un don.
He descubierto qué quiere decir depender, tener necesidad de todo
y de todos,
no poder hacer nada solo. He probado la soledad y la angustia,
pero también el afecto y la amistad de tantas personas.
¡ Señor!
También se me hace difícil repetir: "Hágase tu voluntad". Te ofrezco mis sufrimientos y los uno a los de Cristo. Bendice a las personas que me asisten
y a aquellas que sufren conmigo.
María, Nuestra Señora
de Loreto,
soy tu devoto:
intercede por mí
ante tu Hijo. Amén.