Fiesta del Bautismo del Señor C - Catequesis preparatoria para Niños: Preparemos con ellos la Acogida de la Palabra de Dios proclamada en la Misa
Catequesis I ¿Cómo es Jesús?
Catequesis II Testimonio de la Vida
Más recursos para vivir la Palabra
Falta un dedo: Celebrarla
A. Pasaje dominical:
Lc 3, 15 -16. 21 -22
Tú eres mi hijo, el amado, al que miró con cariño
1. El contexto
Al igual que los demás sinópticos, San Lucas introduce la vida pública de
Jesús con la descripción de tres acontecimientos:
Predicación de Juan Bautista
Bautismo de Jesús
Tentación de Jesús en el desierto
Parece que formaba parte de una catequesis bautismal de la primera comunidad
cristiana.
2. El texto
a) Se enseña claramente la diferencia entre el bautismo de Juan
Bautista y el de la comunidad cristiana.
b) El anuncio de Juan Bautista evoca lo promesa del Antiguo Testamento de
que Dios dará el espíritu a su pueblo en tiempos del mesías. El bautismo
cristiano eleva al hombre a una nueva dimensión de Dios.
c) El fuego es imagen y símbolo del juicio que realizará el mesías (Jn 30,
33; Mal 3, 19).
d) Al bautizarse Jesús se integra a la fila de los hombres y las palabras
del Padre manifiestan que Jesús es el Hijo de Dios habiéndose hecho Hijo del
Hombre.
e) La Iglesia proclama que en Jesús se realiza la profecía de Isaías como la
presenta la primera lectura de la fiesta (Is 42, 1 -4. 6 -7)
B. Catequesis I ¿Cómo es
Jesús?
La cara de Jesús
Un señor había tenido un sueño en el cual había visto a Jesús. Para poder
recordarlo para siempre, encargó a un pintor famoso que pintara la figura de
Jesús. El pintor le presentó varios esbozos, pero el señor no estaba
contento. El pintor pinto la figura de Jesús con pelo largo, pelo corto, con
ojos oscuros, con ojos claros, pero el señor repetía que no lo reconocía.
Desesperado el pintor renunció al trabajo. Unos días más tarde lo visitó el
señor mencionado en su casa y miraba los muchos retratos que había hecho el
pintor. Y de repente exclamó: "Aquí lo reconozco, en este cuadro también, en
aquel también". Eran pinturas de personas cuyo rostro reflejaba bondad.
Jesús en el NT
Aquí les he traído varias biblias. ¿Hay voluntarios que quieran ayudarme?
Bueno. Por favor, cada uno tenga una Biblia o un NT y busqué donde dice cómo
es Jesús, si era alto o flaco, si tenía barba o no, si llevaba el cabello
largo o corto. Les ayudaré también a buscar. Aquí dice el ángel que para que
lo reconozcan los pastores, que está en un pesebre pero no dice cómo era su
aspecto. ¿Qué dice la parte donde ustedes están buscando?… (No dice nada).
Tendremos que quejarnos con Jesús que los apóstoles y los evangelistas no
han hecho bien su trabajo porque no nos dicen cómo era el aspecto de Jesús.
Quisiéramos saber tanto como era.
¿Cómo es Jesús?
Hace algunos años me presentaron a un señor que se llamaba López. Charlamos
un ratito. Quedé bien impresionado. De vez en cuando lo encontré en la calle
y le saludé. ¿Cómo que lo reconocía?… (Porque recordaba su aspecto). Y no
podemos reconocer a Jesús si por si acaso camina por la calle. Un día me dio
un fuerte dolor de muela y me recomendaron mucho a un dentista y verdad que
me ayudó sin hacerme sufrir mucho. ¿Saben quién era? Era el señor que
acostumbraba saludar en la calle. De repente tenía mucho más importancia
para mí porque me podía ayudar. Algunos meses más tarde me pedían ayudar en
un curso de scouts y la tarea era que junto con otra persona iba a dirigir
la reunión. Salió muy bien. Trabajamos muy bien juntos. ¿Saben quién era?…
(El dentista). Ya lo conocía mucho mejor porque sabía que podíamos trabajar
juntos. ¿Pueden decirme que es más importante, saber cómo es su cara y el
color de su cabello o cómo es su persona?… (Saber cómo es su persona). Y
cuando pensamos en Jesús, ¿qué es más importante, que sepamos cómo es el
color de su cabello y de sus ojos o si sabemos que nos ama y pueda
ayudarnos?… (Que puede ayudarnos y nos ama). ¿Qué es más importante, saber
si era alto o bajo o si puedo trabajar junto con él en algo maravilloso?…
(Que puedo a trabajar con él en algo maravilloso).
Jesús es Dios y Hombre
El Evangelio de hoy nos dice dos cosas muy importantes acerca de Jesús
¿Ustedes recuerdan por qué la gente vino a bautizarse con Juan el Bautista?
Les voy a ayudar. Juan Bautista había predicado "Conviértanse". Entonces la
gente que viene a bautizarse, ¿qué es lo que quiere?… (Convertirse).
¿Convertirse de qué?… (De sus pecados). Reconocían sus pecados. Y Jesús
también quiere bautizarse. ¿Él es un pecador?… (No). ¿Por qué se bautiza y
entonces?… (Por amor). Es que quiere estar con los hombres que somos unos
pecadores. ¿Saben ustedes por qué Jesús lo hace?… (Porque nos ama, porque
quiere ayudarnos). Díganme ustedes, ¿qué es más importante, saber que Jesús
llevaba barba o que quiere estar con nosotros porque nos quiere?… (Porque
quiere estar con nosotros porque nos ama). Esto es una de las cosas más
importantes que dice el Evangelio. Luego hay otra cosa importante. Alguien
habla desde el cielo y dice algo acerca de Jesús ¿?… (Tú eres mi Dijo el
amado al que miro con cariño). ¿Quién está hablando?… (Dios Padre). Esto nos
enseña que Jesús no sólo es hombre sino que también es ¿?… (Dios). Esto
significa que es poderoso y junto con Él puedo hacer muchas cosas buenas.
¿Qué es más importante saber, si Jesús era alto o saber qué es el hijo de
Dios con el cual puedo hacer muchas cosas buenas?… (Que es el Hijo de Dios).
Los apóstoles y los evangelistas han hecho bien su trabajo al decirnos estas
cosas ¿verdad?… (Si). Porque estas cosas son más importantes que escribir el
aspecto de Jesús.
Nuestra cara…
¿Recuerdan al señor que de repente cómo empezó a reconocer la cara de Jesús
en muchas pinturas? ¿Cómo es que reconoció a Jesús en estas caras?… (Porque
reflejaban bondad). Les voy a contar de un niño que un día se levantó con un
humor negro, con una cara que daba miedo por lo lúgubre y a marca que
estaba. Se sentó en la mesa donde los demás hermanos y sus padres estaban
conversando alegremente. Al sentarse todos lo miraban y dejaban de hablar
porque su malhumor se extendía como una nube en todo el cuarto. Después de
un rato de silencio incómodo el papá le dijo: "¡Oye chico, su cara no te
pertenece! Tú no ves tu cara, pero nosotros la contemplamos todo el tiempo,
tu cara nos pertenece, entonces hace el favor de regalarnos otra cara".
Nosotros quisiéramos no sólo regalar a los demás una cara alegre sino
quisiéramos que reconozcan en nuestra cara ¿a quién?… (Jesús). ¿Y cómo
haremos esto? ¿Poniéndonos una peluca o una barba para asemejarnos a Jesús?…
(No, teniendo una cara buena). Ya saben lo que vamos a hacer durante la
semana. Vamos a regalar a los demás una cara ¿?… (Buena). Pero ustedes bien
saben que uno puede fingir. Para regalar a los demás una buena cara ¿cómo
deben ser los pensamientos en nuestro corazón?… (Buenos). Les revelo también
una manera de cómo conseguir automáticamente una cara buena: hagan un
servicio a los demás y verán cómo su cara cambia.
2. Catequesis II
Testimonio de la vida
El testimonio del hombre.
(Nota: se llama a un muchacho a que se acerque. Ha venido con sus padres con
los que ha hablado antes el catequista).
Aquí les presento a un muchacho. Vive 1 m 45, tiene La cara inteligente, y
es como todos ustedes. ¿Que más pueden decirme del?… (Donde vive, como se
llama, etc.). ¿Como saben esto?…) Nos lo ha dicho, lo vimos en la casa de
sus padres). ¿Cómo podemos estar bien seguros? Déjeme imaginarme algo.
Supongamos que les han robado el hijo cuando era debe y los padres han ido
al orfanatorio y ahí han escogido a un niño para que sea el hijo de ahora en
adelante. ¿Conocen a alguien que puede decirnos si pertenece de verdad a la
familia o si solamente es adoptado?… (Los padres). Por favor los padres
pueden acercarse… ¿es cierto que este muchacho es hijo suyo… (es nuestro
hijo) muchas gracias. ¿Ellos son tus padres?
El testimonio de Dios
Hemos querido ser tan exactos porque estamos pensando en un testimonio que
hemos oído en el Evangelio. Jesús era como los demás hombres. Pero no sabían
en realidad quién era. Parecía incluso un pecador puesto que se acercaba
para hacerse bautizar como los demás. Entonces alguien da testimonio ¿?…
(Dios Padre). ¿Qué dice?… (Que Jesús es su hijo). Por el testimonio del
Padre sabemos que Jesús es el Hijo de Dios.
Nuestro testimonio
Ahora bien, ¿cómo puede llegar la gente de hoy saber que Jesús es el Hijo de
Dios? No recuerdo que alguien haya contado que personalmente ha escuchado
una voz del cielo que dijo: "Jesús es mi hijo". Sin embargo, todos los que
estamos aquí creemos que Jesús es el hijo de ¿?… (Dios). ¿Acaso ustedes han
oído una voz del cielo?… (No). ¿Cómo llegamos a saber entonces que Jesús es
el Hijo de Dios?… (Por nuestros padres, por la Iglesia, por los profesores,
etc.). Gracias a Dios que alguien nos lo que contado. ¿Nosotros mismos
podemos ayudar a que la gente sepa que Jesús es el Hijo de Dios?… (Sí). Es
que nosotros también podemos decir a los demás que Jesús es el Hijo de Dios.
Los demás, ¿cuándo van a oir mejor, cuando susurró "Jesús es el Hijo de
Dios", o cuando lo digo bien fuerte: "Jesús es el Hijo de Dios"?… (Cuando lo
digo bien fuerte). ¿Cuándo van a creer con mayor facilidad, cuando digo
medio inseguro "Me parece que Jesús es el hijo de Dios", o cuando digo
convencido "Creo firmemente que Jesús es el Hijo de Dios"? (Cuando lo digo
de manera convencida). A ver, ¿quién quiere dar testimonio a todos aquí
reunidos? Les vamos a decir bien fuerte y bien convencidos: "Jesús es el
Hijo de Dios".
(…)
Nosotros somos hijos de Dios porque Jesús es el hijo del hombre.
Les cuento algo que leí hace tiempo: La hija de del rey de Francia estaba
muy molesta porque pensaba que su criada no le mostraba el respeto que ella
pretendía; quería que la venia sea más profunda. Exclamó: "¿No sabe que soy
la hija del rey?". La criada contestó: "¿No sabe que soy hija de Dios?". ¿La
criada tenía razón?… (Sí). Por medio de Jesús Dios nos ha dado su propia
vida, la vida de la gracia. ¿Ustedes recuerdan cuando la han recibido?… (No,
porque éramos bebés). ¿Pero saben cuando la recibieron?… (El día del
bautismo). No se les ocurra pensar que Jesús se recibió este mismo bautismo
por manos de Juan el Bautista. Jesús ya tenía la vida porque él es Dios
junto con el Padres y el Espíritu Santo. Oigan esto: Un misionero en la
Oceanía predicaba a los indígenas el Evangelio pero no le hicieron caso; no
aceptaron. Desesperado el misionero pensó, si me pongo a vivir de la misma
manera que ellos quizás me entiendan. Se quitó los vestidos europeos, se
construyó una choza como ellos, comió la misma comida y aprendió su idioma.
La cosa cambió. Ellos le dijeron: "Ahora te creemos porque eres uno de los
nuestros; te tenemos confianza, antes te teníamos miedo". Jesús hizo igual.
Dejó la gloria de su divinidad y se vistió ¿?… (Con el cuerpo humano). Vivió
entre nosotros, se hizo hijo del hombre, hasta que se hizo bautizar como si
fuera un pecador para darnos un ejemplo. ¿Para qué hizo todo esto?… (Para
que no tengamos miedo, para que lleguemos a ser hijos de Dios). Se hizo hijo
del hombre para que nosotros llegamos a ser hijos de ¿?… (Dios). Nosotros
recibimos esta misma vida de Dios en el bautismo.
¿Recuerdan lo que pasó cuando Jesús se hizo bautizar por Juan el Bautista?…
(Se abrió el cielo, el Espíritu Santo bajó sobre él y una voz dijo: "Este es
mi hijo muy amado, al que miro con cariño"). Y les digo una cosa: esto mismo
pasa cuando alguien se bautiza. Se abren los cielos, baja sobre el bautizado
el Espíritu Santo y Dios dijo: Tu… (nombre) eres mi hijo muy amado, te miro
con cariño). Somos hijos de Dios en verdad.
El testimonio de los hijos de Dios
¿Recuerdan que al comienzo pregunté también al chico si éstos eran sus
padres? El nos pudo dar testimonio de ellos porque eran sus padres. Le
habían dado la vida y lo querían, por eso podía hablar de ellos. ¿Nosotros
podemos hablar de Dios por qué?… (Nos ha dado la vida divina, y nos quiere).
Cuando vemos a un chico inteligente entonces pensaremos que sus padres serán
¿?… (Inteligentes). ¿Cuando vemos a unos chicos buenos, entonces pensamos
que sus padres son ¿?… (Buenos). ¿Cómo debemos ser nosotros para que la
gente reconozca en nosotros que somos hijos de Dios?… ¿Cómo es Dios con los
hombres?… (Bueno, cariñoso, se preocupa, etc.). Entonces ¿nosotros tenemos
que ser?… (Buenos, cariñosos, preocuparnos, etc.). Cada uno se propone una
cosa para esta semana. ¿A ver qué piensas hacer tú para que reconozcan en ti
quieres hijo de Dios?… Si quieren, podemos hacer una lista.
C. Liturgia
Elementos que pueden ayudar:
Averiguar el día del bautismo y celebrarlo en intimidad con Dios
Revisar nuestras oraciones y nuestra manera de participar en la Santa Misa
Confesarse los que no lo han hecho desde hace más de mes y medio o dos meses
D. Vivencia familiar
Sugerimos repasar con los hijos el rito del bautismo. Cuenten lo
que pasó, quienes estaban, que se dijo, muestren fotos. Su testimonio de
Jesús es la mejor escuela apostólica para los hijos. El hogar es un campo
relativamente fácil para dar testimonio. Vean también como siquiera una vez
a la semana se puede reunir la familia alrededor de la Biblia.
E. El niño
La realidad de que somos hijos de Dios debería ser razón suficiente
para enseñarle al niño una religión de alegría, de confianza y de felicidad.
Si la vida en la propia casa no es feliz será muy difícil hacerle entender
al niño algo de la felicidad de ser hijo de Dios. En cambio, un niño que
tiene un padre jovial y una madre paciente, tendrá mucha más facilidad de
encontrar a Dios como es en verdad.
F. Condición previa
Un ateo muy famoso dijo una vez: "los cristianos deberían tener más
caras de redimidos". Nuestro comportamiento de catequista, nuestra cara
puede tener mucha importancia y hasta más importancia que nuestras palabras
mismas. Nuestra manera de ser, nuestra manera de hablar debería reflejar
algo de esta alegría de los redimidos.