5. La pornografía es un estimulo a la violencia sexual y a la violación
Páginas relacionadas
Estudio: Pornografía distorsiona
la sexualidad en el matrimonio
En 1986, el informe de la Comisión Meese sobre la Pornografía, encargado por el Gobierno americano y publicado por el Departamento Federal de la Justicia de los Estados Unidos, hacía balance de la influencia de la legalización de la pornografía sobre la criminalidad sexual en los Estados Unidos. Este informe muestra el papel central de la pornografía en el desarrollo de la violencia sexual.[1] Las estadísticas muestran un neto aumento de las violaciones en los Estados donde la pornografía es la tolerada y de lo más extendida.
Según una investigación hecha en las prisiones, un 77% de los pederastas que ha molestado a los pequeños muchachos y un 87% de los que han molestado a las pequeñas muchachas reconocieron el papel determinante de la literatura pornográfica sobre sus pensamientos y sus comportamientos. Por otra parte, Ken Lanning, especialista de la pornografía del FBI, reveló ante la comisión Meese que cuando policías buscan a un delincuente sexual, encuentran casi siempre con él una abundancia de material pornográfico. Un informe de la policía de Michigan pone de manifiesto que en un 40% de los crímenes sexuales, el criminal reconoció haber utilizado material pornográfico justo antes de pasar al acto.
Investigaciones hechas acerca de grupos de estudiantes por la comisión Meese pusieron de manifiesto que un consumo bastante masivo de material pornográfico modifica la imagen que el muchacho se hace de la mujer y lo vuelve indulgente frente a la violación.
Pero la prueba ciertamente más definitiva y más aterradora le encontramos en lo conduce ineludiblemente del sexo a la violencia. Se trata de lo que se llama, en el otro lado del Atlántico, el snuff. Esta palabra designa películas pornográficas donde se mata a las actrices literalmente en vivo y en directo, después de haberla humillado de la manera más vergonzosa. Varios escándalos ya estallaron, con el descubrimiento de cadáveres enterrados cerca de los lugares donde se habían rodado estas horribles masacres.
Sabiendo todo eso, ¿cómo negar el papel preponderante de la pornografía en el aumento vertiginoso de la criminalidad sexual en los países desarrollados? Recordemos que en Francia, entre 1985 y 1990, el número de las denuncias para violación aumentó en un 62%, lo que representa un índice de crecimiento anual del 9%. Según el informe sobre el comportamiento sexual en Francia de 1993, aproximadamente una de cada 20 mujeres (5%) dicen haber sido víctima de relaciones sexuales por coacción. Para las mujeres entre 20 y 34 años, el porcentaje es del 7%. En un 77% de los casos, esta agresión sexual tuvo lugar antes de 18 años; en un 67% de los casos antes de 15 años; en un 25% de los casos antes de 12 años. Todas estas cifras duplicaron en 20 años.[2] Otro informe especializado sobre < < Los niños víctimas de abusos sexuales >>, dan porcentajes aún más elevados: según este informe, en la Francia 7,8% de las mujeres y 4,6% de los hombres declaran haber sufrido uno o más abusos sexuales antes de la edad de 18 años. [3]
En los Estados Unidos, hay un aumento del 526% de las violaciones entre 1960 y 1986. Isabel Holzman, Fiscal General de Brooklyn, escribía en mayo de 1989 en Nueva York Times:
< < La violencia sexual contra las mujeres esta estallando. Más de 3.400 mujeres presentarán denuncia para violación este año en Nueva York y se violarán varios millares mas sin que presenten denuncia. Según el FBI, se viola a una mujer cada seis minutos en los Estados Unidos.Se violará a una mujer sobre diez en su vida >>.[4]
Añade que una investigación puso de manifiesto que un hombre sobre doce reconoce su implicación en una violación, sin por ello considerarse como un violador.
B/ Informe al Parlamento Europeo sobre la pornografía
El 23 de septiembre de 1993 se celebró al Parlamento Europeo una sesión especial sobre el problema de la pornografía, con la presentación del < < Informe de la comisión de libertades públicas y asuntos interiores sobre la pornografía >>. Al igual que el Informe Meese, la comisión del Parlamento Europeo reconoce que:
< < El consumo masivo de pornografía dicha "sin violencia" influye, en las personas interrogadas, sobre su actitud respecto a la violación en la medida en que este delito se considera como menos grave >>.[5]
El informe de la comisión del Parlamento Europeo concluye:
< < La pornografía es una forma de violencia sexual ejercida contra las mujeres ya que promueve una imagen de la mujer estereotipada, ensalzando la violencia y/o la degradación y atenta así contra la condición y a la calidad de vida de las mujeres, o incluso desprecia sus derechos elementales >>.
Lo Point del 24 de octubre de 1988 presento el testimonio de un policía de la Brigada de estupefacientes y del proxenetismo (BSP), de la antigua Brigada antivicio:
< < Las escenas de violencia sexual vistas en la televisión esta ligada a una banalización de la violación. En la actualidad sucede a menudo que un violador se asombra, en un interrogatorio, que la violación esté castigada por la ley. La televisión, de alguna manera, empieza da comienzo banalización que pasa por la muerte de la prohibición >>.[6]
En conclusión, se establece claramente que el aumento de las agresiones sexuales está vinculado de manera compleja al aumento de la pornografía. El empleo de jóvenes mujeres en posturas que humillan para el disfrute masculino es un factor que induce a la vez una mayor aceptación de la violencia sexual y una insensibilidad respecto a las consecuencias que implica.
C/ Testimonio de Ted Bundy, violador y asesino de 28 jóvenes muchachas.
El testimonio de un gran criminal, Ted Bundy, ejecutado en la silla eléctrica de Starks, en el Estado de Florida, el 24 de enero de 1989, por la violación y el asesinato de 28 jóvenes mujeres, ilumina de manera sugestiva los daños irreparables causados por la costumbre pornográfica. En una entrevista rodada la víspera de su ejecución, este joven hombre de trato afable describe el espiral inevitable en el cual se encontró implicado.
Esto sucedió en etapas, gradualmente. En primer lugar me convertí en un entusiasta de la pornografía y la considero como una clase de cuesta resbaladiza; quería ver tipos de materiales cada vez más violentos, más explícitos, más descriptivos. Como una droga, conservan una excitación insaciable hasta que alcanzaran un punto donde la pornografía no puede ir más lejos. Alcanzan este punto donde da el salto, es el paso cuando uno se preguntan si el hecho de pasar al acto en ese momento les aportará más que solamente de leerlo y observarlo >>.[7]
Entre todos los criminales sexuales con quienes se encontró en la prisión, dice, todos habían sido influidos profundamente y condicionados por una costumbre a la pornografía.
D/ El aumento del número de violadores menores de edad
El efecto de la pornografía es más fuerte en los niños y adolescentes, que son más receptivos a las imágenes. Esta es la razón por la que se observa hoy, en todos los países de Europa, un aumento muy neto del número de violadores menores. Para la sola ciudad de Nueva York, había en un año un aumento del 27% de las detenciones de violadores menores de 18 años, y un aumento del 200% de las detenciones de violadores menores de 15 años.[8]
En el programa ‘La marcha del Siglo’ del miércoles 22 de septiembre de 1993, una joven mujer daba testimonio de haber sido violada por cuatro adolescentes de 16 años. En ningún momento, durante esta emisión, le hizo la pregunta: ¿Por qué adolescentes llegan a estos extremos? En Bretaña, durante el verano 1991, se violó a una niña de 14 años, de manera repetitiva y durante dos meses, por un grupo de once muchachos, ocho eran menores. Estos muchachos no eran jóvenes al abandono. Varios pertenecían a familias bien constituidas. ¿Cómo pudieron, día tras día, agredir a esta niña amenazándola de muerte si hablara, hasta que logro fugar para escaparse de su pesadilla, y que, encontrada por los gendarmes, puede hablar? Simplemente porque algunos de entre estos muchachos tenían cintas de vídeo porno, que pasaban y volvían a pasar.
En conclusión, es importante poner de relieve el informe que existe entre la venta de revistas pornográficas en los quioscos y los supermercados y el desarrollo de la criminalidad más cruel. La pornografía está vinculada con crimen a sus dos extremos: de un lado están los vendedores, que no son otra cosa que proxenetas, y los violadores de niños, y del otro lado están los consumidores, que son absorbidos, en primer lugar mentalmente luego físicamente, en el ciclo infernal de la sexualidad violenta y fatal.
6. La pornografía agrede a los niños
A/ Porque la pornografía infantil (Kiddy-porn) es el producto de lujo de la pornografía.
El informe Meese pone de manifiesto que la pornografía no es un problema que se refiere solamente a los adultos, puesto que existen 260 publicaciones de pornografía infantil en los Estados Unidos. La comisión Meese informa que la estrategia usual para utilizar niños como material pornográfico es forzarles en primer lugar a observar a alta dosis películas pornográficas antes de hacerlos imitar delante de la cámara lo que vieron. En una mayoría de los casos, los padres son cómplices de estas prácticas
La comisión Meese oyó el testimonio de algunas víctimas de la pornografía. Por ejemplo, Mary Steinman:
< < Mi abuso comenzó a la edad de tres años. Mi padre guardaba maletas enteras de revistas pornográficas... y los utilizaba para darse ideas... Tuve mis manos atadas, mis pies atados con la cinta adhesiva, mi boca cubierta y eso ha seguido haciendo hasta que tenga quince años >>.
Otra mujer explicó que su marido perdió todo interés en ella, y termino con romper su matrimonio porque frecuentaba los peep shows.[9]
Los datos que siguen han sido confirmados por la Comisión del Parlamento Europeo sobre la pornografía. Los expertos de la policía criminal consideran que en Alemania del Oeste, 130.000 niños son obligados cada año por sus propios padres o por parientes a participar en la producción de material o espectáculos pornográficos. [17] La pornografía infantil representa alrededor del 1% del conjunto del mercado de la pornografía. Esta cifra corresponde, para Alemania, a 10 ó 20 millones de revistas o casetes vídeos. El material y los espectáculos pornográficos homosexuales o heterosexuales que utilizan niños muestran relaciones sexuales genitales, orales o anales entre niños o entre adultos y a niños, pudiendo llegar hasta a la sodomía.[10]
La pornografía infantil, que pone en escena niños, es especialmente lucrativa ya que estos productos se venden a precio alto. Según el Informe del Parlamento Europeo sobre la pornografía:
< < El desarrollo de la actividad comercial vinculada a la pornografía infantil es considerable y pasa por anuncios cifrados o no en las revistas especializadas, la prensa diaria o sobre videotexto... En la República Federal de Alemania existe, según algunas fuentes, una red también de intercambio de vídeos que agrupa alrededor 30.000 miembros, que difunde entre otras cosas películas pornográficas utilizando a niños >>.[11]
B/ Porque los niños son las víctimas privilegiadas de los embaucadores sexuales envenenados por la pornografía.
Según el informe sobre < < los niños víctimas de abuso sexuales >> realizado en 1992, en Francia 7,8% de las mujeres y un 4,6% de los hombres declaran haber sufrido uno o más abusos sexuales antes de la edad de 18 años.[12] En este mismo informe se lee que < < la edad del niño de más riesgo está entre 9 y 12 años >>, y que un 6% de los niños llevados al hospital por abusos sexuales tienen menos de 6 años. [13]
La cosa es tanto mas más grave por cuanto los niños que sufren un abuso sexual, a menudo son marcados emocionalmente de por vida, hasta el punto que perpetúan más tarde los crímenes que sufrieron. Así pues, un 80% de los padres maltratando fueron maltratados de niños, y un 80% de los niños maltratados se convierten en padres que maltratan. Una investigación puso de manifiesto que, de seis sujetos que habían sufrido una agresión sexual en su infancia, cinco se convirtieron en pederastas. Dos prostitutas sobre 3 dicen haber sido víctimas de sevicias sexuales en su infancia.
En marzo de 1991, un magistrado de Langon declaraba con motivo de la detención de un hombre que había secuestrado y violado a una niña:
< < En esta clase de asunto, se hace siempre la misma comprobación: los culpables coleccionistas de revistas pornográficas como de las películas video porno del comercio o registrados desde el canal porno. Además son todos adeptos frenéticos del Minitel rosado >>.[14]
Ese año fueron asesinados Jérémie (6 años), Miguel (11 años), Sara (6 años), Anaïs (10 años), Laurence (14 años y medio), Sylvie (17 años), Marie-Ángel (13 años y medio), Ingrid y Muriel (10 años).
Según un estudio citado en un informe del Parlamento Europeo,
< < De 21 al 23% de los hombres son atraídos sexualmente por niños. Por lo tanto, numerosos son los hombres que no excluyen completamente la posibilidad de tener contactos sexuales pero cierta inhibición los detiene. La pornografía infantil suprimiría esta inhibición y desencadenaría la violencia sexual para con los niños >>.[15]
Cualquiera que sea la verdad de estas cifras, es cierto que, cuando el impulso sexual es estimulado artificialmente por la pornografía, se vuelve muy sensible y fácilmente salvaje en cualquier ocasión.
Cualquiera que sea la verdad de estas cifras, es cierto que, cuando el impulso sexual es estimulado artificialmente por la pornografía, se vuelve muy sensible y fácilmente espoleado en cualquier ocasión. Un hombre alimentado de imágenes pornográficas generalmente se siente sexualmente estimulado por niños, y sobre todo por sus propios niños con los cuales ya tiene una relación emocional muy fuerte.
Por otra parte, los niños son las víctimas soñadas por los agresores sexuales dopados a la pornografía, ya que son débiles y tienden a tener confianza en el adulto. Es una razón por la cual numerosas personas, respetables bajo todos los aspectos, llegan, tras consumo masivo de pornografía, a abusar sexualmente a los niños.
Quisiera citar el caso de Alessandro Moncini, un industrial italiano que fue detenido por las autoridades californianas el 18 de marzo de 1988 y la juzgó por importación de material < < kiddy porn >> (pornografía infantil) a los Estados Unidos. En su juicio, el juez pidió la audiencia de escuchar las llamadas telefónicas grabadas del FBI., que registraron el siguiente diálogo:
< < Q (Moncini): ¿Qué puedo hacer a este pequeño animal (se trata de una niña originaria de México)? R: Todo.
Q: ¿Puedo encadenarla? R: Por supuesto.
Q: ¿Azotarla? R: Sí...
Q: Puedo hacerle comer m... ¿? R: No sé...
Q: ¿Orinar en su boca? R: Sí, pienso...
Q: ¿Insertar agujas en sus pezones? R: Sí...
Q: Y si el pequeño animal se rompe... Quiero decir es herido...¿? R: Haces desaparecer el cuerpo...
Q: ¿Y eso va a costar cuánto? R: 5.000 dólares >>.
Condenó a Alessandro Moncini, que incurría en una pena de prisión de treinta años y 1 millón de dólares de multa, fue condenado a tres meses de cárcel.[16]
C/ Porque los niños son perturbados profundamente por las imágenes sexuales con las cuales se encuentran todos los días en la calle y en la televisión
Finalmente, es necesario hacer hincapié en el hecho de que el erotismo y la pornografía tienen un efecto especialmente dañino sobre los niños, que hoy por hoy están expuestos constantemente a este espectáculo degradante. Los niños y los adolescentes aún no han adquirido el control de su carácter y de su impulso sexual, ya que los dos estrechamente vinculados. Son, pues, muy influenciables, y todas las imágenes sexuales que ven condicionan la dirección que van a dar a su impulso sexual y en consecuencia a su afectividad. Al estar expuesto de manera repetitiva a imágenes de sexualidad homosexual o violenta, por ejemplo, un adolescente tiene más tendencia de convertirse en homosexual o de comprometerse en una búsqueda excesiva de experiencia sexual. En los niños, el efecto es aún peor, ya que el erotismo y la pornografía destruye completamente su sentido de lo sagrado que son las relaciones entre hombre y mujer, y el ejemplo debería ser para ellos la relación entre su padre y su madre. El espectáculo porno viola su pudor natural y el sentido de la inhibición que les es indispensable para su desarrollo emocional. Destruye su confianza en el mundo adulto, que perciben como un mundo espantoso.
7. La pornografía mantiene la esclavitud sexual
Uno de los efectos de la pornografía consiste en aumentar el espacio de la esclavitud sexual a través del mundo. En primer lugar, todas las mujeres, las jóvenes muchachas y los niños utilizados como material pornográfico son verdaderamente prostituidos y manipulados por los proxenetas que controlan el mercado. Por otra parte, todas las redes de prostitución hacen abiertamente su publicidad en los estudios pornográficos. En realidad, se puede decir que la pornografía no es más que la fachada de un mercado aún más sórdido, el comercio no de la imagen sino de la carne. Numerosos estudios pornográficos, sobre todo homosexuales, dan información de redes de pederastas. La pornografía está pues vinculada a la prostitución del lado de la oferta, se podría decir.
Pero la pornografía está también vinculada a la demanda, es decir, al aumento de consumo. Contrariamente a lo que afirmaba la falsa teoría de la catarsis, la pornografía no permite al consumidor pasar al acto, sino hipertrofia su libido y aumenta su deseo de practicar por sí mismo las imágenes que la obsesionan. Es una evidencia que salta los ojos. Todos los clientes de la prostitución son asiduos consumidores de pornografía. Ahora bien, el mundo de la prostitución es un verdadero infierno del cual son en gran parte víctimas los menores.
Según una comisión que trabaja bajo los auspicios de la ONU, habría, solamente en París, 8. 000 menores prostitutas, de las cuales 3.000 son niñas.[17] Según cifras publicadas en el Nuevo Observador del 28 de junio de 1990, el volumen de negocios de la prostitución en Francia es de 20 a 22 mil millones de Francos, lo que representa más de 1.000 Francos antiguos por Francés de sexo masculino de entre 20 a 64 años. En Francia, siempre, habría 10.000 a 12.000 proxenetas 80% de los cuales de nacionalidad francesa. Pero, como ha hecho observar el Nuevo Observador, con por término medio una Acta de proceso verbal de más de 1.000 Francos cada tres días por prostituta, significa el Estado que es < < el primero proxeneta de Francia >>.[18]
El 25 de noviembre de 1993, bajo el título < < Prostitución: los nuevos sectores de la esclavitud >>, el Nuevo Observador publicaba un expediente que revelaba las partes escondidas del tráfico mafioso de la prostitución. Se trata de un verdadero mercado internacional de esclavos. Aprovechando la miseria de algunos países de América Latina o Asia, y más recientemente de países del Este, proxenetas atraen jóvenes muchachas por medio de publicidad falsa ofreciendo empleos en Europa. Las secuestran, les quitan sus pasaportes, las violan, las aterrorizan y las fuerzan a prostituirse en el Eros Center de Amsterdam o en otra parte. Las que se escapan de este infierno lo hacen a riesgo de su vida. Pero la mayoría, aterrorizadas, condicionadas, pegadas y humilladas, hablando ni siquiera la lengua del país y no teniendo más su pasaporte, pierden toda voluntad de salirse. En Francia, la mayoría de las prostitutas extranjeras se importó en estas condiciones. Un periodista belga, Chris de Stoop, hizo una investigación encubierta, al riesgo de su vida, en estos medios, y da prueba de la sórdida realidad de este tráfico en su obra: “Son tan gentiles, Sr. Los traficantes de mujeres en Europa.”[19]
Con el desarrollo de la pornografía homosexual se desarrolla también la prostitución homosexual. De jóvenes adolescentes se suministran a este infierno y, para buen número de ellos, se convierten en travestidos luego incluso transexuales para aumentar sus rentas. Philippe, un sero-positivo que comenzó su carrera prostituido de homosexual a 16 años, luego de travestido, dice el universo sórdido de la prostitución en Francia en su relato: El Infierno está a sus puertas. [20]
B/ El turismo sexual una de las formas el más repulsivas de la prostitución.
En Tailandia, en Filipinas, en Brasil, Malasia, el Zaire, en Ghana, en Vietnam, el turismo sexual florece. Decenas de millones de turistas vuelven cada año a estos países con el único fin de aprovecharse de la miseria hay para suministrarse impunemente a todas las perversiones sexuales, en particular en lo que se refiere a niños. Son principalmente los estudios pornográficos que hacen la publicidad abierta de esta forma asquerosa de explotación de los países pobres. El turismo sexual representa un 60% del conjunto de los ingresos turísticos en Tailandia, y un 50% en Kenia, Filipinas y Corea del Sur.[21] Esta forma de turismo aporta 3 mil millones de dólares de rentas a Tailandia, y constituye su primera fuente de divisas, lo que explica el laxismo del Gobierno.[22] Según algunas fuentes, la mitad de las prostitutas están infectadas por el VIH.
Lo que atrae especialmente a la clientela de los países desarrollados, es la carne fresca a bajo precio. Estos países son paraísos para los pederastas. En Tailandia, se considera que se esta suministrando a 200.000 niños – sacados a su familia o secuestrados en los campos de refugiados por redes mafiosas - a la prostitución. En los hoteles de Bangkok y Pattaya, son secuestrados, maltratados, violados.[23] La mayoría termina como víctimas del SIDA. Marie-Francia Botte, asistente social, y Juan- Paul Mari, describen el infierno de estos niños en un libro: El Precio de un niño.[24]
¿Cómo negar la estrecha conexión entre el mercado de la pornografía y el de la prostitución y el turismo sexual? ¿Cómo negar que la pornografía es, esencialmente, un medio de publicidad para todos los proxenetas? ¿Cómo negar que el Estado, al tolerar y al gravar esta publicidad, como lo hace con el Minitel rosado, se vuelve culpable de proxenetismo?
8. La complicidad y la hipocresía de los medios de comunicación
A/ La torta de la libertad de expresión.
Que sean de derecha o izquierda, la gran mayoría de los medios de comunicación ideológicamente se caracteriza por una ideología resultante de la revolución sexual de los años sesenta. La consigna de la revolución sexual, es, en dos palabras: "el máximo de sexualidad con el mínimo de procreación".
Es evidente que los medios de comunicación son ampliamente responsables del desarrollo de la pornografía. En nombre de la sacro santa libertad de expresión, se levantan contra toda tentativa de aplicar las leyes que condenan "las ofensas a las buenas costumbres" y contra la aplicación de la censura. Convendría recordar que la libertad de expresión no incluye la libertad de denigrar, humillar a la mujer representándolo como un objeto sexual o un animal del que debe gozarse.
Es necesario observar que la libertad de expresión no ocupa, en la Declaración Universal de los Derechos humanos, una posición prioritaria; solo figura en el artículo 19 de un texto que, antes de la enumeración de todos los derechos, lugar en su artículo 1 la dignidad humana.
Además, el Pacto sobre los Derechos Civiles y Políticos, párrafo 3 del artículo 19, tomó cuidado de precisar que el ejercicio de la libertad de expresión puede < < someterse a restricciones >>, necesarias < < por respeto de los derechos o de la reputación de otros, o a la protección de la seguridad nacional, el orden público, la salud o la moral pública >>. [25]
Cuando un Ministro de Cultura se convierte en partidario incondicional de la pornografía, nuestra sociedad corre los mayores peligros. El Sr. Jack Lang, en efecto, en numerosas ocasiones ha expresado su gusto y su preferencia para la pornografía. Declaraba en 1992 en la radio NRJ, con respecto al lanzamiento del libro Sex de Madonna:
< < Hoy día, en las paredes, en la televisión, se exponen todos los temas, todos los tabúes son trastornados. ¿Por qué ofuscarse de este libro o de un aspecto de la obra de Madonna? No leí este libro, pero estoy en cualquier caso en contra de todas las formas de censura. Madonna habla crudamente, es su manera de ser y la respeto. Todo lo que es mojigatería me irrita un poco >>.
Es también con el mismo argumento de la libertad de expresión que, en marzo de 1994, el Ministro de Comunicación haciendo la defensa de una emisión de radio del nombre de Lovin' fun, censurado para sus mensajes indecentes dirigidos a los jóvenes.
Abusar del pretexto de la libertad de expresión, es la actitud típica de el que reclama la libertad sin querer proponerse hablar de responsabilidad. Jacques Attali ilustra a maravilla este discurso irresponsable cuando escribe, por ejemplo, con cinismo agresivo: < < La lógica socialista, es la libertad, y la libertad fundamental, es el suicidio. En consecuencia, el derecho al suicidio directo o indirecto es un valor absoluto en este tipo de sociedad >>. [26]
Contra esta lógica totalitaria que hace de la libertad de expresión un derecho absoluto y prioritario, es necesario recordar que la censura es un derecho fundamental de la sociedad; es el derecho de las familias protegerse contra la agresión verbal y por la imagen. El derecho de los hombres y sobre todo de las mujeres de no ser insultados y humilladas por mensajes que los reducen a animales que deben gozarse.
Notas
[1] Final report of the Attorney General' s Commission on Pornography, Rutledge Hill Press, Nashville Tennessee, 1986.
[2] El comportamiento sexuale en Francia, OP. cit., pp. 216-17
[3] Marceline Gabel (publicado bajo la dirección de), los niños víctimas de abusos sexuales, PUF, 1992, p. 39.
[4] Nueva York Times, 5 de mayo de 1989.
[5] Ibid, p. 37.
[6] Le Point, 24 de octubre de 1988.
[7] El texto original inglés se publicó en De rayos X él a the Family Citizen, marzo de 1989; la traducción en francés se encuentra en la Guía jurídica y práctica (puesta mecum) para luchar con éxito contra los incentivos al vicio de los pornotraficants, Textos escritos y reunidos por el Círculo de la Ciudad Viva, 1992, pp. 94-97.
[8] Nueva York Times, 5 de mayo de 1989.
[9] March Bell, "The case for censorship of pornography", The World and I, juillet 1986, pp. 90-94.
[10] Ibid.
[11] Parlamento Europeo, OP. cit., p. 30..
[12] Los niños víctimas de abusos sexuales, OP. cit., p. 39.
[13] Investigación realizada por Liliane Deltaglia, citada por Claude Balier en "psicopatología de los autores de delitos sexuales relativos a los niños", los niños víctimas de abusos sexuales, OP. cit., p. 152.
[14] Ciudad en Deseado Dutonnerre, la marea negra de la pornografía. Una plaga en los orígenes y en las consecuencias mal conocidas, Ediciones de Chiré, 1992, p. 260.
[15] Parlamento Europeo, OP. cit., p. 30.
[16] Extracto de New Look, citado en Deseado Dutonnerre, OP. cit., p. 60
[17] Denis Périer, El expediente negro del Minitel Rosado, Blanco Michel, 1988, p. 190.
[18] Nuevo Observador, 28 de junio de 1990.
[19] Chris de Stoop, Son tan agradables, Sr.. Los traficantes de mujeres en Europa, la Larga Vista, 1993.
[20] Profesor Henri Alegre (dirigido por), el Infierno está a sus puertas, Ediciones O.E.I.L.
[21] Parlamento Europeo, OP. cit., p. 30.
[22] El Apartado, 31 de julio de 1989.
[23] Nuevo Observador, 11 de noviembre de 1993.
[24] Marie-Francia Botte y Juan- Paul Mari, el Precio de un niño, Laffont, 1993.
[25] Ciudad en Deseado Dutonnerre, OP. cit., p. 32.
[26] Jacques Attali, citada por Marc Dem, Carta a M. Cualquier sobre los niños artificiales, Ediciones Dismas.