[_Sgdo Corazón de Jesús_] [_Ntra Sra del Sagrado Corazón_] [_Vocaciones_MSC_]
 [_Los MSC_] [_Testigos MSC_
]

MSC en el Perú

Los Misioneros del
Sagrado Corazón
anunciamos desde
hace el 8/12/1854
el Amor de Dios
hecho Corazón
y...
Un Día como Hoy

y haga clic tendrá
Pensamiento MSC
para hoy que no
se repite hasta el
próximo año

Los MSC
a su Servicio

Portal MSC Perú

Mapa del Sitio

WeblogMSC

Escribirnos


free counters

DOMINGO 9 TIEMPO ORDINARIO A: 'Creyente puede ser quien sólo cree; Cristiano, quien cree y vive lo creído'

 

Iglesia del Hogar
Nos preparamos en casa

 

La Palabra de Dios 
La Palabra de Dios y yo - cómo acogerla
Falta un dedo: Celebrarla

INDICE

I. LA PALABRA DE DIOS

A. Comentarios de Sabios y Santos

B. Suplementos

II. APUNTE BÍBLICO-LITÚRGICO

III. SITUACIÓN HUMANA

IV. LA FE DE LA IGLESIA

* La fe

* La respuesta

* El testimonio cristiano

 

 

 

 

I. LA PALABRA DE DIOS

 

* Dt 11,18.26-28: “Mirad, os pongo delante bendición y maldición” 

* Sal 30,2-3.3-4.17 y 25: “Sé la roca de mi refugio, Señor” 

* Rm 3,21-25.28: “El hombre es justificado por la fe, sin las obras de la ley” 

* Mt 7, 21-27: “La casa edificada sobre roca y la casa edificada sobre arena”.

 

 

A. Comentarios de Sabios y Santos

 

 

B. Suplementos

 

II. APUNTE BÍBLICO-LITÚRGICO

 

·         “Meteos mis palabras en el corazón” (1.a Lect.). Se desprende del contexto que lo que se quiere decir es: “Escuchad la Palabra y hacedla amor y vida”. 

·         Hombre sabio es el que escucha las palabras y las pone en práctica: edifica sobre roca. El que escucha las palabras y no las pone en práctica, es un necio que edifica sobre arena. Este se limita a decir: “Señor, Señor...” Aquél, además, “hace la voluntad del Padre”. Este último se salva; aquél no. 

·         Las expresiones de San Pablo “por la fe en Jesucristo viene la justicia de Dios a todos los que creen”; “el hombre es justificado por la fe” (2.a Lect.) enseñan que la fe, es decir, la adhesión y conformidad con Jesús en su entrega a la voluntad del Padre es la que únicamente justifica. La santidad es la respuesta a la fe.

 

III. SITUACIÓN HUMANA

 

·         No son los teólogos, ni los predicadores, ni los grandes organizadores, ni los cristianos rutinarios “de toda la vida”, los que cambiarán el mundo; serán los santos. 

·         La vida misma del hombre avala la eficacia del obrar por encima del decir. Al hombre que actúa y lo hace de acuerdo con su pensar, se le admira, incluso sin compartir sus ideas. Al que cifra su vida en grandes palabras, solemnes discursos y nulas acciones, al principio se le escucha; poco después, ni eso.

 

IV. LA FE DE LA IGLESIA

* La fe

 

·         _ El nombre de Dios, signo de fidelidad al hombre:“En el transcurso de los siglos, la fe de Israel pudo desarrollar y profundizar las riquezas contenidas en la revelación del Nombre divino. Dios es único: fuera de Él no hay dioses. Dios trasciende el mundo y la historia. Él es quien ha hecho el cielo y la tierra: ``Ellos perecen, mas tú quedas, todos ellos como la ropa se desgastan... pero tú siempre el mismo, no tienen fin tus años''. En él ``no hay cambios ni sombras de rotaciones''. Él es ``Él que es'', desde siempre y para siempre y por eso permanece siempre fiel a sí mismo y a sus promesas” (212; cf. 213-224).

 

* La respuesta

 

·         _ La Ley nueva o ley evangélica:

·         “La ley evangélica entraña la elección decisiva entre ``los dos caminos'' y la práctica de las palabras del Señor; está resumida en la regla de oro: ``Todo cuanto queráis que os hagan los hombres, hacédselo también vosotros; porque  esta es la Ley y los profetas''(Mt 7,12). Toda ley evangélica está contenida en el mandamiento de Jesús: amarnos los unos a los otros como él nos ha amado” (1970).

·         _ La ley evangélica lleva a  plenitud los mandamientos: 1970; cf. 1965. 1966. 1967.

 

* El testimonio cristiano

 

·         _ “Toda la pretensión de quien comienza oración (y no se olvide esto, que importa mucho), ha de ser trabajar y determinarse y disponerse, con cuantas diligencias pueda a hacer su voluntad conformar con la de Dios; estad muy ciertas que en esto consiste toda la mayor  perfección que se puede alcanzar en el camino espiritual” (Santa Teresa de Jesús, Mor. II.).

·         _ “El que quiera meditar con piedad y perspicacia el Sermón que nuestro Señor pronunció en la montaña, según lo leemos en el Evangelio de San Mateo, encontrará en él sin duda alguna la carta perfecta de la vida cristiana...Este Sermón contiene todos los preceptos propios para guiar la vida cristiana (S. Agustín, serm. Dom. 1,I)” (1966). 

·         El verdadero discípulo de Jesús une su sí a Dios, al sí de Jesús a su Padre.