Problemas con los hijos. Cómo aprender a prevenirlos, afrontarlos y solucionarlos: 10 principales problemas y 20 preguntas y 16 claves para la solución
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ACI Prensa
Los 10
principales problemas de los hijos, con los padres
Las 20
principales preguntas ante los problemas
Los 16 conceptos clave para manejar los problemas con los hijos:
Solucionar los problemas, se puede comparar a comerse un elefante, cuya
única manera es partiéndolo en pequeños trozos. Si se analizan bien los
problemas y se trocean, es posible que cada trozo, tenga una solución y
tiempo diferente.
Algunos problemas hay que intentar solucionarlos, pensando al revés de su
normal desarrollo. Empezando desde prever el final e ir marcha atrás, hasta
hoy, previendo y situándose en el hipotético mundo, de las presentes y
futuras consecuencias e influencias, en el conjunto de la vida de los hijos
y de la familia. Es una muy buena forma de encararlo, al buscar las
soluciones a las distintas fases del problema, desde el prisma del momento
actual y futuro.
Los padres tienen que centrarse, tanto en las soluciones, como en los
problemas. Las soluciones tienen que definirse en forma, tiempo y lugar,
además de complementarlas con las preguntas de ¿por qué, para qué, cómo y
cuándo?
Los problemas están presentes, los hayamos descubierto o no, llegarán cuando
menos los esperemos, o cuando hayamos calculado que llegue. Pero llegar,
llegan. Lo importante es prepararse para su llegada, su resolución y asumir
o luchar contra las consecuencias. Hay que intentar que no nos superen,
hundan o paralicen, pues entonces, es mucho más difícil salir de ellos.
Siempre parece que el problema de hoy, es mucho más importante, intenso y
difícil, que todos los que hubo anteriormente. Cada problema se soluciona de
una manera e intentamos que pasen al olvido, aunque sus consecuencias o
soluciones, hayan quedados fijados en algún punto de la memoria. Pero el
problema que llega hoy, es el que nos puede quitar la calma, sin pensar que
otros problemas anteriores, también lo hicieron, pero que con la perspectiva
de lo pasado, ya nos parece que no eran tan importantes, en relación con lo
que en su momento creímos.
Es conveniente repasar lo que ocurrió y la angustia que pasamos,
comparándolos con los problemas actuales y ver que, le estamos dando
demasiada importancia o que las soluciones que les dimos, podrían aplicarse
hoy también. Así cuando pase el tiempo, nos demostrará que siempre sale el
sol, después de las tormentas, aunque a algunos les dejen empapados, si no
han sido prevenidos.
Los “hijos trofeo” son los que sirven a los padres, para exponerlos ante la
sociedad, mostrándolos como signos externos de riqueza. Suelen ser las
consecuencias, de las frustraciones personales o colectivas, que creen que
van a solucionarse, con la imagen de los padres proyectada en sus hijos.
Será muy difícil que los padres puedan prevenir, afrontar y solucionar los
problemas que produzcan esos “hijos trofeo”, pues los mismos padres,
irresponsablemente, son los que les han inducido a crearlos, ya que les han
rodeado de lo máximo que pueden darles, e incluso de lo que no deben darles,
ni les hace falta.
Los 10 principales problemas de los hijos, con los padres: (La intensidad,
frecuencia, negociación y consecuencias, dependerán de la edad física y
mental de cada uno de los hijos).
1. Sobre la aceptación de la autoridad de los padres.
2. Sobre la administración del dinero, que quiere percibir y lo que
necesita, o quiere que le compren.
3. Sobre la calidad y tratos con sus amistades.
4. Sobre la desviación y obediencia a las normas familiares.
5. Sobre la formación religiosa y social.
6. Sobre las relaciones con los otros familiares: Abuelos, tíos, primos,
etc.
7. Sobre las relaciones y comparaciones, con los otros hermanos y
familiares.
8. Sobre los estudios. Dedicación, horarios, disciplina, resultados,
profesores, etc.
9. Sobre los horarios de levantarse y llegada a la casa.
10. Sobre llevar un plan de vida familiar, escolar y social, previamente
negociado.
Los problemas son cuestiones, hechos, disgustos, preocupaciones, situaciones
o circunstancias, que están sin aclarar y que es difícil o dudoso, encontrar
sus soluciones. Aunque algunos tengan una sóla, otros tienen múltiples, pues
si no, no serían problemas, serían hechos irresolubles. El asunto es
encontrar la más adecuada a las personas y a las circunstancias.
Los problemas llegan atropellándose, unos encima de otros, casi siempre sin
avisar. Lo que no se suele saber, a no ser que se haya previsto, es cómo,
cuándo y por qué vienen. Hay que tener previstas con anticipación, las
soluciones de los posibles problemas, que pudieran llegar. Si no se tienen
previstas las soluciones, se debe salir a buscarlas inmediatamente, mucho
antes de que los problemas se enquisten, consoliden o se hagan añejos y de
difícil solución.
Las 20 principales preguntas ante los problemas:
1. ¿A quién le corresponde solucionarlo?
2. ¿Atraigo los problemas, porque soy problemático con mis actitudes de
vida?
3. ¿Cómo nos afectan los problemas y sus consecuencias presentes y futuras,
a mi cónyuge, a mí, a los hijos, a la familia, a los amigos y a la sociedad?
4. ¿Con quién he consultado el problema buscando soluciones?
5. ¿De qué forma voy a convivir con el problema, si no lo soluciono?
6. ¿Es siempre o casi siempre, la misma persona o circunstancia, la que
produce el problema?
7. ¿Hay disposición para cumplir las soluciones recomendadas o acordadas,
para corregir los problemas?
8. ¿He aceptado o enfrentado, las realidades de los problemas?
9. ¿He analizado cuál es la causa, por los que han podido surgir los
problemas?
10. ¿He analizado las ventajas e inconvenientes, de las posibles situaciones
presentes y futuras, producidas por el problema?
11. ¿He analizado, definido, desglosado o desmenuzado sin pasión, los
problemas lo más concretamente y en tantas partes, como se pueda hacer?
12. ¿He buscado y encontrado soluciones razonables y viables a los
problemas, que estén al alcance de la mano y que no sean quimeras?
13. ¿He confundido los deseos con las realidades, frente a los problemas?
14. ¿He tratado de buscar, si se pueden sacar algunos beneficios de los
problemas?
15. ¿Me doy cuenta que cuando no me enfrento al problema, con soluciones
razonables, este se agranda más y es más difícil solucionarlo?
16. ¿Me he rebelado interna o externamente, contra los problemas?
17. ¿Me meto constantemente en problemas, que luego no puedo solucionar?
18. ¿Por qué tengo ese problema?
19. ¿Preveo los problemas que pueden ocurrirme y preparo con anticipación,
las posibles soluciones?
20. ¿Quién ha sido el responsible de la causa del problema?
Los padres “habriaqueístas” y “ojalahubieraístas” son los menos
eficientes,cuando se tienen que enfrentar al tener que buscar soluciones a
los problemas reales, presentes o futuros de los hijos. ¿Qué habría sucedido
si hubiéramos o hubieran hecho las cosas, de otra manera? Pero no se han
hecho como hubiéramos querido. Se han hecho, como se han hecho. ¡Ojala
hubiera habido otra forma de hacer las cosas! Es una pérdida de tiempo,
alejarse de la realidad y pasarse el día pensando, en cómo deberían haber
sido las cosas.
Los padres no deben permitir contaminarse del “habriaqueísmo” ni del
“ojalahubieras”, si no tratar de idear, encontrar, planear y proyectar las
soluciones concretas, ante problemas bien definidos. Pero esto requiere
mucho esfuerzo, si no se está muy bien educado en las virtudes y valores
humanos, principalmente en alegría, fe, esperanza y amor.
Los padres nunca deben cansarse de hacer propósito y planes, para prever los
posibles problemas, que les pudieran llegar a través de los hijos. Si no
aciertan a la primera, deben volver a intentarlo, todo antes de perder la
sensibilidad necesaria, para saber localizar los problemas y las soluciones.
No deben seguir cerrando los ojos, pactando con un sistema, simplemente
porque“Aquí así funciona”, o porque “Todos lo hacen”, “Es mucho más cómodo”.
Siempre hay una alternativa, con palabras o acciones, para encontrar las
soluciones correctas, pues la educación en la familia, está llena de
sacrificios, caídas, esfuerzos y alzadas.
Los 16 conceptos clave para manejar los problemas con los hijos:
1. Analizar los problemas y errores propios, para esforzarse en cambiarlos,
mucho antes de buscar soluciones a los problemas de los hijos, pues es
posibles que los padres, sean la causa o el efecto, de los problemas de los
hijos.
2. Buscar opciones y soluciones. Enseñar a los hijos, a no conformarse con
las primeras ideas de respuestas que aparezcan, sin haber colaborado
previamente en las “tormentas de ideas” compartiéndolas entre toda la
familia.
3. Conocer profundamente a cada uno de los componentes familiares, para que
cuando llegue la hora de los análisis y soluciones, haya ya un camino
abierto para ellas.
4. Demostrar empatía e identificación mental y afectiva, que incluya la
actitud positiva con él o los hijos, que han causado el problema, aceptando
que los cambios, forma parte del desarrollo de la vida de todos.
5. Desarrollar la capacidad de adaptación familiar, para afrontar los
problemas, evitando que ellos anulen o desborden, la disposición de los
padres para buscar las mejores soluciones.
6. Enseñar a dialogar. Fomentándoles la habilidad, para que dialogando sepan
convencer, explicar y persuadir las ideas que expongan.
7. Entusiasmar sin decaimiento ni desánimo, para resolver los problemas,
pensando en los futuros beneficios, de la posible desaparición de los
contratiempos.
8. Evaluar y analizar los puntos fuertes y los puntos débiles del problema,
y de cada uno de los miembros familiares a los que atañe o van a atañer, las
incertidumbres.
9. Evitar tener miedo a intentar resolver los problemas. Solamente hay que
tener miedo, si se carece de la valentía de preverlos e identificarlos y de
analizar las soluciones.
10. Fomentar la creatividad y la curiosidad, para examinar el entorno y así
poder extraer ideas, que luchen contra la incertidumbre y que ayuden a tener
una mente despierta constantemente, en la búsqueda de nuevas soluciones, a
los problemas de siempre y a los futuros.
11. Incrementar el criterio, la ponderación y el espíritu selectivo, para
que sepan y puedan analizar, todas las partes que componen el problema, así
como las posibles soluciones y repercusiones. A poder ser con ejemplos
concretos, de situaciones reales.
12. Organizar la familia, tanto en la parte de la planificación de los
proyectos y actividades, como en la exposición de las ideas, pues así se
pueden evitar las frustraciones.
13. Promover la comunicación familiar, dejando hablar a los hijos y
alentándoles, a que se expliquen con todos los detalles, sin interrupciones
y sin escatimarles el tiempo, de forma que se sientan cómodos, en su forma
de expresión.
14. Rechazar el pesimismo y la indecisión, aunque haya incertidumbre del
futuro, para que se pueda apreciar, más oportunidades de alternativas y
soluciones de los problemas.
15. Resistir ante las adversidades e incertidumbres que crean los problemas,
para con flexibilidad poder hacerles frente y sobreponerse a ellos, para
buscar la forma de salir reforzado.
16. Trabajar en equipo. Para la búsqueda de soluciones a los problemas. La
familia tiene que ser un bloque unido, para que sea indestructible.
Las 29 mejores sentencias sobre la resolución de los problemas:
1. Cuando atrasamos la cosecha, los frutos se pudren, pero cuando atrasamos
los problemas, no paran de crecer.
2. El hombre se descubre, cuando se mide con un problema.
3. El modo de resolver los problemas, es enfrentarse a ellos.
4. En la práctica, sólo es problema, lo que la inteligencia puede resolver.
5. Hay que apresurarse siempre, hacia la solución de los problemas, para que
no se hagan viejos.
6. La cooperación no es la ausencia de problemas, si no el medio para
resolverlos.
7. La formulación o descubrimiento de un problema, es más importante que su
solución.
8. La mayoría de personas, gastan más tiempo en hablar de los problemas, que
en afrontarlos
9. La vida no es dejar que pase el problema. Es aprender a solucionarlo.
10. Los problemas existen desde siempre. No hay que tratar de evitarlos, si
no de entenderlos, para solucionarlos.
11. Los problemas presentan la oportunidad, de dar el máximo esfuerzo.
12. Los problemas son frecuentemente, las herramientas con las que Dios nos
adapta, para dar un paso adelante.
13. Los problemas son mensajes que hay que saber descifrar, para
solucionarlos.
14. Los problemas son oportunidades, para demostrar lo que se sabe.
15. Los problemas, como los elefantes, solamente se puede comer a trocitos.
16. No hay ningún problema que no ofrezca, el regalo de la solución.
17. No hay que buscar culpables, si, soluciones.
18. No podemos evitar cometer errores, pero si podemos poner constantemente
atención, para tratar de evitarlos.
19. No resolver los problemas, es garantizar un problema mayor.
20. Para los problemas hay que ponerse la venda, antes que la pedrada.
21. Plantearse los menos problemas posibles, es la única manera de
resolverlos.
22. Prevenir los problemas, es casi curarlos de antemano.
23. Quien sabe resolver problemas, es menos eficiente, que quien sabe
evitarlos.
24. Se requieren nuevas formas de pensar, para resolver los problemas
creados, por las viejas formas de pensar.
25. Sí a causa de un problema, se convocan muchas reuniones, las reuniones
llegarán a ser, más importantes que el problema.
26. Si un problema puede plantearse, también puede resolverse.
27. Sólo hay una manera de ser feliz y es dejando de preocuparse por los
problemas, que están fuera de nuestro control.
28. Son los problemas sin resolver, no los resueltos, los que mantienen
activa la mente.
29. Un problema deja de serlo, si no tiene solución.